Por Pepe Morón Reales 
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Después de muchos dichos, suposiciones y declaraciones informales sobre la situación económica y real del Hospital Rosario Pumarejo de López, fue citado a la Asamblea Departamental el gerente de esta institución, Rubén Sierra. Quien presentó lo que él considera un informe detallado de la situación del hospital. Sumado a eso, el funcionario respondió algunos cuestionamientos que surgieron durante su exposición.   

La propuesta de citar a Sierra fue hecha por el diputado Eduardo Esquivel quien consideró que era importante escuchar al gerente del hospital para que explicara cuál es la situación actual del centro médico, cómo lo encontró y qué acciones espera tomar en los años que vienen.

“Este debate es necesario porque queremos conocer la verdad verdadera de todo lo que se ha dicho en referencia al Rosario Pumarejo de López”, dijo el diputado, quien después de un discurso sólido y bastante incisivo, invitó a que Sierra cambiara de actitud. Dejando de lado lo que el diputado definió como actitudes revanchistas y que no lo conducirían a ningún lado. 

Después de escuchar la exposición del nuevo gerente, el diputado Esquivel cuestionó algunos puntos que no coincidían dentro de la intervención de Sierra y otros temas que diferían con investigaciones adelantadas por quien citó al debate. 

Para Esquivel es importante que Sierra conteste por qué habla del número de abogados contratados en la institución si eran los mismos que estaban durante su primera administración. Sumado a ello, los diputados que hicieron presión para conseguir respuestas del gerente, preguntaron cómo era posible que tuviera a más de 10 abogados recibiendo sueldo y sin trabajo asignado, hecho que les indicaba un desinterés o un desapego por parte de Rubén Sierra hacia la institución. 

En relación a la cartera del hospital, el diputado Esquivel le pidió a Sierra que hablara de la deuda que tenían las EPS con este centro de salud, ya que según investigaciones realizadas por los diputados,  más de la mitad de estas deudas son por cuentas que las entidades prestadoras no autorizaron. “es difícil cuando uno tiene que escoger entre la atención de un paciente y la voluntad de una IPS o una EPS, yo también he tenido que ir a la Procuraduría a rendir cuentas de mi buena fe”, dijo Esquivel y le pidió a Sierra que hiciera lo que corresponde y que reencause su actuar en estos cuatro años.  

Por su parte, el diputado Gustavo Guerra propuso que a la rendición de cuentas de Sierra se hicieran presentes la Defensoría del Pueblo, Ministerio del Trabajo, Contraloría y Procuraduría para que estos escuchen las explicaciones del gerente en cuanto respecta al despido de los 23 abogados asesores del hospital, y que muy seguramente tomarán acciones legales.

De este grupo, solo estuvo el Contralor Departamental Gustavo Aguilar, quien dijo que por las graves denuncias realizadas durante esta atípica sesión, su despacho entraría a investigar qué era lo que realmente estaba ocurriendo, además dejó saber en su discurso que ya habían procesos iniciados para esclarecer la situación del hospital.