Pese a que las autoridades del departamento del Cesar aseguran que Néstor Iván Martínez, quien fue asesinado el pasado 11 de septiembre en el municipio de Chiriguaná, no pertenecía a algún grupo dedicado a velar por los derechos humanos, la Asociación de los Consejos Comunitarios del Cesar, en especial los de Valledupar y el Observatorio de Territorios Étnicos y Campesinos agremiaciones campesinas piden que se esclarezca el asesinato del líder.

Esta asociación asegura que Néstor Iván Martínez era el vocero de la comisión de interlocución y miembro del Congreso de los Pueblos en el Centro del Cesar, y además era miembro del Consejo de las comunidades negras de La Sierra, El Cruce y La Estación, Conesice, en el Centro del Cesar, y de esa forma representaba no solo una apuesta por la defensa del territorio y del medio ambiente, sino también una lucha contra los sistemas extractivos del país como es el caso de la minería.

“Este homicidio permite entender que el pueblo afro del Cesar y del Caribe, necesita de forma urgente garantías y protección a la vida de los líderes de los Consejos Comunitarios”, manifestaron.

Las autoridades étnicas exigen la presencia de la Defensoría del Pueblo, la institucionalidad del orden regional, así como de la Agencia Nacional de Tierras, la Unidad Nacional de Victimas, el Ministerio del Interior para analizar las implicaciones que este homicidio le genera a los reclamantes de la propiedad colectiva y de otros recursos de uso común.

Sin embargo, las autoridades indicaron que según las investigaciones el hecho está relacionado con un hurto. De igual forma aseguraron que Martínez era agricultor, dado que el mismo hermano de la víctima, Javier Martínez, aseguró que él no pertenecía a ningún grupo campesino, de negritudes y Consejo de los Pueblos, explicó el coronel Mauricio Bonilla, quien además informó que en la finca donde sucedieron los hechos en la vereda La Sierrita, se hurtaron un arma de fuego.

Para la Asociación de los Consejos Comunitarios del Cesar, en especial los de Valledupar y el Observatorio de Territorios Étnicos y Campesinos, situaciones como ésta representan un grave riesgo en los territorios, teniendo en cuenta el momento histórico que vive el país por los acuerdos establecidos entre el Gobierno Nacional y la Cumbre Agraria, Étnica y Popular.

Para ellos, estos hechos constituyen amenazas a la Comisión de Interlocución, “el asesinato de Néstor Iván Martínez y del joven Neiman Lara, parecen recordar la muerte en extrañas circunstancias del profesor Hidalgo Manjares, otro de los líderes afro colombianos que murió defendiendo los derechos territoriales de las comunidades”, anotaron.

Redacción/ EL PILÓN