No creo que Uribe, Santos, Gaviria, los parapolíticos ni los clanes políticos regionales ni mucho menos los corruptos y criminales de este país voten por Petro. ¿Por qué?, porque Petro los ha denunciado y entregado en bandeja a la Fiscalía, a los jueces de Colombia. Petro es la antítesis de la corrupción.   

Seguramente, tampoco votarán por él los 4.000 ricos de este país que no pagan impuestos y él ha prometido que como presidente los obligará a pagar esos cánones. Por eso lo odian.

Quienes están usufructuando el poder económico y político hace años, no están de acuerdo con Gustavo Petro presidente. ¡Jamás de los jamases!, porque se les acaba la “vaca” lechera como dice el candidato Rodolfo Hernández quien insulta y señala de prostituta a las mujeres y a la Virgen María. Porque él ya está en el ostracismo de la vergüenza, ha perdido la dignidad de sus propias palabras y le da lo mismo “limpiarse el cul…” con las leyes del país o vociferar contra el corrupto, cuando él está en juicio por corrupción. ¿Petro es el bandido?, ¡no!, Petro es el verdugo de los corruptos. 

Quienes gozan del poder mal habido prefieren a Rodolfo, porque es lo mismo de lo mismo.  Podríamos citar ejemplos como la Superintendencia de Notariado y Registro, Fedegán nacional y regional, Procuraduría, Contraloría e instituciones nacionales y regionales, vemos allí cuotas de los gamonales; cambian los primos, los tíos, los hermanos, los hijos, pero cambian solo de nombres porque tienen los mismos apellidos.

Seguramente vemos al Ministro Daniel Palacios Martínez, al presidente de Fedegán José Félix Lafourie (desde agosto 2004), respaldando a Rodolfo, es obvio, porque lo seguro es que quedan en sus cargos. Así es en Colombia, “yo te apoyo y tú me mantienes”.

Obvio, les importa un bledo que la gente del Chocó, Cesar y los niños de La Guajira siga viviendo en extrema pobreza, sin agua potable, sin alimentos, que los campesinos de Colombia no tengan oportunidades para sacar adelante sus pequeñas parcelas, porque los recursos del Estado van para los latifundistas. 

Además, hay universidades y colegios privados en donde ningún niño o joven pobre pueden estudiar, porque las matrículas llegan al cielo; Petro propone educación gratuita para todos y esas entidades privadas tendrían que reducir sus cánones y ampliar coberturas.   

De otro lado, los clanes (familias) políticos de los departamentos le apuestan a Rodolfo Hernández y se asegura que están constriñendo a los empleados de gobernaciones, alcaldías, corporaciones, Caja Agraria, EPS, etc., para que voten por el continuismo. Se denuncia que hay un andamiaje criminal en la campaña de Rodolfo, para evitar la llegada de Petro presidente, hablan hasta de un atentado en su contra. Tratarían de atajarlo.

 “Vea, Rodolfo es la degradación total de la política. Peor, imposible; es el continuismo de una política que ha socavado todas las instituciones del Estado”, dicen estudiantes de la UPC.

Además, los ciudadanos miran perplejos como algunos medios de comunicación se han parcializado, se han vuelto ciegos y confunden señalamientos para avivar un escándalo político, para sacar provecho en sintonía. 

Mis consejeros periodísticos Tíochiro y Tíonan se refieren a los videos difundidos de las reuniones del candidato Gustavo Petro con su equipo de campaña, reuniones que fueron “chuzadas” y sus contenidos editados para mostrar solo lo que les conviene, al adversario.

 Por asuntos menores de esta intromisión estalló en Estados Unidos (1970) el escándalo Watergate, por el robo de unos documentos que, ocasionó la renuncia del presidente Richard Nixon. Sin embargo, tratan de culpar al ofendido, el criminal fanfarrón es otro.  Hasta la próxima semana. [email protected]   @tiochiro.