Hasta las oficinas de la Secretaría de Tránsito, que está en pleno proceso de mudanza, llegó un funcionario del despacho jurídico de la administración municipal, con el fin de atender una situación, de la que inicialmente se dijo, es una acción de embargo a esta entidad
Hasta las oficinas de la Secretaría de Tránsito, que está en pleno proceso de mudanza, llegó un funcionario del despacho jurídico de la administración municipal, con el fin de atender una situación, de la que inicialmente se dijo, es una acción de embargo a esta entidad, por parte del propietario del local donde funciona la entidad, según manifestó la Secretaria de Tránsito, Oriana Urón.
Eduardo Ramírez Ocampo, conocido en el sector como “El Chileno”, propietario del local ubicado en la carrera 13 número 11 A – 15 del barrio Obrero, manifestó que la Secretaría de Tránsito le adeuda el arriendo del establecimiento desde el mes de agosto del año pasado; la cifra es, según sus palabras de 64 millones de pesos.
Sin embargo, la secretaria de Tránsito, Oriana Urón Pinto, manifestó que el Municipio no tiene ningún vínculo con el propietario del local, puesto que es la Concesión de Tránsito, a la que se le declaró la caducidad en el año 2012, la que tiene un contrato de arrendamiento con Ramírez Ocampo.
“La diligencia se suspendió.Nunca un juzgado ha notificado a la administración sobre esto y todos los bienes que están en el Tránsito son del Municipio”, dijo la secretaria Urón Pinto.
La funcionaria manifestó no saber qué cifra es la que le adeudan y aseguró que todo eso debe ser resuelto en el proceso de liquidación de la Concesión de Tránsito; de tal manera, el propietario del local, deberá buscar su dinero en otro lugar diferente a la Secretaría de Tránsito.
El interrogante existente es que si la Secretaría de Tránsito no tiene nada que ver con el arriendo, por qué paga los servicios. Ante esto la Secretaria manifestó que por motivos del funcionamiento que debe tener la entidad, han venido asumiendo ese pago de servicios públicos.
Hasta las oficinas de la Secretaría de Tránsito, que está en pleno proceso de mudanza, llegó un funcionario del despacho jurídico de la administración municipal, con el fin de atender una situación, de la que inicialmente se dijo, es una acción de embargo a esta entidad
Hasta las oficinas de la Secretaría de Tránsito, que está en pleno proceso de mudanza, llegó un funcionario del despacho jurídico de la administración municipal, con el fin de atender una situación, de la que inicialmente se dijo, es una acción de embargo a esta entidad, por parte del propietario del local donde funciona la entidad, según manifestó la Secretaria de Tránsito, Oriana Urón.
Eduardo Ramírez Ocampo, conocido en el sector como “El Chileno”, propietario del local ubicado en la carrera 13 número 11 A – 15 del barrio Obrero, manifestó que la Secretaría de Tránsito le adeuda el arriendo del establecimiento desde el mes de agosto del año pasado; la cifra es, según sus palabras de 64 millones de pesos.
Sin embargo, la secretaria de Tránsito, Oriana Urón Pinto, manifestó que el Municipio no tiene ningún vínculo con el propietario del local, puesto que es la Concesión de Tránsito, a la que se le declaró la caducidad en el año 2012, la que tiene un contrato de arrendamiento con Ramírez Ocampo.
“La diligencia se suspendió.Nunca un juzgado ha notificado a la administración sobre esto y todos los bienes que están en el Tránsito son del Municipio”, dijo la secretaria Urón Pinto.
La funcionaria manifestó no saber qué cifra es la que le adeudan y aseguró que todo eso debe ser resuelto en el proceso de liquidación de la Concesión de Tránsito; de tal manera, el propietario del local, deberá buscar su dinero en otro lugar diferente a la Secretaría de Tránsito.
El interrogante existente es que si la Secretaría de Tránsito no tiene nada que ver con el arriendo, por qué paga los servicios. Ante esto la Secretaria manifestó que por motivos del funcionamiento que debe tener la entidad, han venido asumiendo ese pago de servicios públicos.