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Columnista - 24 septiembre, 2021

Qué hacer para que Valledupar sea ciudad ecológica (III)

Empezamos este artículo de hoy, que es la continuidad de los dos anteriores. Aunque de pronto lo nuestro o lo que uno escribe no tenga mucho eco, insistimos porque esta es una misión terrenal, es decir, somos soldados que defendemos el medio ambiente, guardando la aspiración que estas sencillas columnas contribuyan  a hacer un alto […]

Empezamos este artículo de hoy, que es la continuidad de los dos anteriores. Aunque de pronto lo nuestro o lo que uno escribe no tenga mucho eco, insistimos porque esta es una misión terrenal, es decir, somos soldados que defendemos el medio ambiente, guardando la aspiración que estas sencillas columnas contribuyan  a hacer un alto en el camino para poder convivir, armonizar y respetar la naturaleza como madre, sabiendo que de ella dependemos todos. Hay que entender que el cambio climático es un desafío para toda la raza humana.

Nos parece propicio el momento en que nos desenvolvemos para dar a conocer el Manual de Convivencia Ciudadana De Valledupar (MCCV), como herramienta educativa y pedagógica para promover la convivencia pacífica, el ejercicio de las libertades y derechos fundamentales, el cumplimiento de los deberes y el respeto de los derechos de los demás.

Es oportuno porque este manual debe llevar un contenido ambiental, como quien dice aprovecharlo para la concienciación de la cultura ambiental que tanta falta nos hace para que nuestra ciudad de los Santos Reyes pueda alcanzar el significativo título de ‘Ciudad Ecológica de Colombia’.

Consideramos se puede implementar de consuno lo uno con lo otro; esta es una propuesta que tiene la recta intención de que Valledupar sea un modelo de ciudad decente y ecológica que sirva de ejemplo para Colombia y por qué no allende la frontera.

Obviamente que este componente requiere el compromiso de todos. Como hemos dicho, debemos tener la disposición de dar un paso al frente como soldado, dispuesto a defender una causa que en mucho nos pertenece.

Para este compromiso vale la pena hacer algunas consideraciones y recomendaciones que implica hablar de valores, por tanto nos preguntamos: ¿Qué son los valores? Respondiendo que es un conjunto de pautas que la sociedad establece para las personas en las relaciones sociales. Apuntando, además, que los valores son características morales que cada uno de nosotros es capaz de construir y desarrollar.

Estos valores pueden ser el respeto, la responsabilidad, la humildad, el sentido de pertenencia, la paz, la libertad, la tolerancia, la honestidad, el amor, la amistad, la solidaridad, la igualdad social, entre muchos más. Aquí queremos resaltar los valores que nos hacen actuar de mejor manera frente al ambiente y son aquellos que llamamos “valores ambientales”.

Un valor nos hace actuar frente a distintas situaciones por nuestras decisiones que tienen consecuencias en distintos niveles personales, comunitarios, nacional e internacional, por ejemplo: ¿Qué efecto tiene para el cambio climático global consumir muchos productos que no necesitamos y que producen basuras? ¿Qué pasa si lanzas las basuras a la calle? ¿Qué sucede cuando no separamos las basuras en la casa? ¿Qué pasa cuando arrojamos las basuras a los ríos y a las fuentes de agua? ¿Qué pasa si tiramos las basuras a las calles aprovechando las corrientes de agua cuando está lloviendo?

Se trata de adquirir conciencia y ser capaces de reconocer lo que pasa en nuestro entorno. También hay que tener solidaridad en el entendido que esta implica consciencia sobre los problemas ambientales, trabajo común, ver por los demás, pensar en el beneficio común y actuar con responsabilidad para no perjudicar a otros.

Antes de finalizar es necesario hacernos una pregunta que nos sirve para reflexionar sobre una  inveterada práctica: ¿Qué podemos hacer para cooperar en la separación de los residuos sólidos en casa?

