Resiliencia es una palabra que parece estar de moda en los últimos años, pero es una palabra vacía sin ejemplos claros que en los que encontremos elementos serios para comprenderla. Sin embargo, ese concepto encuentra vida en cada persona que ha experimentado situaciones en los que se pueda observar el fenómeno de la resiliencia. El […]
Resiliencia es una palabra que parece estar de moda en los últimos años, pero es una palabra vacía sin ejemplos claros que en los que encontremos elementos serios para comprenderla. Sin embargo, ese concepto encuentra vida en cada persona que ha experimentado situaciones en los que se pueda observar el fenómeno de la resiliencia.
El doctor Boris Cyrulnik define la resiliencia como “la capacidad que tienen las personas de encontrar un nuevo desarrollo después de un trauma”, eufemísticamente se usa la palabra reinventarse; en diversos campos muchas personas han logrado descubrir habilidades que jamás habían utilizado, pero eventos dramáticos en su vida los obligaron a darle un cambio a su vida para poder sobrevivir tomando fuerza precisamente del dolor provocado por esos momentos difíciles y usando su deseo de superación y convertirse en inspiración en la sociedad.
A partir de esta columna escribiré sobre ejemplos concretos de personas que en esta ciudad vivieron situaciones de dolor extremo y tuvieron que empezar desde cero por adversidades que muchos considerarían el final de sus vidas y gracias a su perseverancia y una fuerza espiritual inmensa se levantaron y reconstruyeron su mundo.
En todas partes encontramos muchas personas que en carne propia sintieron el significado de la resiliencia, el mismo doctor Cyrulnik padeció los horrores de un campo de concentración en la segunda guerra mundial, optando por crecer como persona en lugar de sufrir eternamente por toda esa desgracia que lo llevo a ser uno de los dos sobrevivientes entre 1700 personas que estaban prisioneras con él.
Otro gran hombre que sobrevivió a los campos de concentración fue el doctor Viktor Frankl, en medio de la guerra perdió a sus padres y a su esposa, durante su cautiverio vio morir a mucha gente y concluyo que muchos perdían la vida porque sus motivos para continuar habían acabado, el doctor Frankl encontraba explicación a todo eso en las palabras de Nietzsche “quien tiene un por que para vivir encontrara casi siempre el cómo”, allí radica la fuente de la persona resiliente para aprender de su dolor y no dejarse vencer, de toda esa tragedia el doctor Frankl le regaló al mundo su magnífica obra “El hombre en busca de sentido”, este no es un relato más de abusos propios del holocausto, es una profunda reflexión para entender el camino del hombre en este mundo a pesar del sufrimiento como también lo dijo el doctor Frankl: “Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento”.
Resiliencia es una palabra que parece estar de moda en los últimos años, pero es una palabra vacía sin ejemplos claros que en los que encontremos elementos serios para comprenderla. Sin embargo, ese concepto encuentra vida en cada persona que ha experimentado situaciones en los que se pueda observar el fenómeno de la resiliencia. El […]
Resiliencia es una palabra que parece estar de moda en los últimos años, pero es una palabra vacía sin ejemplos claros que en los que encontremos elementos serios para comprenderla. Sin embargo, ese concepto encuentra vida en cada persona que ha experimentado situaciones en los que se pueda observar el fenómeno de la resiliencia.
El doctor Boris Cyrulnik define la resiliencia como “la capacidad que tienen las personas de encontrar un nuevo desarrollo después de un trauma”, eufemísticamente se usa la palabra reinventarse; en diversos campos muchas personas han logrado descubrir habilidades que jamás habían utilizado, pero eventos dramáticos en su vida los obligaron a darle un cambio a su vida para poder sobrevivir tomando fuerza precisamente del dolor provocado por esos momentos difíciles y usando su deseo de superación y convertirse en inspiración en la sociedad.
A partir de esta columna escribiré sobre ejemplos concretos de personas que en esta ciudad vivieron situaciones de dolor extremo y tuvieron que empezar desde cero por adversidades que muchos considerarían el final de sus vidas y gracias a su perseverancia y una fuerza espiritual inmensa se levantaron y reconstruyeron su mundo.
En todas partes encontramos muchas personas que en carne propia sintieron el significado de la resiliencia, el mismo doctor Cyrulnik padeció los horrores de un campo de concentración en la segunda guerra mundial, optando por crecer como persona en lugar de sufrir eternamente por toda esa desgracia que lo llevo a ser uno de los dos sobrevivientes entre 1700 personas que estaban prisioneras con él.
Otro gran hombre que sobrevivió a los campos de concentración fue el doctor Viktor Frankl, en medio de la guerra perdió a sus padres y a su esposa, durante su cautiverio vio morir a mucha gente y concluyo que muchos perdían la vida porque sus motivos para continuar habían acabado, el doctor Frankl encontraba explicación a todo eso en las palabras de Nietzsche “quien tiene un por que para vivir encontrara casi siempre el cómo”, allí radica la fuente de la persona resiliente para aprender de su dolor y no dejarse vencer, de toda esa tragedia el doctor Frankl le regaló al mundo su magnífica obra “El hombre en busca de sentido”, este no es un relato más de abusos propios del holocausto, es una profunda reflexión para entender el camino del hombre en este mundo a pesar del sufrimiento como también lo dijo el doctor Frankl: “Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento”.