Con el objetivo de "apoyar a los colombianos en un contexto de precios elevados", las entidades bancarias han reducido sus altas tasas de interés.
Los beneficiarios de crédito a largo plazo solo pagarán el IPC (IPC+0%).
Con la llegada de la transformación digital, los bancos empezaron a reemplazar sus formas convencionales de servicios financieros por sistemas digitales sencillos y de fácil acceso para llegar a la mayor cantidad de clientes con menores costos administrativos y financieros.