El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia, Ideam, tiene la boca rajada de tanto advertir sobre la afectación del suelo en el país y con nombre propio ha dicho cuáles son los departamentos más afectados por el mal uso que le damos a la tierra. El Cesar por supuesto está en esa […]
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia, Ideam, tiene la boca rajada de tanto advertir sobre la afectación del suelo en el país y con nombre propio ha dicho cuáles son los departamentos más afectados por el mal uso que le damos a la tierra.
El Cesar por supuesto está en esa lista. Quisiéramos decir todo lo contrario, pero infortunadamente este departamento se ha caracterizado últimamente por estar en todas las listas negras (con más niños muertos por desnutrición, con más menores trabajadores, con más violencia contra las mujeres, con más delincuencia, con más deudas con la Dian).
Según el Ideam los departamentos “más afectados por severidad de la degradación de suelos por erosión son La Guajira (28,1%), Magdalena (16,5%), Cesar (12%), Huila (8,4%), Sucre (7,6%), Santander (7,6%), Tolima (7,5%), Boyacá (6,8%), Atlántico (6,4%), Norte de Santander (5,7%) y Valle del Cauca (5,4%).
Buscando solución a esta situación, del Ministerio de Ambiente, el Ideam y la Universidad Nacional formularon la ‘Política para la Gestión Sostenible del Suelo’, con el apoyo de la Unión Europea, que integran seis líneas estratégicas enfocadas al fortalecimiento institucional y la armonización de normas y políticas; en los procesos de educación, capacitación y sensibilización; en el fortalecimiento de instrumentos de planificación ambiental y sectorial; en el monitoreo y seguimiento de la calidad de los suelos; en la investigación, innovación y transferencia de tecnología, y en la preservación, restauración y uso sostenible del suelo.
Todo es teoría. Pero ¿cómo aterrizarlo a la región? En el Cesar cómo se recupera el suelo afectado y cómo se integra al agricultor, al campesino y al productor a que cambien la actitud con el suelo.
En Colombia hay 114 millones 174 mil 800 hectáreas y de estas el 28,7 por ciento padece por el uso inadecuado del suelo por parte de los agricultores, lo que corresponde a más de 32 millones de hectáreas.
Hace 40 años el Cesar tenía dos millones de hectáreas aptas para cultivar, pero la excesiva utilización de químicos, la sequía y los efectos del cambio climático, más la violencia que hizo salir a los campesinos del campo, disminuyeron ostensiblemente esta capacidad productiva. Hoy no se está cultivando ni el 70 por ciento de esas hectáreas, pero igual el suelo está cansado, está dañado y las autoridades del Cesar algo tendrán que hacer.
No se justifica que existan las políticas en papel y en las regiones se hagan los sordos, ciegos y mudos. ¿Acogerán en el Cesar ‘Política para la Gestión Sostenible del Suelo’?
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia, Ideam, tiene la boca rajada de tanto advertir sobre la afectación del suelo en el país y con nombre propio ha dicho cuáles son los departamentos más afectados por el mal uso que le damos a la tierra. El Cesar por supuesto está en esa […]
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia, Ideam, tiene la boca rajada de tanto advertir sobre la afectación del suelo en el país y con nombre propio ha dicho cuáles son los departamentos más afectados por el mal uso que le damos a la tierra.
El Cesar por supuesto está en esa lista. Quisiéramos decir todo lo contrario, pero infortunadamente este departamento se ha caracterizado últimamente por estar en todas las listas negras (con más niños muertos por desnutrición, con más menores trabajadores, con más violencia contra las mujeres, con más delincuencia, con más deudas con la Dian).
Según el Ideam los departamentos “más afectados por severidad de la degradación de suelos por erosión son La Guajira (28,1%), Magdalena (16,5%), Cesar (12%), Huila (8,4%), Sucre (7,6%), Santander (7,6%), Tolima (7,5%), Boyacá (6,8%), Atlántico (6,4%), Norte de Santander (5,7%) y Valle del Cauca (5,4%).
Buscando solución a esta situación, del Ministerio de Ambiente, el Ideam y la Universidad Nacional formularon la ‘Política para la Gestión Sostenible del Suelo’, con el apoyo de la Unión Europea, que integran seis líneas estratégicas enfocadas al fortalecimiento institucional y la armonización de normas y políticas; en los procesos de educación, capacitación y sensibilización; en el fortalecimiento de instrumentos de planificación ambiental y sectorial; en el monitoreo y seguimiento de la calidad de los suelos; en la investigación, innovación y transferencia de tecnología, y en la preservación, restauración y uso sostenible del suelo.
Todo es teoría. Pero ¿cómo aterrizarlo a la región? En el Cesar cómo se recupera el suelo afectado y cómo se integra al agricultor, al campesino y al productor a que cambien la actitud con el suelo.
En Colombia hay 114 millones 174 mil 800 hectáreas y de estas el 28,7 por ciento padece por el uso inadecuado del suelo por parte de los agricultores, lo que corresponde a más de 32 millones de hectáreas.
Hace 40 años el Cesar tenía dos millones de hectáreas aptas para cultivar, pero la excesiva utilización de químicos, la sequía y los efectos del cambio climático, más la violencia que hizo salir a los campesinos del campo, disminuyeron ostensiblemente esta capacidad productiva. Hoy no se está cultivando ni el 70 por ciento de esas hectáreas, pero igual el suelo está cansado, está dañado y las autoridades del Cesar algo tendrán que hacer.
No se justifica que existan las políticas en papel y en las regiones se hagan los sordos, ciegos y mudos. ¿Acogerán en el Cesar ‘Política para la Gestión Sostenible del Suelo’?