Las razones de la muerte de Gustavo Román Pinillo Torregrosa, abaleado el jueves pasado, sigue siendo una incógnita.
Sentado en el inmenso patio de su vivienda, típico de los pueblos de la Costa Caribe, rodeado de familiares y amigos que comparten su dolor, encontramos a Gustavo Román Pinillo, quien tuvo la valentía de perseguir hasta el último momento a los asesinos de su hijo.
Cabizbajo, lleno de ira y dolor por ignorar las razones que tuvieron dos hombres motorizados para acabar con la vida de uno de sus 6 retoños, que lleva su mismo nombre, le contó a El Pilón, los minutos más dolorosos de su vida, en los que persiguió a los presuntos responsables de acabar con la existencia del joven Gustavo, quien falleció en el hospital Marino Zuleta de La Paz, en la tarde del pasado jueves.
“Con palos, piedras, a pie, en moto, todos los de La Paz se movilizaron para buscar a esa gente, lo hacían por él, porque era un muchacho muy noble” expresó el señor Pinillo mientras recibía el pésame de amigos y vecinos.
En su intervención, otra persona afirmó “el vivía de sus pájaros y sus gallos, cuidaba gallos finos y canarios, andaba de concurso en concurso, una persona que tenga enemistad no puede andar ese oficio- hubo una pausa mientras se secaba las lágrimas-, era bueno”. Esto decía Fabián Eduardo Pinillo Peraza, tío del joven fallecido, quien también recalcó la amabilidad que caracterizaba a ‘Rinri’, como por cariño llamaban al muchacho.
Poco a poco se fueron sumando a esta improvisada reunión otras personas, mientras que en la terraza y en la sala de la casa permanecían los más allegados con una tasa de café o aromática para acortar la espera del cuerpo sin vida de ‘Rinri’, que sería trasladado desde la morgue de Valledupar hasta La Paz al medio día de ayer.
En medio de la charla con el grupo periodístico de El Pilón, tanto Fabián como Gustavo, aclararon que el menor no era vendedor de combustible ilegal, “eso es mentira, y no es porque sea mi hijo”, alzando las manos, como señalando a su exterior, dijo “si quieren se lo preguntan a la gente del pueblo, mi hijo era sano”.
Esto con motivo de aclaraciones de algunas personas que afirmaron en algún momento que el joven de 22 años fue asesinado porque pertenecía a uno de los grupos que comercializan gasolina en el pueblo pacífico, donde en los últimos días se han presentado retaliaciones entre los expendedores del hidrocarburo.
“¿Por qué lo mataron? Si él era un joven sano” dijo el padre adolorido, cuando supo que su hijo había muerto por un disparo recibido en la espalda, mientras motilaba a uno de sus tantos gallos, que preparaba para pelear. El padre angustiado, salió en su carro en busca de los presuntos sicarios.
“Eso fue de 12:45 a 1:00 de la tarde, yo estaba viendo el noticiero cuando me vinieron a avisar. Pero a mí me dicen, le pasó algo a Gustavo, dijo mi señora y yo sin saber mencioné ¿pero qué le puede pasar?, y ya cuando llego lo habían matado, yo no vi nada… le dieron un tiro por la espalda y le salió por aquí” (dijo mientras señalaba la parte superior de su pierna).
La persecución
Minutos después que Gustavo, padre, conoció la realidad de los hechos comenzó la persecución, en la que se sumaron más de 400 personas con el fin de capturar a los dos hombres, presuntos responsables de la muerte de ‘Rinri’.
“Nosotros perseguimos a la gente, él (Fabián) y mi otro hermano tuvieron intercambio de balas con ellos… yo no atendí al muerto, a Gustavo; enseguida nos fuimos en el carro detrás de los muchachos que se metieron en una trocha y en medio de los disparos salieron corriendo y dejaron la moto tirada y los cascos, nosotros nos trajimos la moto y la entregamos a la Policía” dijo Pinillo.
Sin poder callarse, se levantó de la silla, saludó a un visitante y prosiguió diciendo “él era el tercero de mis hijos… nosotros tuvimos a pocos metros a los sicarios”- interrumpió Fabian- “la gente que estuvo en la persecución no fue por nosotros sino por él, porque él era muy bueno, a él también le decían el ‘Peluo’, porque tenía el pelo como el Pibe”
Agregó “en el momento de la persecución yo le pregunté a los amigos, díganme la verdad ¿el ‘Rinri’ andaba en malos pasos, tenía problemas, que pasó?”
Aún sin encontrar respuestas, los familiares, que hoy despiden para siempre a ‘Rinri’ tienen como hipótesis que la muerte del joven fue una confusión, mientras que las autoridades siguen investigando el motivo del crimen.
La sepultura
Hoy a las 4:00 p.m. será sepultado Gustavo Román Pinillos en el municipio de La Paz, luego de esperar a los familiares que residen en Venezuela.
