Las sorpresas electorales se han vuelto una constante en estos últimos años, con resultados que oscilan drásticamente de un lado al otro. Son los tiempos de los bandazos. Aquí algunos ejemplos recientes que ilustran algunos casos en el mundo occidental
Las sorpresas electorales se han vuelto una constante en estos últimos años, con resultados que oscilan drásticamente de un lado al otro. Son los tiempos de los bandazos. Aquí algunos ejemplos recientes que ilustran algunos casos en el mundo occidental
España: en 2023, Pedro Sánchez, presidente del gobierno español, perdió las elecciones autonómicas y municipales en mayo. En un movimiento audaz y sorprendente, disolvió el parlamento y convocó elecciones anticipadas para el 23 de julio. Aunque no ganó directamente, logró tejer alianzas con minorías y así se invistió nuevamente como jefe de gobierno. En apenas semanas, pasó de estar prácticamente derrotado a reelegirse como gobernante.
Francia: este año, Emmanuel Macron perdió estrepitosamente frente a la extrema derecha en las elecciones del Parlamento Europeo el 9 de junio. Decidió disolver la Asamblea Nacional y convocó elecciones de primera vuelta para el 30 de junio y de segunda para el 7 de julio en una maniobra arriesgada. Aunque no ganó, una alianza entre el centro y las izquierdas evitó que la extrema derecha, encabezada por Marine Le Pen, llegara al poder. Otro cambio drástico, bandazo, en cuestión de semanas.
En los dos casos se esgrimió como estrategia, la llegada de la extrema derecha al poder. Y les funcionó. También le puede funcionar a Kamala Harris en Estados Unidos contra Trump.
Estados Unidos: en EE.UU., Kamala Harris ha revigorizado al Partido Demócrata tras la retirada de Joe Biden de la contienda. Con un récord de donaciones que alcanzó en pocas horas los 126 millones de dólares de 1.4 millones de personas, Harris ahora aventaja a Trump por dos puntos en encuestas recientes. La política norteamericana también ha sido escenario de sorpresas: el atentado contra Trump, la retirada de Biden y la ascendente candidatura de Harris.
Venezuela: en Venezuela, las encuestas y el fervor popular indican una clara ventaja para Edmundo González, el candidato de María Corina Machado. La gran incógnita es si Nicolás Maduro reconocerá los resultados. La presión internacional aumenta, con figuras como Lula da Silva, presidente de Brasil, y Gabriel Boric, presidente de Chile, exhortando a Maduro a respetar los resultados electorales. Gustavo Petro, presidente de Colombia, también podría jugar un papel crucial en asegurar una transición pacífica del poder en Venezuela.
En resumen, la política mundial se mueve con rapidez y está llena de sorpresas. Los próximos meses serán críticos no solo para Venezuela y Estados Unidos, sino que también lo están siendo para Francia y España. La incertidumbre y los cambios abruptos parecen ser la nueva norma en el panorama político global.
Por Enrique Herrera
@enriqueha
Las sorpresas electorales se han vuelto una constante en estos últimos años, con resultados que oscilan drásticamente de un lado al otro. Son los tiempos de los bandazos. Aquí algunos ejemplos recientes que ilustran algunos casos en el mundo occidental
Las sorpresas electorales se han vuelto una constante en estos últimos años, con resultados que oscilan drásticamente de un lado al otro. Son los tiempos de los bandazos. Aquí algunos ejemplos recientes que ilustran algunos casos en el mundo occidental
España: en 2023, Pedro Sánchez, presidente del gobierno español, perdió las elecciones autonómicas y municipales en mayo. En un movimiento audaz y sorprendente, disolvió el parlamento y convocó elecciones anticipadas para el 23 de julio. Aunque no ganó directamente, logró tejer alianzas con minorías y así se invistió nuevamente como jefe de gobierno. En apenas semanas, pasó de estar prácticamente derrotado a reelegirse como gobernante.
Francia: este año, Emmanuel Macron perdió estrepitosamente frente a la extrema derecha en las elecciones del Parlamento Europeo el 9 de junio. Decidió disolver la Asamblea Nacional y convocó elecciones de primera vuelta para el 30 de junio y de segunda para el 7 de julio en una maniobra arriesgada. Aunque no ganó, una alianza entre el centro y las izquierdas evitó que la extrema derecha, encabezada por Marine Le Pen, llegara al poder. Otro cambio drástico, bandazo, en cuestión de semanas.
En los dos casos se esgrimió como estrategia, la llegada de la extrema derecha al poder. Y les funcionó. También le puede funcionar a Kamala Harris en Estados Unidos contra Trump.
Estados Unidos: en EE.UU., Kamala Harris ha revigorizado al Partido Demócrata tras la retirada de Joe Biden de la contienda. Con un récord de donaciones que alcanzó en pocas horas los 126 millones de dólares de 1.4 millones de personas, Harris ahora aventaja a Trump por dos puntos en encuestas recientes. La política norteamericana también ha sido escenario de sorpresas: el atentado contra Trump, la retirada de Biden y la ascendente candidatura de Harris.
Venezuela: en Venezuela, las encuestas y el fervor popular indican una clara ventaja para Edmundo González, el candidato de María Corina Machado. La gran incógnita es si Nicolás Maduro reconocerá los resultados. La presión internacional aumenta, con figuras como Lula da Silva, presidente de Brasil, y Gabriel Boric, presidente de Chile, exhortando a Maduro a respetar los resultados electorales. Gustavo Petro, presidente de Colombia, también podría jugar un papel crucial en asegurar una transición pacífica del poder en Venezuela.
En resumen, la política mundial se mueve con rapidez y está llena de sorpresas. Los próximos meses serán críticos no solo para Venezuela y Estados Unidos, sino que también lo están siendo para Francia y España. La incertidumbre y los cambios abruptos parecen ser la nueva norma en el panorama político global.
Por Enrique Herrera
@enriqueha