Uno de los principales propósitos, tal vez el objetivo primordial, del proyecto de la Ruta del Sol tramo tres, en el departamento del Cesar, es el de impulsar su desarrollo económico y mejorar la conectividad en la región.
Uno de los principales propósitos, tal vez el objetivo primordial, del proyecto de la Ruta del Sol tramo tres, en el departamento del Cesar, es el de impulsar su desarrollo económico y mejorar la conectividad en la región.
Ese es el ideal y por ello el Gobierno nacional puso en ejecución esta iniciativa, que prometía o promete ser un motor de progreso para la zona. Se está hablando de una megaobra y como tal debe ser su impacto en el progreso de nuestro territorio cesarense, en especial de su capital Valledupar, por ende, merece toda nuestra atención y apoyo.
No obstante, además de los diversos inconvenientes de la obra y que son de amplio conocimiento público, se vienen registrando diferentes puntos críticos en algunas localidades del Cesar, cosas que parecieran detalles menores, pero que afectan enormemente a las poblaciones del entorno de la obra como Valencia de Jesús, Mariangola, Bosconia, El Copey, entre otros sectores, donde la comunidad clama celeridad en la solución de los problemas para que realmente la obra dinamice el desarrollo y no paralice las actividades económicas rutinarias como en algunos casos ha venido sucediendo.
EL PILÓN ha sido un permanente receptor de las inquietudes y denuncias de las comunidades afectadas, además de recorridos y trabajos de campo para el cubrimiento periodístico. Es así como, con conocimiento de causa, ha respondido a ese clamor ciudadano y esta semana gestionó una mesa de trabajo técnico con distintas autoridades departamentales y locales para que se analice el tema y se le busquen salidas saludables para todos ante el Gobierno nacional y con las demás partes comprometidas como la concesionaria de la obra, entre otros.
El tema es perentorio porque se avecinan afectaciones climáticas derivadas del fenómeno de El Niño y para ello hay que estar preparados como lo acaba de anunciar el Ideam. Revisar las obras de las variantes, los procesos hidráulicos de doble calzada, algunas reubicaciones de familias, afectaciones por terraplenes improvisados, lentitud de los trabajos en algunos tramos, riesgo de inundaciones, son, entre otras, algunas de las principales solicitudes de nuestras comunidades cesarenses.
Además, la movilidad vial en algunos tramos es muy deficiente como consecuencia de los atrasos de las obras, eso hace poco eficiente la dinámica productiva en la región, lo cual, como ya la dijimos, contrasta con el fin esencial del proyecto tal es el de la conectividad y el desarrollo regional que se puede propiciar al mejorar la infraestructura vial en el Cesar, conectando la costa Caribe con el interior del país. Este proyecto no solo acortará los tiempos de viaje, sino que también facilitará el transporte de mercancías y personas, estimulando el comercio y el turismo en la región.
Sin duda alguna, superar todos esos impases redundará en oportunidades económicas para todo el entramado que constituye la producción agrícola, ganadera y minera del Cesar, facilitando el acceso a los mercados nacionales e internacionales. Además de promover la inversión en el departamento, generando empleo y fortaleciendo la economía local.
Así las cosas, no se puede permitir que los pequeños detalles enturbien los grandes propósitos de esta megaobra. Seguiremos atentos a las respuestas que esperan las comunidades que por el momento se están viendo afectadas.
Uno de los principales propósitos, tal vez el objetivo primordial, del proyecto de la Ruta del Sol tramo tres, en el departamento del Cesar, es el de impulsar su desarrollo económico y mejorar la conectividad en la región.
Uno de los principales propósitos, tal vez el objetivo primordial, del proyecto de la Ruta del Sol tramo tres, en el departamento del Cesar, es el de impulsar su desarrollo económico y mejorar la conectividad en la región.
Ese es el ideal y por ello el Gobierno nacional puso en ejecución esta iniciativa, que prometía o promete ser un motor de progreso para la zona. Se está hablando de una megaobra y como tal debe ser su impacto en el progreso de nuestro territorio cesarense, en especial de su capital Valledupar, por ende, merece toda nuestra atención y apoyo.
No obstante, además de los diversos inconvenientes de la obra y que son de amplio conocimiento público, se vienen registrando diferentes puntos críticos en algunas localidades del Cesar, cosas que parecieran detalles menores, pero que afectan enormemente a las poblaciones del entorno de la obra como Valencia de Jesús, Mariangola, Bosconia, El Copey, entre otros sectores, donde la comunidad clama celeridad en la solución de los problemas para que realmente la obra dinamice el desarrollo y no paralice las actividades económicas rutinarias como en algunos casos ha venido sucediendo.
EL PILÓN ha sido un permanente receptor de las inquietudes y denuncias de las comunidades afectadas, además de recorridos y trabajos de campo para el cubrimiento periodístico. Es así como, con conocimiento de causa, ha respondido a ese clamor ciudadano y esta semana gestionó una mesa de trabajo técnico con distintas autoridades departamentales y locales para que se analice el tema y se le busquen salidas saludables para todos ante el Gobierno nacional y con las demás partes comprometidas como la concesionaria de la obra, entre otros.
El tema es perentorio porque se avecinan afectaciones climáticas derivadas del fenómeno de El Niño y para ello hay que estar preparados como lo acaba de anunciar el Ideam. Revisar las obras de las variantes, los procesos hidráulicos de doble calzada, algunas reubicaciones de familias, afectaciones por terraplenes improvisados, lentitud de los trabajos en algunos tramos, riesgo de inundaciones, son, entre otras, algunas de las principales solicitudes de nuestras comunidades cesarenses.
Además, la movilidad vial en algunos tramos es muy deficiente como consecuencia de los atrasos de las obras, eso hace poco eficiente la dinámica productiva en la región, lo cual, como ya la dijimos, contrasta con el fin esencial del proyecto tal es el de la conectividad y el desarrollo regional que se puede propiciar al mejorar la infraestructura vial en el Cesar, conectando la costa Caribe con el interior del país. Este proyecto no solo acortará los tiempos de viaje, sino que también facilitará el transporte de mercancías y personas, estimulando el comercio y el turismo en la región.
Sin duda alguna, superar todos esos impases redundará en oportunidades económicas para todo el entramado que constituye la producción agrícola, ganadera y minera del Cesar, facilitando el acceso a los mercados nacionales e internacionales. Además de promover la inversión en el departamento, generando empleo y fortaleciendo la economía local.
Así las cosas, no se puede permitir que los pequeños detalles enturbien los grandes propósitos de esta megaobra. Seguiremos atentos a las respuestas que esperan las comunidades que por el momento se están viendo afectadas.