Por Merlin Duarte García/El Pilón
Las razones de la muerte de Gustavo Román Pinillo Torregrosa, abaleado el jueves pasado, sigue siendo una incógnita.
Sentado en el inmenso patio de su vivienda, típico de los pueblos de la Costa Caribe, rodeado de familiares y amigos que comparten su dolor, encontramos a Gustavo Román Pinillo, quien tuvo la valentía de perseguir hasta el último momento a los asesinos de su hijo.
Cabizbajo, lleno de ira y dolor por ignorar las razones que tuvieron dos hombres motorizados para acabar con la vida de uno de sus 6 retoños, que lleva su mismo nombre, le contó a El Pilón, los minutos más dolorosos de su vida, en los que persiguió a los presuntos responsables de acabar con la existencia del joven Gustavo, quien falleció en el hospital Marino Zuleta de La Paz, en la tarde del pasado jueves.
“Con palos, piedras, a pie, en moto, todos los de La Paz se movilizaron para buscar a esa gente, lo hacían por él, porque era un muchacho muy noble” expresó el señor Pinillo mientras recibía el pésame de amigos y vecinos.
En su intervención, otra persona afirmó “el vivía de sus pájaros y sus gallos, cuidaba gallos finos y canarios, andaba de concurso en concurso, una persona que tenga enemistad no puede andar ese oficio- hubo una pausa mientras se secaba las lágrimas-, era bueno”. Esto decía Fabián Eduardo Pinillo Peraza, tío del joven fallecido, quien también recalcó la amabilidad que caracterizaba a ‘Rinri’, como por cariño llamaban al muchacho.
Poco a poco se fueron sumando a esta improvisada reunión otras personas, mientras que en la terraza y en la sala de la casa permanecían los más allegados con una tasa de café o aromática para acortar la espera del cuerpo sin vida de ‘Rinri’, que sería trasladado desde la morgue de Valledupar hasta La Paz al medio día de ayer.
En medio de la charla con el grupo periodístico de El Pilón, tanto Fabián como Gustavo, aclararon que el menor no era vendedor de combustible ilegal, “eso es mentira, y no es porque sea mi hijo”, alzando las manos, como señalando a su exterior, dijo “si quieren se lo preguntan a la gente del pueblo, mi hijo era sano”.
Esto con motivo de aclaraciones de algunas personas que afirmaron en algún momento que el joven de 22 años fue asesinado porque pertenecía a uno de los grupos que comercializan gasolina en el pueblo pacífico, donde en los últimos días se han presentado retaliaciones entre los expendedores del hidrocarburo.
“¿Por qué lo mataron? Si él era un joven sano” dijo el padre adolorido, cuando supo que su hijo había muerto por un disparo recibido en la espalda, mientras motilaba a uno de sus tantos gallos, que preparaba para pelear. El padre angustiado, salió en su carro en busca de los presuntos sicarios.
“Eso fue de 12:45 a 1:00 de la tarde, yo estaba viendo el noticiero cuando me vinieron a avisar. Pero a mí me dicen, le pasó algo a Gustavo, dijo mi señora y yo sin saber mencioné ¿pero qué le puede pasar?, y ya cuando llego lo habían matado, yo no vi nada… le dieron un tiro por la espalda y le salió por aquí” (dijo mientras señalaba la parte superior de su pierna).
La persecución
Minutos después que Gustavo, padre, conoció la realidad de los hechos comenzó la persecución, en la que se sumaron más de 400 personas con el fin de capturar a los dos hombres, presuntos responsables de la muerte de ‘Rinri’.
“Nosotros perseguimos a la gente, él (Fabián) y mi otro hermano tuvieron intercambio de balas con ellos… yo no atendí al muerto, a Gustavo; enseguida nos fuimos en el carro detrás de los muchachos que se metieron en una trocha y en medio de los disparos salieron corriendo y dejaron la moto tirada y los cascos, nosotros nos trajimos la moto y la entregamos a la Policía” dijo Pinillo.
Sin poder callarse, se levantó de la silla, saludó a un visitante y prosiguió diciendo “él era el tercero de mis hijos… nosotros tuvimos a pocos metros a los sicarios”- interrumpió Fabian- “la gente que estuvo en la persecución no fue por nosotros sino por él, porque él era muy bueno, a él también le decían el ‘Peluo’, porque tenía el pelo como el Pibe”
Agregó “en el momento de la persecución yo le pregunté a los amigos, díganme la verdad ¿el ‘Rinri’ andaba en malos pasos, tenía problemas, que pasó?”
Aún sin encontrar respuestas, los familiares, que hoy despiden para siempre a ‘Rinri’ tienen como hipótesis que la muerte del joven fue una confusión, mientras que las autoridades siguen investigando el motivo del crimen.
La sepultura
Hoy a las 4:00 p.m. será sepultado Gustavo Román Pinillos en el municipio de La Paz, luego de esperar a los familiares que residen en Venezuela.
Por Merlin Duarte García/El Pilón