¿Qué pasó con el empréstito de los $36 mil millones de pesos para Emdupar?, es la pregunta que se hacen hoy los habitantes de Valledupar, quienes recuerdan que durante la administración del anterior Alcalde, Luis Fabián Fernández Maestre, se le presentó a la ciudad este empréstito como la gran solución a los problemas del servicio de agua para la ciudad y sus corregimientos.
¿Qué pasó con el manejo de esos dineros?, ¿Cómo se contrataron?, ¿ A dónde fueron a parar?. ¿Se hicieron las obras para las cuales estaban destinados estos recursos?. ¿y quienes se beneficiaron con esos contratos y esos dineros?. Son sólo algunos de los interrogantes que hoy están en el ambiente y que se formula la ciudadanía y también los organismos de control, es decir la Contraloría General de la República, la Contraloría Municipal, la Procuraduría General de de la Nación y la misma Personería Municipal?.
Los habitantes de Valledupar tienen todo el derecho a saber qué pasó con esos dineros y los organismos de control están en la obligación de investigar y llegar hasta las últimas consecuencias en el desarrollo de estos contratos, para determinar qué pasó en el Concejo Municipal de ese momento?, ¿Cuáles fueron los concejales que autorizaron ese préstamo que se hizo a unas altas tasas de interés, con la banca comercial y comprometiendo recursos del Sistema General de Participación?.
Hay que investigar y establecer responsabilidades. ¿Hasta donde llega la responsabilidad del Alcalde Fernández Maestre?, ¿Hasta donde la responsabilidad de los concejales de la época?, y también la responsabilidad de los Secretarios de Hacienda de la Administración de los “Resultados con seguridad” y del Gerente de Emdupar de entonces, Eduardo Becerra Blanco?, entre otros funcionarios.
Emdupar debe informar con mayor detalle a la comunidad y a la Contraloría Municipal y también a la General, la forma como fueron manejados esos recursos, que ha pasado con las obras y en qué estado se encuentran las que se pudieron adelantar. ¿Qué pasó con las interventorías a los mismos?.
Compartimos la sentencia de que hay que establecer y sancionar a quienes participaron en un eventual desfalco al municipio, pero, por eso mismo, advertimos, no se puede doblar la página. Por el contrario, si estamos ante un posible nuevo caso de corrupción, reiteramos hay que ir hasta el fondo del asunto.
No hay derecho a que en una ciudad con tantas necesidades, con tanta pobreza y falta de servicios públicos y de vivienda, se coja un préstamo de esa magnitud y se maneje de la manera como aparentemente se hizo y hoy tengamos los mismos problemas que cuando se asumió el crédito.
Ya es hora de que a Valledupar le aparezcan dolientes de verdad, verdad. Ya basta de tantos contratos leoninos y que luego hay que declarar su caducidad. Ya basta de tanta indolencia e indiferencia con los dineros públicos del Municipio que son de todo y, en este caso, -para rematar- son recursos de la Nación transferidos al municipio.
En su debido momento EL PILÓN advirtió sobre el tema; nuestro colaborador, el entonces Concejal, Leonardo Maya Amaya, lo dijo en declaraciones a los medios y también en varias de sus columnas de opinión.
Ojalá en este caso no suceda como en tantos otros y se llegue hasta el final del problema.  El diario EL PILÓN estará muy atento al desarrollo de este caso, para determinar a ciencia cierta y a cabalidad ¿Qué pasó con esos 36 mil millones de pesos del préstamo de Emdupar?.