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Columnista - 12 marzo, 2013

Recesión Encubierta

Uno puede ser rico de dos maneras: aumentando los ingresos o disminuyendo las necesidades, eso diría mi papá, y como a él le gustaba estar al día en todo lo que ocurría en el mundo, sintonizaba la radio hasta la madrugada en varias ondas.

Por Silvia Betancourt Alliegro

Uno puede ser rico de dos maneras: aumentando los ingresos o disminuyendo las necesidades, eso diría mi papá, y como a él le gustaba estar al día en todo lo que ocurría en el mundo, sintonizaba la radio hasta la madrugada en varias ondas.

Entonces, te voy a poner al día papá: Ahora que estás en otra dimensión te conmino a que mires hacia acá y trates de escucharme sin sonreír.

Te informo que hay una nueva Recesión Económica Encubierta que supera a la acaecida en 1929, calendario gregoriano. En ese entonces el planeta estaba repartido en colonias y los territorios eran absolutamente dependientes de los llamados países del primer mundo, porque estaban afincados en la explotación y exportación de los recursos agrícolas, mineros y humanos… es igual ahora, pero bajo un eufemismo al que le llaman Tratados de Libre Comercio.

Los efectos más graves en ese entonces (1929) ocurrieron en el plano social: traslados masivos de población de sectores mineros o industriales al campo; continua disminución salarial, menor cobertura política a los derechos sindicales; toda una gama de sucesos que abonaron los territorios para el conflicto social.

Transcurrieron veintiún (21) años críticos para los colonizadores planetarios, durante su devenir muchas naciones lograron su independencia; la segunda guerra mundial cambió el mapa geopolítico, sus efectos se sintieron en la rápida apertura de procesos de descolonización.

La segunda guerra mundial tuvo la capacidad de descubrir las debilidades de las estructuras coloniales; estimuló el desarrollo económico de las colonias en los sectores minero, agrario e industrial; la ‘ayuda’ de las colonias a las potencias occidentales fue importante en recursos humanos, como braceros, como soldados… tal cual como hoy, bajo otro marca.

Todo el problema planetario está cimentado en las migraciones; ahora, 2013, ochenta y cuatro años después de la primera recesión, los hechos que llevaron a la crisis, ahora sí total, son aparentemente diferentes, pero en su entraña llevan la marca: xenofobia del primer mundo hacia todos los colonizados que por desgracia hemos padecido de xenofilia.

Juan Linares escribió esto ayer por Facebook que me cayó como anillo al dedo:

COLOMBIA: ¿Cómo puede salir adelante un país que aplica las mismas recetas económicas que llevan adelante Grecia, España, Italia?… Los TLC están quebrando al campo y llenando las calles de Bogotá de indigentes… La política del gobierno neoliberal es subsidiar a los ricos y reforzar las arcas del sector financiero. Colombia necesita producción e invertir en obras públicas.

Juan Linares

COLOMBIA: Gobierno admite problemas económicos… ¡Recién se dieron cuenta!!! Hace un año, ¡un año!, que vengo sosteniendo que Colombia literalmente está en recesión, con un comercio informal desbordado y una mendicidad histórica… ¡SE VIENE LA BURBUJA INMOBILIARIA!!!

Para concluir, cito a Luis Enrique Mejía D.: “Tal vez deberíamos rebelarnos contra la cobardía que nos impide revelarnos a ver si logramos la claridad que nos permita desorganizar lo que no ha dado resultado para poder organizar algo que resulte”.

 

Columnista
12 marzo, 2013

Recesión Encubierta

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Silvia Betancourt Alliegro

Uno puede ser rico de dos maneras: aumentando los ingresos o disminuyendo las necesidades, eso diría mi papá, y como a él le gustaba estar al día en todo lo que ocurría en el mundo, sintonizaba la radio hasta la madrugada en varias ondas.


Por Silvia Betancourt Alliegro

Uno puede ser rico de dos maneras: aumentando los ingresos o disminuyendo las necesidades, eso diría mi papá, y como a él le gustaba estar al día en todo lo que ocurría en el mundo, sintonizaba la radio hasta la madrugada en varias ondas.

Entonces, te voy a poner al día papá: Ahora que estás en otra dimensión te conmino a que mires hacia acá y trates de escucharme sin sonreír.

Te informo que hay una nueva Recesión Económica Encubierta que supera a la acaecida en 1929, calendario gregoriano. En ese entonces el planeta estaba repartido en colonias y los territorios eran absolutamente dependientes de los llamados países del primer mundo, porque estaban afincados en la explotación y exportación de los recursos agrícolas, mineros y humanos… es igual ahora, pero bajo un eufemismo al que le llaman Tratados de Libre Comercio.

Los efectos más graves en ese entonces (1929) ocurrieron en el plano social: traslados masivos de población de sectores mineros o industriales al campo; continua disminución salarial, menor cobertura política a los derechos sindicales; toda una gama de sucesos que abonaron los territorios para el conflicto social.

Transcurrieron veintiún (21) años críticos para los colonizadores planetarios, durante su devenir muchas naciones lograron su independencia; la segunda guerra mundial cambió el mapa geopolítico, sus efectos se sintieron en la rápida apertura de procesos de descolonización.

La segunda guerra mundial tuvo la capacidad de descubrir las debilidades de las estructuras coloniales; estimuló el desarrollo económico de las colonias en los sectores minero, agrario e industrial; la ‘ayuda’ de las colonias a las potencias occidentales fue importante en recursos humanos, como braceros, como soldados… tal cual como hoy, bajo otro marca.

Todo el problema planetario está cimentado en las migraciones; ahora, 2013, ochenta y cuatro años después de la primera recesión, los hechos que llevaron a la crisis, ahora sí total, son aparentemente diferentes, pero en su entraña llevan la marca: xenofobia del primer mundo hacia todos los colonizados que por desgracia hemos padecido de xenofilia.

Juan Linares escribió esto ayer por Facebook que me cayó como anillo al dedo:

COLOMBIA: ¿Cómo puede salir adelante un país que aplica las mismas recetas económicas que llevan adelante Grecia, España, Italia?… Los TLC están quebrando al campo y llenando las calles de Bogotá de indigentes… La política del gobierno neoliberal es subsidiar a los ricos y reforzar las arcas del sector financiero. Colombia necesita producción e invertir en obras públicas.

Juan Linares

COLOMBIA: Gobierno admite problemas económicos… ¡Recién se dieron cuenta!!! Hace un año, ¡un año!, que vengo sosteniendo que Colombia literalmente está en recesión, con un comercio informal desbordado y una mendicidad histórica… ¡SE VIENE LA BURBUJA INMOBILIARIA!!!

Para concluir, cito a Luis Enrique Mejía D.: “Tal vez deberíamos rebelarnos contra la cobardía que nos impide revelarnos a ver si logramos la claridad que nos permita desorganizar lo que no ha dado resultado para poder organizar algo que resulte”.