Cuando de aquí (de Valledupar) le enviaron al presidente Santos el requerimiento de nombrar en un alto cargo del gobierno, por lo menos a un representante de los departamentos del Cesar o de La Guajira, argumentando que estas dos regiones desde hacía rato estaban huérfanas de poder a nivel central a pesar de ser los principales productores de carbón con aporte importante al producto interno del país; en realidad, me sorprendió la designación de Amilkar Acosta Medina como Ministro de Minas y Energía, debido al antagonismo del nuevo Ministro con varias posiciones del gobierno del presidente Santos, entre las cuales resaltan las políticas neoliberales, tal como la venta de ISAGEN, una de las más grandes empresas generadoras y comercializadoras de energía con alta rentabilidad.