Columnista
24 septiembre, 2021

Qué hacer para que Valledupar sea ciudad ecológica (III)

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Hernán Maestre Martínez

Empezamos este artículo de hoy, que es la continuidad de los dos anteriores. Aunque de pronto lo nuestro o lo que uno escribe no tenga mucho eco, insistimos porque esta es una misión terrenal, es decir, somos soldados que defendemos el medio ambiente, guardando la aspiración que estas sencillas columnas contribuyan  a hacer un alto […]


Empezamos este artículo de hoy, que es la continuidad de los dos anteriores. Aunque de pronto lo nuestro o lo que uno escribe no tenga mucho eco, insistimos porque esta es una misión terrenal, es decir, somos soldados que defendemos el medio ambiente, guardando la aspiración que estas sencillas columnas contribuyan  a hacer un alto en el camino para poder convivir, armonizar y respetar la naturaleza como madre, sabiendo que de ella dependemos todos. Hay que entender que el cambio climático es un desafío para toda la raza humana.

Nos parece propicio el momento en que nos desenvolvemos para dar a conocer el Manual de Convivencia Ciudadana De Valledupar (MCCV), como herramienta educativa y pedagógica para promover la convivencia pacífica, el ejercicio de las libertades y derechos fundamentales, el cumplimiento de los deberes y el respeto de los derechos de los demás.

Es oportuno porque este manual debe llevar un contenido ambiental, como quien dice aprovecharlo para la concienciación de la cultura ambiental que tanta falta nos hace para que nuestra ciudad de los Santos Reyes pueda alcanzar el significativo título de ‘Ciudad Ecológica de Colombia’.

Consideramos se puede implementar de consuno lo uno con lo otro; esta es una propuesta que tiene la recta intención de que Valledupar sea un modelo de ciudad decente y ecológica que sirva de ejemplo para Colombia y por qué no allende la frontera.

Obviamente que este componente requiere el compromiso de todos. Como hemos dicho, debemos tener la disposición de dar un paso al frente como soldado, dispuesto a defender una causa que en mucho nos pertenece.

Para este compromiso vale la pena hacer algunas consideraciones y recomendaciones que implica hablar de valores, por tanto nos preguntamos: ¿Qué son los valores? Respondiendo que es un conjunto de pautas que la sociedad establece para las personas en las relaciones sociales. Apuntando, además, que los valores son características morales que cada uno de nosotros es capaz de construir y desarrollar.

Estos valores pueden ser el respeto, la responsabilidad, la humildad, el sentido de pertenencia, la paz, la libertad, la tolerancia, la honestidad, el amor, la amistad, la solidaridad, la igualdad social, entre muchos más. Aquí queremos resaltar los valores que nos hacen actuar de mejor manera frente al ambiente y son aquellos que llamamos “valores ambientales”.

Un valor nos hace actuar frente a distintas situaciones por nuestras decisiones que tienen consecuencias en distintos niveles personales, comunitarios, nacional e internacional, por ejemplo: ¿Qué efecto tiene para el cambio climático global consumir muchos productos que no necesitamos y que producen basuras? ¿Qué pasa si lanzas las basuras a la calle? ¿Qué sucede cuando no separamos las basuras en la casa? ¿Qué pasa cuando arrojamos las basuras a los ríos y a las fuentes de agua? ¿Qué pasa si tiramos las basuras a las calles aprovechando las corrientes de agua cuando está lloviendo?

Se trata de adquirir conciencia y ser capaces de reconocer lo que pasa en nuestro entorno. También hay que tener solidaridad en el entendido que esta implica consciencia sobre los problemas ambientales, trabajo común, ver por los demás, pensar en el beneficio común y actuar con responsabilidad para no perjudicar a otros.

Antes de finalizar es necesario hacernos una pregunta que nos sirve para reflexionar sobre una  inveterada práctica: ¿Qué podemos hacer para cooperar en la separación de los residuos sólidos en casa?