EL PILÓN ha registrado en su sección de Comunidad las dificultades que pasan los habitantes de los corregimientos de Valledupar a la hora de desechar la basura, pues sencillamente no tienen dónde botarla y menos quién las recoja. Ejemplos palpables, cuyos habitantes han expresado su inconformidad, son los de los corregimientos de Mariangola y Aguas […]
EL PILÓN ha registrado en su sección de Comunidad las dificultades que pasan los habitantes de los corregimientos de Valledupar a la hora de desechar la basura, pues sencillamente no tienen dónde botarla y menos quién las recoja.
Ejemplos palpables, cuyos habitantes han expresado su inconformidad, son los de los corregimientos de Mariangola y Aguas Blancas, en el sur de la capital del Cesar, hasta donde la empresa Aseo del Norte no llega a recolectar la basura por varias razones: no está establecido en su contrato (solo la recolección en zona urbana), las comunidades no quieren pagar el servicio y no hay un convenio entre la Alcaldía de Valledupar y la empresa que permita prestar el servicio de forma gratuita.
El problema, por las causas que sean, debe solucionarse pronto porque es un asunto sanitario, que de no atenderse a tiempo puede colapsar y generar ambientes de riesgo para la salud de los pobladores que hoy viven en los 25 corregimientos de Valledupar.
En varias ediciones hicimos énfasis en este asunto porque preocupaba que las personas vivieran un mes con la basura en los patios, en las puertas, o en el peor de los casos, las quemaran en lotes enmotados, con los riesgos que ello implica a nivel ambiental.
Parece que ya se vislumbra la solución al asunto, porque la Alcaldía de Valledupar y la empresa Aseo del Norte tienen previsto firmar el próximo 19 de septiembre un convenio para garantizar la recolección y el transporte de los residuos sólidos en los 25 municipios de la ciudad.
Este convenio es un impulso a las comunidades para que asuman la cultura de pago por los servicios públicos. El acuerdo entre la administración y la empresa es solo por tres meses, tiempo durante el cual no cobrarán el servicio, pero pasado este periodo, los usuarios de los corregimientos deben pagar el valor del servicio, según la factura que les llegará, con el derecho a los subsidios respectivos.
Desde el año pasado buscan una solución al problema de las basuras y aunque se tardaron un poco, es bien recibida la noticia. Queda pendiente ahora que las comunidades, las familias, los hogares que se beneficien con el servicio de recolección de los residuos sólidos, paguen por el servicio, y que después de pasados los tres meses, no vuelva a presentarse el caos por las montañas de basura acumuladas porque no quieren cancelar.
EL PILÓN ha registrado en su sección de Comunidad las dificultades que pasan los habitantes de los corregimientos de Valledupar a la hora de desechar la basura, pues sencillamente no tienen dónde botarla y menos quién las recoja. Ejemplos palpables, cuyos habitantes han expresado su inconformidad, son los de los corregimientos de Mariangola y Aguas […]
EL PILÓN ha registrado en su sección de Comunidad las dificultades que pasan los habitantes de los corregimientos de Valledupar a la hora de desechar la basura, pues sencillamente no tienen dónde botarla y menos quién las recoja.
Ejemplos palpables, cuyos habitantes han expresado su inconformidad, son los de los corregimientos de Mariangola y Aguas Blancas, en el sur de la capital del Cesar, hasta donde la empresa Aseo del Norte no llega a recolectar la basura por varias razones: no está establecido en su contrato (solo la recolección en zona urbana), las comunidades no quieren pagar el servicio y no hay un convenio entre la Alcaldía de Valledupar y la empresa que permita prestar el servicio de forma gratuita.
El problema, por las causas que sean, debe solucionarse pronto porque es un asunto sanitario, que de no atenderse a tiempo puede colapsar y generar ambientes de riesgo para la salud de los pobladores que hoy viven en los 25 corregimientos de Valledupar.
En varias ediciones hicimos énfasis en este asunto porque preocupaba que las personas vivieran un mes con la basura en los patios, en las puertas, o en el peor de los casos, las quemaran en lotes enmotados, con los riesgos que ello implica a nivel ambiental.
Parece que ya se vislumbra la solución al asunto, porque la Alcaldía de Valledupar y la empresa Aseo del Norte tienen previsto firmar el próximo 19 de septiembre un convenio para garantizar la recolección y el transporte de los residuos sólidos en los 25 municipios de la ciudad.
Este convenio es un impulso a las comunidades para que asuman la cultura de pago por los servicios públicos. El acuerdo entre la administración y la empresa es solo por tres meses, tiempo durante el cual no cobrarán el servicio, pero pasado este periodo, los usuarios de los corregimientos deben pagar el valor del servicio, según la factura que les llegará, con el derecho a los subsidios respectivos.
Desde el año pasado buscan una solución al problema de las basuras y aunque se tardaron un poco, es bien recibida la noticia. Queda pendiente ahora que las comunidades, las familias, los hogares que se beneficien con el servicio de recolección de los residuos sólidos, paguen por el servicio, y que después de pasados los tres meses, no vuelva a presentarse el caos por las montañas de basura acumuladas porque no quieren cancelar.