La decisión surgió luego de tres años de estudios y 17 reuniones con líderes de la Federación Nacional de Sordos del país
A través de una resolución, el Ministerio de Transporte expidió que las personas con discapacidad auditiva puedan acceder a licencias de conducción para manejar vehículos particulares en el territorio nacional.
La decisión surgió luego de tres años de estudios y 17 reuniones con líderes de la Federación Nacional de Sordos del país, Fenascol, además del apoyo técnico de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, ANSV.
De igual manera, valoraron un estudio técnico de la Universidad de los Andes y un análisis del Instituto Nacional para Sordos en la que evidenciaron que no había alguna relación entre las limitaciones auditivas, la tasa de siniestros viales y las habilidades para conducir.
“Por muchos años la comunidad sorda solicitó las condiciones para acceder a la licencia de conducción de vehículos particulares y hoy el legado del Gobierno nacional es esta resolución que les permite ejercer su autonomía en este medio de transporte. Dejamos, además, las bases sentadas para que se sigan construyendo de manera conjunta los reglamentos para que el alcance de este documento llegue al transporte público”, dijo Luis Lota, director de la ANSV.
Como referente sobre esto están Australia, Canadá y Reino Unido, países que son referentes en disminución de las cifras de siniestralidad vial.
No obstante, las dependencias de tránsito tendrán un año para garantizar la accesibilidad y establecer canales de atención incluyente para las personas con pérdida auditiva, que accedan a sus servicios y trámites.
La decisión surgió luego de tres años de estudios y 17 reuniones con líderes de la Federación Nacional de Sordos del país
A través de una resolución, el Ministerio de Transporte expidió que las personas con discapacidad auditiva puedan acceder a licencias de conducción para manejar vehículos particulares en el territorio nacional.
La decisión surgió luego de tres años de estudios y 17 reuniones con líderes de la Federación Nacional de Sordos del país, Fenascol, además del apoyo técnico de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, ANSV.
De igual manera, valoraron un estudio técnico de la Universidad de los Andes y un análisis del Instituto Nacional para Sordos en la que evidenciaron que no había alguna relación entre las limitaciones auditivas, la tasa de siniestros viales y las habilidades para conducir.
“Por muchos años la comunidad sorda solicitó las condiciones para acceder a la licencia de conducción de vehículos particulares y hoy el legado del Gobierno nacional es esta resolución que les permite ejercer su autonomía en este medio de transporte. Dejamos, además, las bases sentadas para que se sigan construyendo de manera conjunta los reglamentos para que el alcance de este documento llegue al transporte público”, dijo Luis Lota, director de la ANSV.
Como referente sobre esto están Australia, Canadá y Reino Unido, países que son referentes en disminución de las cifras de siniestralidad vial.
No obstante, las dependencias de tránsito tendrán un año para garantizar la accesibilidad y establecer canales de atención incluyente para las personas con pérdida auditiva, que accedan a sus servicios y trámites.