Los sectores donde se reportaron excesos de ruidos por ingesta de licor son en el Eneal, Primero de Mayo, Francisco Javier y Siete de agosto.
Con motivo de la celebración del Día del Padre, las primeras horas del toque de queda decretado en Valledupar se caracterizaron en la noche del sábado y parte del domingo, al presentarse distintas parrandas en algunos barrios de la ciudad y la aplicación de sanciones contra los desobedientes por parte de la Policía.
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Según las autoridades, los sectores donde se reportaron excesos de ruidos e ingesta de licor son los barrios en el Eneal, Primero de Mayo, Francisco Javier y Siete de agosto.
Aunque el actual toque de queda no contempla ley seca donde se prohíba la ingesta de licor, o que no se pueda escuchar música, las molestias de algunos habitantes se centraron en el exceso de ruido haciendo necesaria la intermediación policial.
Según la denuncia de la comunidad, uno de los casos lo protagonizó el concejal del municipio Guido Castilla, quien departía en el barrio Siete de Agosto con aparentes ‘excesos de ruido’.
No obstante, la Policía indicó que llegaron al sitio y, “no evidenciamos inconsistencias porque estaba con el núcleo familiar y no tenía alto el volumen de la música”.
En total las autoridades durante las primeras horas habían impuesto 203 multas en el departamento de Cesar, de las cuales 144 ocurrieron en la ciudad de Valledupar por distintas faltas a las medidas decretadas por la administración municipal.
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“Esperamos el buen comportamiento de la ciudadanía, así como sucedió el fin de semana anterior, porque de la comunidad depende que las excepciones que hemos dispuesto se mantengan para el próximo puente festivo”, advirtió Mello Castro, alcalde de Valledupar.
Para los controles en el casco urbano y área rural de la ciudad, el comandante del Primer Distrito de Policía del departamento, teniente coronel Manuel Carvajal, informó que la institución dispuso de 350 hombres y mujeres para vigilar el comportamiento de la ciudadanía en el marco del cumplimiento de lo decretado.
Asimismo, las autoridades en los tres días del fin de semana mantendrán controles fijos en 17 puntos estratégicos y tres patrullas estarán exclusivamente recorriendo las avenidas principales de Valledupar. Además cuentan con cinco grupos encargados únicamente de patrullar los sectores populares.
No obstante, si se registran alteraciones de orden público considerables los casos serían atendidos con patrullas mixtas con participación del Ejército.
“Por otra parte este fin de semana que conlleva la celebración del Día del Padre, quiero invitarlos a que como parte de las excepciones del decreto municipal, hagan sus compras vía plataformas digitales y con el soporte de domicilios y mensajería legalmente constituida. Los establecimientos de comercio que hacen parte de las excepciones pueden funcionar, lo que se quiere es que estemos en casa de modo seguro para que tengamos otro fin de semana con puente festivo en total normalidad”, dijo el oficial Carvajal.
Este es el segundo fin de semana con toque de queda que estableció la Alcaldía Municipal con el fin de contrarrestar el impacto social provocado por la pandemia del coronavirus.
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A diferencia del anterior en esta oportunidad hubo otras excepciones, como la prestación de servicios de los diferentes establecimientos comerciales por medio de domicilio o plataformas electrónicas habilitados hasta las 9:00 p.m. y las droguerías las 24 horas solo para entrega de medicamentos.
El secretario de Gobierno, Luis Galvis, recordó que la movilidad está restringida en todo el municipio, por lo que la comunidad no puede salir de sus casas.
Los sectores donde se reportaron excesos de ruidos por ingesta de licor son en el Eneal, Primero de Mayo, Francisco Javier y Siete de agosto.
Con motivo de la celebración del Día del Padre, las primeras horas del toque de queda decretado en Valledupar se caracterizaron en la noche del sábado y parte del domingo, al presentarse distintas parrandas en algunos barrios de la ciudad y la aplicación de sanciones contra los desobedientes por parte de la Policía.
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Según las autoridades, los sectores donde se reportaron excesos de ruidos e ingesta de licor son los barrios en el Eneal, Primero de Mayo, Francisco Javier y Siete de agosto.
Aunque el actual toque de queda no contempla ley seca donde se prohíba la ingesta de licor, o que no se pueda escuchar música, las molestias de algunos habitantes se centraron en el exceso de ruido haciendo necesaria la intermediación policial.
Según la denuncia de la comunidad, uno de los casos lo protagonizó el concejal del municipio Guido Castilla, quien departía en el barrio Siete de Agosto con aparentes ‘excesos de ruido’.
No obstante, la Policía indicó que llegaron al sitio y, “no evidenciamos inconsistencias porque estaba con el núcleo familiar y no tenía alto el volumen de la música”.
En total las autoridades durante las primeras horas habían impuesto 203 multas en el departamento de Cesar, de las cuales 144 ocurrieron en la ciudad de Valledupar por distintas faltas a las medidas decretadas por la administración municipal.
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“Esperamos el buen comportamiento de la ciudadanía, así como sucedió el fin de semana anterior, porque de la comunidad depende que las excepciones que hemos dispuesto se mantengan para el próximo puente festivo”, advirtió Mello Castro, alcalde de Valledupar.
Para los controles en el casco urbano y área rural de la ciudad, el comandante del Primer Distrito de Policía del departamento, teniente coronel Manuel Carvajal, informó que la institución dispuso de 350 hombres y mujeres para vigilar el comportamiento de la ciudadanía en el marco del cumplimiento de lo decretado.
Asimismo, las autoridades en los tres días del fin de semana mantendrán controles fijos en 17 puntos estratégicos y tres patrullas estarán exclusivamente recorriendo las avenidas principales de Valledupar. Además cuentan con cinco grupos encargados únicamente de patrullar los sectores populares.
No obstante, si se registran alteraciones de orden público considerables los casos serían atendidos con patrullas mixtas con participación del Ejército.
“Por otra parte este fin de semana que conlleva la celebración del Día del Padre, quiero invitarlos a que como parte de las excepciones del decreto municipal, hagan sus compras vía plataformas digitales y con el soporte de domicilios y mensajería legalmente constituida. Los establecimientos de comercio que hacen parte de las excepciones pueden funcionar, lo que se quiere es que estemos en casa de modo seguro para que tengamos otro fin de semana con puente festivo en total normalidad”, dijo el oficial Carvajal.
Este es el segundo fin de semana con toque de queda que estableció la Alcaldía Municipal con el fin de contrarrestar el impacto social provocado por la pandemia del coronavirus.
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A diferencia del anterior en esta oportunidad hubo otras excepciones, como la prestación de servicios de los diferentes establecimientos comerciales por medio de domicilio o plataformas electrónicas habilitados hasta las 9:00 p.m. y las droguerías las 24 horas solo para entrega de medicamentos.
El secretario de Gobierno, Luis Galvis, recordó que la movilidad está restringida en todo el municipio, por lo que la comunidad no puede salir de sus casas.