Asistimos el día dos del presente mes y año a la trascendental exposición que se permitió nuestro periódico para llamar la atención a los funcionarios públicos como privados por la crítica situación que en todo sentido hemos sometido a la otrora navegable e importante fuente de agua como lo es el río Cesar, tal como lo pudo comprobar en su minucioso recorrido desde su nacimiento hasta su tributación intoxicada en la Ciénaga de Zapatosa en su trayecto de 282 kilómetros.

Teniendo en cuenta que lo que abunda no sobra en defensa de los recursos naturales, reiteramos sobre este tema parte de lo que hemos anotado en varias oportunidades por lo que conocemos por experiencia o por conocimiento de lo que pasa con el río Cesar.

Pues bien, en esta convocatoria EL PILÓN, manifiesta la profunda crisis ecológica que ha destruido la vida misma del río de la que venían sobreviviendo muchos pobladores de su ribera. Por esta situación crítica instó a las autoridades de La Guajira y el Cesar, como quien dice, a que declaren en calamidad pública esta fuente, activando los mecanismos de emergencia necesarios, para que desde ya se intervenga el río de manera integral, ya que este no es sólo un tema ambiental, sino también económico y cultural. Ya se conocen en la sociedad pero no se actúa respecto a la desecación de humedales, los diques ilegales, el vertimiento de aguas residuales, la mala disposición de basuras, la quema de bosques, relleno de humedales que indudablemente buscan dar paso a la agricultura y la ganadería, apuntando así a un verdadero deterioro sistémico del río. El problema no da espera y las actuaciones deben ser ya, tanto para el río como para la Ciénaga de Zapatosa a quien ha afectado directamente. Reclama EL PILÓN su pronta recuperación, en el entendido que esta puede generar empleo, salud, prosperidad para la región, beneficios sociales y obviamente ecológicos.

En síntesis, el llamado es a que no dejemos morir al río Cesar y de contera a la Ciénaga de Zapatosa. Registramos con profunda satisfacción que cada día haya personas e instituciones interesadas en estos temas sobre la destrucción del recurso agua. Con los estudios que hasta ahora se han realizado lo que falta es la aceleración del Plan de Ordenamiento y Manejo de la cuenca (POMCA) que ya está financiado por el Fondo de Adaptación del Ministerio de Ambiente, en este no sólo está incluido el plan para el río Cesar, sino también para la Ciénaga de Zapatosa.

Con la realización de este Foro ‘Miremos al río Cesar’ no se termina la campaña emprendida por nuestro Diario, ahora lo que sigue es servir de veedor para el seguimiento a las acciones positivas que deban realizarse. Ya todos conocemos debido a que se ha estudiado a la saciedad que la Ecoregión del Valle del río Cesar cuenta con suelos de alta productividad, lo que se ha constituido en uno de los pilares sobre los cuales se ha sustentado el potencial económico del departamento del Cesar, al considerar que en ella tienen asiento los centros productivos más importantes que a su vez constituyen el desarrollo socio-económico del departamento, como quiera que el área de la cuenca abarca más del 50 % del área total del departamento, que es de 2.290.000 hectáreas.

El diagnóstico de EL PILÓN, determina que existen varios aspectos asociados a la cultura de las comunidades que ocupan la cuenca y que generan impactos negativos sobre las condiciones ambientales y ecológicas del río, lo que supone desarrollar un proyecto amplio como lo hemos expresado nosotros en algunas ocasiones, de sensibilización, capacitación y regularización así como un eficaz sistema de control por las autoridades ambientales y policiales, mientras tanto se le da aplicación al POMCA. Necesitamos mucho espacio para este tema, sólo que finalizamos dando las gracias a EL PILÓN por su interés en nuestro río Cesar. Esto se llama responsabilidad empresarial.