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Judicial - 21 diciembre, 2016

Se metieron a la casa que no era, pero igual la atracaron

Un insólito hurto se registró en la cabecera municipal de Fonseca, en el sur de La Guajira, en donde varios hombres que tenían planeado robar en una casa, se metieron en la que no era y qué sorpresa se llevaron al observar al propietario del inmueble que no era a quien estaban buscando.

En esta vivienda ubicada en el perímetro urbano del municipio de Fonseca, sur de La Guajira fue perpetrado el robo. Foto cortesía.
En esta vivienda ubicada en el perímetro urbano del municipio de Fonseca, sur de La Guajira fue perpetrado el robo. Foto cortesía.
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Un insólito hurto se registró en la cabecera municipal de Fonseca, en el sur de La Guajira, en donde varios hombres que tenían planeado robar en una casa, se metieron en la que no era y qué sorpresa se llevaron al observar al propietario del inmueble que no era a quien estaban buscando.

Sin embargo, los maleantes para no irse con las manos vacías, encañonaron a los residentes de la vivienda y obligaron al jefe del hogar a que entregara todo el dinero.

Según la evidencia y los momentos difíciles que padecieron quienes habitan la casa, los delincuentes se apropiaron solo de dos millones de pesos que tenía el comerciante José Agustín Campuzano Zarate, conocido popularmente en la población como ‘Churchil’, a quien lo presionaban para que entregara los 40 millones de pesos que supuestamente tenía guardados.

Los delincuentes al no quedar contentos con la pequeña cuantía que encontraron, procedieron a requisar y revolcar toda la casa en busca del botín; se llevaron una pistola, un reloj, dos televisores de 22 pulgadas, dos portátiles, perfumes, joyas y otros elementos de valor que ascienden a 15 millones de pesos, aproximadamente.

Una vez cargaron con todos estos elementos, uno de los maleantes se le acercó a Campuzano Zarate para pedirle disculpa por lo sucedido y muy amablemente le dijo: “Señor Churchil, muchas gracias por todo, nos equivocamos, la información que nos dieron fue errada, nosotros veníamos por 40 millones de pesos que estábamos seguro usted tenía, pero nos metimos en el lugar equivocado”.

Las autoridades locales emprendieron la búsqueda de los delincuentes con base con las características entregadas por los afectados, al tiempo que analizan algunas cámaras de seguridad que hay en ese sector, en busca de otras evidencias que conduzca a su ubicación.

Por Abdel Martínez Pérez

 

Judicial
21 diciembre, 2016

Se metieron a la casa que no era, pero igual la atracaron

Un insólito hurto se registró en la cabecera municipal de Fonseca, en el sur de La Guajira, en donde varios hombres que tenían planeado robar en una casa, se metieron en la que no era y qué sorpresa se llevaron al observar al propietario del inmueble que no era a quien estaban buscando.


En esta vivienda ubicada en el perímetro urbano del municipio de Fonseca, sur de La Guajira fue perpetrado el robo. Foto cortesía.
En esta vivienda ubicada en el perímetro urbano del municipio de Fonseca, sur de La Guajira fue perpetrado el robo. Foto cortesía.
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Un insólito hurto se registró en la cabecera municipal de Fonseca, en el sur de La Guajira, en donde varios hombres que tenían planeado robar en una casa, se metieron en la que no era y qué sorpresa se llevaron al observar al propietario del inmueble que no era a quien estaban buscando.

Sin embargo, los maleantes para no irse con las manos vacías, encañonaron a los residentes de la vivienda y obligaron al jefe del hogar a que entregara todo el dinero.

Según la evidencia y los momentos difíciles que padecieron quienes habitan la casa, los delincuentes se apropiaron solo de dos millones de pesos que tenía el comerciante José Agustín Campuzano Zarate, conocido popularmente en la población como ‘Churchil’, a quien lo presionaban para que entregara los 40 millones de pesos que supuestamente tenía guardados.

Los delincuentes al no quedar contentos con la pequeña cuantía que encontraron, procedieron a requisar y revolcar toda la casa en busca del botín; se llevaron una pistola, un reloj, dos televisores de 22 pulgadas, dos portátiles, perfumes, joyas y otros elementos de valor que ascienden a 15 millones de pesos, aproximadamente.

Una vez cargaron con todos estos elementos, uno de los maleantes se le acercó a Campuzano Zarate para pedirle disculpa por lo sucedido y muy amablemente le dijo: “Señor Churchil, muchas gracias por todo, nos equivocamos, la información que nos dieron fue errada, nosotros veníamos por 40 millones de pesos que estábamos seguro usted tenía, pero nos metimos en el lugar equivocado”.

Las autoridades locales emprendieron la búsqueda de los delincuentes con base con las características entregadas por los afectados, al tiempo que analizan algunas cámaras de seguridad que hay en ese sector, en busca de otras evidencias que conduzca a su ubicación.

Por Abdel Martínez Pérez