Un escalofrío visceral corre por el cuerpo de algunos y otros reaccionaron positivamente tras conocerse el nombre de la candidata a la gobernación, que involucra a la abogada Elvia Milena Sanjuán impuesta por la ‘Casa Cielo’.

Esta imposición “a dedo”, según observadores sigue dando pasos del poder del Clan Monsalvo Gnecco, que ya es cíclico con más de 30 años en el poder político. 

Desde Lucas Gnecco Cerchar (fallecido recientemente) quien fue dos veces gobernador y su sobrino Luis Alberto Monsalvo (hoy con dos detenciones domiciliarias) quien también resultó electo en dos ocasiones, la familia ha influenciado con su “maquinaria proselitista” para elegir en este pasado reciente a Cristian Moreno y a Francisco ‘Franco’ Ovalle. 

Para algunos observadores políticos la figura de Elvia Milena es simplemente una postura para los próximos cuatro años.  En las próximas elecciones ponen a uno de sus familiares y luego esperan otros cuatro años para elegir a otro familiar, porque todos quieren ser gobernadores del Cesar, después será ‘Popo’, José Alfredo, Viviana, ‘Pepe’, ‘Lalo’, Cielo, todos ellos, afirmaron los contradictores.  

Por tal razón, muchos no creen que la recién ungida como candidata opere como una unidad de los partidos políticos, hoy desnaturalizados por los imperios que han creado en cada región, como en el Atlántico y en esta región del país.  “Aquí los dueños de los partidos son los mismos que se venden”, dicen los críticos.  

Otros aplauden y acicalan la escogencia de Elvia Milena, candidata que dicen es de unidad de los partidos tradicionales y aseguran que no es ninguna componenda. 

Sobre ella se sabe que es abogada, oriunda del municipio de San Diego, divorciada y exalcaldesa de su pueblo. Por el momento tiene varias cuentas pendientes de resolver con la justicia y el próximo viernes 28 de julio a las 8 de la mañana fue citada por el Juez Segundo Penal del Circuito de Valledupar a una audiencia preparatoria, acusada por el delito de contrato sin cumplimiento de requisitos legales. 

Según simpatizantes de su candidatura, las acusaciones serán resueltas a su favor y no tiene ningún impedimento para ser elegida y gobernar al Cesar en los próximos años. Sin establecerse si tendrá o no autonomía para gobernar.  

Una de las reacciones contra ella y sus aliados, la hizo la también candidata a la Gobernación, la cronista y periodista Katia Ospino, cuando le dio respuesta a un trino, quien respondió: “gata, no come pantera”.

Llamé a la candidata oficialista Elvia Milena para que explicara, pero nunca respondió el celular. Entonces llamé a Katia Ospino para que ampliara su concepto. Dijo: “Queda corroborado que ella (Elvia Milena) ayer en su rueda de prensa me proclamó su adversaria. Ay contendora. Sabe que la pelea es conmigo”, agregó.

Luego explicó lo de la gata y la pantera: “Desde el sentido biológico y en el orden de la cadena alimenticia, la pantera es superior a la gata, por lo tanto, la pantera no come gata porque yo sería la de más arriba en la cadena, en sentido de superioridad por eso no miras a las presas pequeñas, no son de mi atención. En este sentido, mi adversaria es muy pequeña para mi alimento”, sentenció.

Katia Ospino, la hija del famoso sastre del barrio Doce de Octubre de Valledupar, en donde se crió, hace parte de los cinco candidatos alternativos que están planteando unirse para enfrentar a la candidata del oficialismo gubernamental. Lo que se sabe es que desunidos podrían ser “presas” fáciles y en ese sentido tratan de unificar criterios.   Hasta la próxima semana.

Por Aquilino Cotes Zuleta.