El calentamiento global acabará con la humanidad. Esto no es de ideología de partidos, sino de realidad, y lo más grave es que la gente que más ignora el cambio climático es la que más destruye la naturaleza, sentenció el laureado médico vallenato, especialista en cirugía, José Manuel Romero Churio.

El 10 de diciembre de 1948 como respuesta a los “actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad” cometidos durante la Segunda Guerra Mundial, la ONU inició la lucha por los derechos humanos. Hoy se formulan denuncias por vulnerar la libertad, la educación, la salud o la vida, el don más preciado, pero a la vez el más hollado, pero nunca se había sentenciado por atentar contra el ecosistema. 

Un tribunal internacional con sede en Francia dictaminó que el hecho de que Suiza no abordara adecuadamente la crisis climática constituía una violación de los derechos humanos, en una sentencia histórica sobre el clima que podría tener un efecto dominó en todo el mundo.

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, Francia, dictó sentencia en un caso presentado por más de 2.000 mujeres suizas, la mayoría de ellas mayores de 70 años, contra el Gobierno suizo.

Alegaban que las olas de calor provocadas por el cambio climático mermaban su salud y su calidad de vida, y las ponían en peligro de muerte.

El tribunal sentenció que el Gobierno suizo había violado algunos de los derechos humanos de las mujeres debido a “lagunas críticas” en su legislación nacional para reducir las emisiones de calor del planeta, así como al incumplimiento de objetivos climáticos anteriores.

Esto supuso una violación de los derechos de las mujeres a una protección efectiva frente a “los graves efectos adversos del cambio climático sobre la vida, la salud, el bienestar y la calidad de vida”, afirmó el tribunal en un comunicado.

Es la primera vez que el tribunal se pronuncia sobre un litigio climático. No hay derecho de apelación y la sentencia es jurídicamente vinculante.

En Colombia la crisis ambiental generada por el fenómeno del niño develó los niveles críticos del agua que mueven las turbinas de los sistemas hidroeléctricos del país, lo que generó alarma entre expertos y el propio gobierno, frente a un eventual racionamiento de energía, ya que en Colombia cerca del 70% de la energía eléctrica se produce a partir de embalses, panorama que no es ajeno al calentamiento global y el cambio climático, estimulado por la explotación del carbón y combustibles fósiles, cuyo desmonte debe ser gradual, pero por algo hay que comenzar en la transición a energías limpias.

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales IDEAM, espera lluvias más intensas en mayo en comparación al mes de abril para mantener la senda positiva del nivel de agua en los embalses, lo que aleja un poco el fantasma de un apagón. 

Miguel Aroca Yepes.