Oportuna la conformación en Valledupar de una Junta Defensora de Animales, para evitar actos de crueldad, maltrato y abandono injustificado de animales, que con Decreto Municipal a bordo le da un estatus a esta nueva organización interdisciplinaria.

Era justo que el maltrato animal estuviera en la agenda de la sociedad vallenata y que se pasara de la crítica a la acción. Buen trabajo tienen los miembros de la Junta Defensora de Animales, más cuando son respaldados y liderados por la Administración Municipal, que bien claro tiene el panorama en la ciudad.

Son más de tres mil animales en estado de abandono que deambulan por las calles, sumados a los casos de maltrato que a diario que observan en los diferentes sectores de la ciudad, especialmente los caballos que todavía utilizan como medio de transporte para carga pesada (carros de mulas). Hay que recordar que la Ley 84 de 1989 (Estatuto Nacional de Protección de los Animales) establece sanciones económicas y penales a las personas que maltraten animales o que causen su muerte. ¿Cómo van a implementar esta Ley en la ciudad?

Los fines nobles de esta Junta están claros. Sus miembros deben comenzar su trabajo con paso firme y para ello deben motivar y liderar campañas de adopción de animales abandonados. En Bogotá y otras ciudades colombianos existen múltiples ejemplos de estos programas exitosos, que ahora con el uso de redes sociales llegan a muchas más personas, cumpliendo con su objetivo.

Pero definitivamente la tarea que debe impulsar, aunque no sea de su directa responsabilidad, es el funcionamiento del tan fracasado Coso Municipal, que es el sitio de albergue o lugar adecuado para los animales que se encuentren vagando en sitios públicos o los animales que puedan transmitir o propagar a las personas alguna enfermedad.

Si conocen casos de maltrato animal, de animales enfermos o abandonados: ¿A dónde llevaran a esos perros, gatos o caballos, por ejemplo? Al Coso Municipal es la respuesta. Pero como no existe, es urgente que este tema –ahora si- sea abordado por la Alcaldía Municipal, que a pesar de que desde junio del 2013 los concejales llamaron la atención sobre esta situación, se ha hecho la de oídos sordos. El desinterés por los animales es tal que hasta a los concejales se les olvidó que en alguna sesión preguntaron por el Coso Municipal. ¿Será que este año sí?