La política es dinámica y da sorpresas. Este jueves, se dio a conocer que en el Concejo de Valledupar se cocinaba una revolución interna, la rebelión de las minorías.
La política es dinámica y da sorpresas. Este jueves, RTA dio a conocer que en el Concejo de Valledupar se cocinaba una revolución interna, la rebelión de las minorías. Y la mañana de este viernes se confirmó. Luego de varios diálogos, un grupo de concejales abandonó la tradicional mayoría (que incluso denominaban ‘Los 11 apóstoles’) y se integraron al otro grupo que durante año y medio estuvo como minoría.
Eudes Orozco, Jhosert Gómez, Wilber Hinojosa, Thelma Gómez, Ronald Castillejo y Pedro Loperena se unieron a los concejales Jorge Pana, Jorge Daza, Guido Castilla, Mariam Muvdi, Jorge Pérez, para conformar la nueva mayoría en el recinto municipal.
Al parecer el cambio es netamente interno. Y es que habrá independencia para que cada concejal elija si es oposición o independiente frente a la administración del alcalde Mello Castro. Lo que sí cambia es la forma cómo se ha manejado el poder al interior de la corporación.
Desde que empezó este periodo, las polémicas no faltaron por la forma cómo se votaban las proposiciones y a quienes se les aceptaban. Por ejemplo, la costumbre era que a los de ‘oposición’ casi siempre se les negaban las proposiciones y los debates.
Ahora, quienes lideraban la ‘parada’ en el Concejo, Jorge Arzuaga, Luifer Quintero, Mañe Gutiérrez, Lalo Gnecco, César Maestre, Manolo Fernández y Rodrigo Álvarez, quedaron siendo minoría. La fórmula es 11 versus 7. Es decir, quienes acordaban qué se aprobaba y qué no ya no tendrían en sus manos esa decisión.
¿Por qué ese cambio? El descontento es claro con quienes ‘mandaban’ en el Concejo. “Surgió por el mal trato que daban los presidentes a algunos honorables y ese inconformismo fue creciendo”, dijo un concejal.
“Cuando uno conforma hogares surgen diferencias y a veces se puede reconciliar, pero a veces no. Igual, cuando se hacen compromisos y no se cumplen los acuerdos deben darse por terminado”, señaló otro corporado.
Como dijo un concejal, las aguas están ‘revoltosas’ y el panorama no es claro porque los fieles escuderos del alcalde hoy son minoría, al punto que si el mandatario quisiera sacar adelante un proyecto no necesitaría de su apoyo.
El panorama es tan sombrío que este viernes intentaron elegir nueva mesa directiva para el 2022 pero la sesión fue saboteada, al punto que debió ser finalizada antes de tiempo. Este sábado se intentará nuevamente elegir la mesa directiva. Tocará estar pendientes cómo termina este embrollo.
Por: Redacción EL PILÓN
La política es dinámica y da sorpresas. Este jueves, se dio a conocer que en el Concejo de Valledupar se cocinaba una revolución interna, la rebelión de las minorías.
La política es dinámica y da sorpresas. Este jueves, RTA dio a conocer que en el Concejo de Valledupar se cocinaba una revolución interna, la rebelión de las minorías. Y la mañana de este viernes se confirmó. Luego de varios diálogos, un grupo de concejales abandonó la tradicional mayoría (que incluso denominaban ‘Los 11 apóstoles’) y se integraron al otro grupo que durante año y medio estuvo como minoría.
Eudes Orozco, Jhosert Gómez, Wilber Hinojosa, Thelma Gómez, Ronald Castillejo y Pedro Loperena se unieron a los concejales Jorge Pana, Jorge Daza, Guido Castilla, Mariam Muvdi, Jorge Pérez, para conformar la nueva mayoría en el recinto municipal.
Al parecer el cambio es netamente interno. Y es que habrá independencia para que cada concejal elija si es oposición o independiente frente a la administración del alcalde Mello Castro. Lo que sí cambia es la forma cómo se ha manejado el poder al interior de la corporación.
Desde que empezó este periodo, las polémicas no faltaron por la forma cómo se votaban las proposiciones y a quienes se les aceptaban. Por ejemplo, la costumbre era que a los de ‘oposición’ casi siempre se les negaban las proposiciones y los debates.
Ahora, quienes lideraban la ‘parada’ en el Concejo, Jorge Arzuaga, Luifer Quintero, Mañe Gutiérrez, Lalo Gnecco, César Maestre, Manolo Fernández y Rodrigo Álvarez, quedaron siendo minoría. La fórmula es 11 versus 7. Es decir, quienes acordaban qué se aprobaba y qué no ya no tendrían en sus manos esa decisión.
¿Por qué ese cambio? El descontento es claro con quienes ‘mandaban’ en el Concejo. “Surgió por el mal trato que daban los presidentes a algunos honorables y ese inconformismo fue creciendo”, dijo un concejal.
“Cuando uno conforma hogares surgen diferencias y a veces se puede reconciliar, pero a veces no. Igual, cuando se hacen compromisos y no se cumplen los acuerdos deben darse por terminado”, señaló otro corporado.
Como dijo un concejal, las aguas están ‘revoltosas’ y el panorama no es claro porque los fieles escuderos del alcalde hoy son minoría, al punto que si el mandatario quisiera sacar adelante un proyecto no necesitaría de su apoyo.
El panorama es tan sombrío que este viernes intentaron elegir nueva mesa directiva para el 2022 pero la sesión fue saboteada, al punto que debió ser finalizada antes de tiempo. Este sábado se intentará nuevamente elegir la mesa directiva. Tocará estar pendientes cómo termina este embrollo.
Por: Redacción EL PILÓN