A la 1:30 de la tarde de este jueves, robaron a un fotógrafo de Valledupar mientras realizaba estudio fotográfico en el centro de la ciudad.
A la 1:30 de la tarde de este jueves, robaron a un fotógrafo de Valledupar mientras realizaba estudio fotográfico en el centro de la ciudad.
El reconocido fotógrafo, Nayit Cotes, se encontraba en el conocido callejón de la Purrututu, preferido por fotógrafos y turistas para adornar sus fotografías con la historia y bellos colores que enmarcan esta calle que se encuentra ubicada en el centro histórico de la capital del Cesar.
Cotes estaba compañado de tres mujeres y dijo que se había bajado hace cinco minutos de un taxi cuando tres hombres, cada uno en motocicletas diferentes le pidieron antes de bajarse que se quedaran quietos y de inmediato le pidió la cámara fotográfica. “Mientras entrego mi cámara, otro hombre pide que le entreguemos los celulares, Zoe quien tenía su aparato móvil escondido, no lo entregó y uno de ellos se dio cuenta y pide que lo entregue o si no le da un tiro, la requisaron completa hasta que lo hallaron, antes de irse nos exigieron que no podíamos voltear, si lo hacíamos nos mataban”, explicó el fotógrafo.
Las víctimas de este nuevo atraco en la ciudad aseguraron que los motorizados se alejaron tomando la carrera sexta, y a los pocos minutos llamaron a la Policía pero ya era tarde.
Zoe Mejía, victima, pidió que se duplicaran los cuadrantes de seguridad debido a que en ese momento no había ningún policía ni patrulla cerca del lugar.
A la 1:30 de la tarde de este jueves, robaron a un fotógrafo de Valledupar mientras realizaba estudio fotográfico en el centro de la ciudad.
A la 1:30 de la tarde de este jueves, robaron a un fotógrafo de Valledupar mientras realizaba estudio fotográfico en el centro de la ciudad.
El reconocido fotógrafo, Nayit Cotes, se encontraba en el conocido callejón de la Purrututu, preferido por fotógrafos y turistas para adornar sus fotografías con la historia y bellos colores que enmarcan esta calle que se encuentra ubicada en el centro histórico de la capital del Cesar.
Cotes estaba compañado de tres mujeres y dijo que se había bajado hace cinco minutos de un taxi cuando tres hombres, cada uno en motocicletas diferentes le pidieron antes de bajarse que se quedaran quietos y de inmediato le pidió la cámara fotográfica. “Mientras entrego mi cámara, otro hombre pide que le entreguemos los celulares, Zoe quien tenía su aparato móvil escondido, no lo entregó y uno de ellos se dio cuenta y pide que lo entregue o si no le da un tiro, la requisaron completa hasta que lo hallaron, antes de irse nos exigieron que no podíamos voltear, si lo hacíamos nos mataban”, explicó el fotógrafo.
Las víctimas de este nuevo atraco en la ciudad aseguraron que los motorizados se alejaron tomando la carrera sexta, y a los pocos minutos llamaron a la Policía pero ya era tarde.
Zoe Mejía, victima, pidió que se duplicaran los cuadrantes de seguridad debido a que en ese momento no había ningún policía ni patrulla cerca del lugar.