Esto del fingimiento de ser víctima con el propósito de conquistar solidaridad, es una postura muy facilista que a veces ayuda a obtener beneficios. Esto lo traigo a colación, por lo que está ocurriendo con Novak Djokovic, tenista serbio campeón individual de 20 títulos de Grand Slam y actualmente número 1 del ATP Rankings, posición que ha ocupado por más de 350 semanas, superando a todos los tenistas masculinos que han descollado. 

Sin duda alguna, este serbio es un enorme tenista con extraordinarias condiciones físicas, pero por sus mañas non sanctas e incontrolable insolencia, muchos expertos e idólatras del tenis no le han dado el reconocimiento brindado al helvético Roger Federer y al ibérico Rafael Nadal, quienes también han sido campeones de 20 Grand Slam, máximos trofeos otorgados por la ATP, disputados en 4 países (Australia, Francia, Inglaterra y Estados Unidos) por los mejores tenistas del mundo. Los tres han triunfado en múltiples torneos realizados anualmente en diferentes metrópolis de todos los continentes del globo terráqueo.

Novak Djokovic no se ha vacunado contra el covid-19, a pesar de que la directiva de la ATP, por la pandemia, exige la vacunación anticovid-19 como requisito para poder participar en los campeonatos de tenis, tal negacionismo le ha causado dificultades para competir en el Australian Open 2022, torneo del cual es el actual campeón y que ha ganado en 9 ocasiones.

La aplicación de las vacunas conlleva la intención de prevenir el contagio de covid-19, que puede causar la muerte a los infectados; sin embargo, el susodicho tenista con 34 años se ha negado a recibir las dosis respectivas, ignorando las evidencias científicas de la utilidad preventiva, por lo menos, de que las vacunas minimizan la gravedad de la covid-19 en sus diversas variantes producidas por sus sucesivas mutaciones.

Lo anterior, pone a pensar que Novak Djokovic y su padre son antivacunas acérrimos, teniendo en cuenta, que hay fotos recientes donde aparece el número 1 del tenis mundial, participando en Belgrado a eventos públicos sin tapabocas, y, según sus abogados defensores, estando positivo de covid-19, fotos enviadas por Twitter por el mismo tenista, también otras publicadas en la cuenta de Facebook de la Federación de Tenis de Serbia. “El mejor tenista del planeta (…), que por séptima vez termina el año al frente de la ATP”, entregó los reconocimientos a los mejores jugadores jóvenes en 2021 de Belgrado, destacó la mencionada federación.  

La información está acompañada de fotografías en las que Djokovic aparece sonriente junto a los premiados sin tapabocas. El portal serbio ‘Blic’, informa que el 14 de diciembre del año pasado, Novak asistió a un partido de básquetbol jugado en Belgrado, se tomó fotos con algunos de los basquetbolistas sin tapabocas y uno de estos jugadores el 16 de ese mismo mes, dos días después, salió positivo por covid-19. Además, Novak ocultó información, queriendo birlar las medidas sanitarias tendientes a prevenir el contagio de covid-19, cuando llegó al aeropuerto de Melbourne, desde España, para participar al Australian Open 2022.

En la oficina de migración de ese aeropuerto le revocaron la visa de ingreso por no estar vacunado, después un fallo judicial le permitió la entrada a Melbourne, donde se encuentra entrenado para disputar el primer Grand Slam de 2022, el cual comienza el próximo lunes 17 de enero. En el momento de terminar esta columna, todavía el ministro de Inmigración de Australia no había decidido si Djokovic participará en el torneo de tenis que se realizará en Melbourne. En fin, en todas partes cuecen habas.

Por José Manuel Romero Churio