Mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan están sumamente preocupados por los últimos acontecimientos suscitados en la Universidad Popular del Cesar en contra de los estudiantes.
Por un lado, los delincuentes motorizados los tienen acorralados en el barrio Sabanas, donde queda la sede universitaria, porque ningún universitario (a) puede salir y dar unos pasos por fuera de la edificación porque los criminales los atracan y si no entregan su cartera, el bolso y el celular tratan de asesinarlos a balazos.
Mientras tanto el Comandante de la Policía del Cesar y el Comandante del Distrito parece que se hacen los de los oídos sordos y la vista ciega y permiten –con su negligencia y apatía-, que la inseguridad sobresalga en ese sector de Valledupar. ¡Qué horror!
Ya contaron mis consejeros periodísticos que el otro día la estudiante de Psicología María Ospino, de 17 años, fue herida a bala a 200 metros de la entrada principal de la UPC, a las dos de la tarde, para robarle su celular y prometieron capturar a los delincuentes y a prestar seguridad por allí, pero la Policía no ha regresado.
Otra estudiante (Blanca C.) también de Psicología fue arrastrada frente a la universidad, al mediodía, por un motorizado que trató de arrebatarle su bolso. Y otra más fue atracada dos veces en menos de 30 minutos y hasta sus zapatos se llevaron.
Pero la Policía dice que los atracos son “pura” percepción”. Le ha quedado “grande” a la Policía prestar seguridad en ese sector de la UPC. ¿Qué queda para el resto de la ciudad? ¡Virgen Santísima!
Lo otro es que los miembros del Consejo Superior Universitario (CSU), aprobaron varios a acuerdos y en uno de ellos excluyeron a los estudiantes en la participación de la escogencia del Rector.
Es decir, pareciera que están practicando lo contrario de lo que se está hablando en los escenarios mundiales: inclusión, ¡Por Dios!
Otro desplante a los estudiantes es que la administración de la UPC pareciera que está dilatando –así lo afirman los mismos estudiantes- las elecciones para escoger al representante estudiantil ante el CSU a pesar de que hace un año que ese cargo está vacante.
En este estira y encoje que hay en la UPC, porque dentro de seis meses se tendrá que designar nuevo rector, se habla de maquinarias políticas, económicas y de compadrazgos al interior del alma mater, para elegir Rector, la que precisamente hoy cumple 38 años de fundada.
Mientras tanto, la Ministra de Educación, Gina Parody, llegó a Valledupar, se encerró con el Gobernador a hablar de muchas teorías educativas y fue al comedor escolar de Bello Horizonte y hasta desayunó con los niños y niñas en mesas con manteles, pero lo que no sabe es que ese día hicieron un plato especial para los infantes y a los niños nunca le ponen manteles en las mesas.
Lo otro es que los estudiantes de la UPC afirman que la Ministra se negó a hablar con ellos y prefirió irse para una universidad privada y dejó plantado a los directivos de la UPC tras afirmar que en dicha institución hay guerras personalizadas por el poder de la institución. ¡Por Dios! ¿Estamos en el infierno? Hasta la próxima semana.
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@tiochiro