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Columnista - 11 octubre, 2016

Suelo sujeto a la regularización urbanística

Ha justificado la Administración que por tratarse de predios que se sustraen de una zona de reserva forestal y que se desarrollaron sin cumplir con ningún tipo de obligaciones de espacio público para parques y zonas verdes, equipamientos ni vías locales, ni cumplieron con la obligación de vivienda de interés social o prioritario requerida en […]

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Ha justificado la Administración que por tratarse de predios que se sustraen de una zona de reserva forestal y que se desarrollaron sin cumplir con ningún tipo de obligaciones de espacio público para parques y zonas verdes, equipamientos ni vías locales, ni cumplieron con la obligación de vivienda de interés social o prioritario requerida en los procesos de urbanización, se les exigirá el pago compensatorio de la obligación al Fondo Cuenta de Espacio Público en proporción igual al 100% del valor catastral del predio que se sustrae de la zona de esta reserva forestal.

Nada más injusto y desproporcionado se está presentado para los dueños o desarrolladores de proyectos en ese sector. Lo primero sea decir que el Concejo y la Administración Municipal están llamados a favorecer a la ciudadanía con normas claras y justas aplicables a la realidad, para evitar impactos negativos en lo ambiental, urbanístico y social en este municipio y no para someternos a normas absurdas con explicaciones infundadas, ya que estos entes no pueden autorizar el cobro por las gestiones que hagan para mejorar la calidad de vida pues es su obligación. Ni más faltaba que por aplicar oportunamente una resolución del Ministerio para sustraer dichos predios de la reserva forestal se tenga que pagar el 100% del valor actual catastral del lote como compensación, si es que se quiere desarrollar algún proyecto. Esa imposición es ilegal. No se puede premiar a la Administración por incompetente, ya que todos esos inmuebles fuera de norma se construyeron bajo sus propias narices y hasta exfuncionarios públicos intervinieron áreas de reserva para sus viviendas campestres que hoy son arrendadas por horas para eventos sociales; entonces queda demostrado que el gran beneficiado fue la Administración municipal la cual se amparó en esta norma para legalizar sus omisiones y no pagar por el daño que se le hizo a la reserva forestal y al medio ambiente como actualmente está sucediendo en otras áreas de reserva irrumpidas por viviendas y que muy probablemente la Administración está esperando que se incremente la cantidad para sustraerlas y cobrar nuevamente, igual al acostumbrado proceso de invasión.

Esto es lo que sucede amigo lector, nosotros estamos pagando las omisiones permanentes del control físico porque tenga la seguridad que hoy ocurre lo mismo en la reserva forestal con intervenciones de obras ilegales hasta con valla publicitaria, sin control alguno. Ese es el ejemplo, conductas reprochables de entidades oficiales a los particulares porque en esa farsa se apoya el infractor. Las obras suspendidas con bombos y platillos, selladas exteriormente; en la realidad siguen campantes su objetivo, sin multas, sin demoliciones, sin nada, como se puede comprobar analizando las decenas de procesos activos en la oficina jurídica de Planeación y en la inexistencia de procesos fallados radicados en la Secretaría de Gobierno para ejecución. Parecería que el silencio y la ineficacia de las autoridades competentes fueran sus cómplices para contribuir al caos urbanístico que vivimos hace más de veinte años sin esperanza alguna de resolverse por falta de autoridad.

Columnista
11 octubre, 2016

Suelo sujeto a la regularización urbanística

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Augusto Enrique Orozco Sanchez

Ha justificado la Administración que por tratarse de predios que se sustraen de una zona de reserva forestal y que se desarrollaron sin cumplir con ningún tipo de obligaciones de espacio público para parques y zonas verdes, equipamientos ni vías locales, ni cumplieron con la obligación de vivienda de interés social o prioritario requerida en […]


Ha justificado la Administración que por tratarse de predios que se sustraen de una zona de reserva forestal y que se desarrollaron sin cumplir con ningún tipo de obligaciones de espacio público para parques y zonas verdes, equipamientos ni vías locales, ni cumplieron con la obligación de vivienda de interés social o prioritario requerida en los procesos de urbanización, se les exigirá el pago compensatorio de la obligación al Fondo Cuenta de Espacio Público en proporción igual al 100% del valor catastral del predio que se sustrae de la zona de esta reserva forestal.

Nada más injusto y desproporcionado se está presentado para los dueños o desarrolladores de proyectos en ese sector. Lo primero sea decir que el Concejo y la Administración Municipal están llamados a favorecer a la ciudadanía con normas claras y justas aplicables a la realidad, para evitar impactos negativos en lo ambiental, urbanístico y social en este municipio y no para someternos a normas absurdas con explicaciones infundadas, ya que estos entes no pueden autorizar el cobro por las gestiones que hagan para mejorar la calidad de vida pues es su obligación. Ni más faltaba que por aplicar oportunamente una resolución del Ministerio para sustraer dichos predios de la reserva forestal se tenga que pagar el 100% del valor actual catastral del lote como compensación, si es que se quiere desarrollar algún proyecto. Esa imposición es ilegal. No se puede premiar a la Administración por incompetente, ya que todos esos inmuebles fuera de norma se construyeron bajo sus propias narices y hasta exfuncionarios públicos intervinieron áreas de reserva para sus viviendas campestres que hoy son arrendadas por horas para eventos sociales; entonces queda demostrado que el gran beneficiado fue la Administración municipal la cual se amparó en esta norma para legalizar sus omisiones y no pagar por el daño que se le hizo a la reserva forestal y al medio ambiente como actualmente está sucediendo en otras áreas de reserva irrumpidas por viviendas y que muy probablemente la Administración está esperando que se incremente la cantidad para sustraerlas y cobrar nuevamente, igual al acostumbrado proceso de invasión.

Esto es lo que sucede amigo lector, nosotros estamos pagando las omisiones permanentes del control físico porque tenga la seguridad que hoy ocurre lo mismo en la reserva forestal con intervenciones de obras ilegales hasta con valla publicitaria, sin control alguno. Ese es el ejemplo, conductas reprochables de entidades oficiales a los particulares porque en esa farsa se apoya el infractor. Las obras suspendidas con bombos y platillos, selladas exteriormente; en la realidad siguen campantes su objetivo, sin multas, sin demoliciones, sin nada, como se puede comprobar analizando las decenas de procesos activos en la oficina jurídica de Planeación y en la inexistencia de procesos fallados radicados en la Secretaría de Gobierno para ejecución. Parecería que el silencio y la ineficacia de las autoridades competentes fueran sus cómplices para contribuir al caos urbanístico que vivimos hace más de veinte años sin esperanza alguna de resolverse por falta de autoridad.