Ante el asesinato de dos personas que estuvieron vinculadas como contratistas a la empresa explotadora de Carbón, Prodeco, esta rechazó los crímenes registrados en menos de dos días en su área de influencia minera.
Ante el asesinato de dos personas que estuvieron vinculadas como contratistas a la empresa explotadora de Carbón, Prodeco, esta rechazó los crímenes registrados en menos de dos días en su área de influencia minera.
Sobre el caso de Argemiro Galvis Casadiego, la compañía indicó en un comunicado que esta persona residía en el corregimiento de la Victoria de San Isidro, municipio de La Jagua de Ibirico, donde fue asesinado en circunstancias que aún son materia de investigación por parte de las autoridades competentes.
Prodeco repudió este homicidio y que “recientemente, el señor Galvis, trabajó activamente en el programa de Manejo Integral de Residuos Sólidos que desarrollamos en la mencionada comunidad ‘La Victoria Recicla’, motivo por el cual, de forma particular, este asesinato nos consterna sobremanera, pues tuvimos la oportunidad de conocer y compartir de cerca con él y de quien tenemos las mejores referencias de su calidad humana”.
Hicieron un llamado respetuoso a las autoridades correspondientes, para que investiguen a fondo las circunstancias de la muerte de Galvis y que, en caso de considerarlo necesario, se provea a la comunidad de La Victoria de San Isidro con las medidas de seguridad apropiadas.
“Aprovechamos asimismo, para hacer extensivas nuestras sinceras condolencias a la familia del señor Carlos Julio Galván Cardoso, quien fue asesinado el pasado 3 de marzo en el corregimiento de La Loma, jurisdicción del municipio de El Paso, en circunstancias que también son objeto de investigación por parte de las autoridades. Sostienen que el señor Galván se desempeñó como contratista de la compañía, donde siempre demostró una actitud diligente, respetuosa y cordial.
Frente a estos hechos de violencia Prodeco reiteró su disposición para colaborar con las diferentes autoridades y con las comunidades involucradas.
Por Abdel Martínez Pérez
Ante el asesinato de dos personas que estuvieron vinculadas como contratistas a la empresa explotadora de Carbón, Prodeco, esta rechazó los crímenes registrados en menos de dos días en su área de influencia minera.
Ante el asesinato de dos personas que estuvieron vinculadas como contratistas a la empresa explotadora de Carbón, Prodeco, esta rechazó los crímenes registrados en menos de dos días en su área de influencia minera.
Sobre el caso de Argemiro Galvis Casadiego, la compañía indicó en un comunicado que esta persona residía en el corregimiento de la Victoria de San Isidro, municipio de La Jagua de Ibirico, donde fue asesinado en circunstancias que aún son materia de investigación por parte de las autoridades competentes.
Prodeco repudió este homicidio y que “recientemente, el señor Galvis, trabajó activamente en el programa de Manejo Integral de Residuos Sólidos que desarrollamos en la mencionada comunidad ‘La Victoria Recicla’, motivo por el cual, de forma particular, este asesinato nos consterna sobremanera, pues tuvimos la oportunidad de conocer y compartir de cerca con él y de quien tenemos las mejores referencias de su calidad humana”.
Hicieron un llamado respetuoso a las autoridades correspondientes, para que investiguen a fondo las circunstancias de la muerte de Galvis y que, en caso de considerarlo necesario, se provea a la comunidad de La Victoria de San Isidro con las medidas de seguridad apropiadas.
“Aprovechamos asimismo, para hacer extensivas nuestras sinceras condolencias a la familia del señor Carlos Julio Galván Cardoso, quien fue asesinado el pasado 3 de marzo en el corregimiento de La Loma, jurisdicción del municipio de El Paso, en circunstancias que también son objeto de investigación por parte de las autoridades. Sostienen que el señor Galván se desempeñó como contratista de la compañía, donde siempre demostró una actitud diligente, respetuosa y cordial.
Frente a estos hechos de violencia Prodeco reiteró su disposición para colaborar con las diferentes autoridades y con las comunidades involucradas.
Por Abdel Martínez Pérez