Con tristeza y decepción, los familiares de Abilio José Soto Guevara recibieron la noticia de la liberación de la persona responsable de la muerte del joven de 19 años. Se trata de César Augusto Molina Palomino, un patrullero de la Policía Nacional adscrito a la estación del municipio de Morales, Bolívar.

“Todo es una burla. La tristeza no solo es de nuestra familia, sino de la comunidad manaurera en general. Somos personas campesinas y después que sucedió este hecho hemos confiado en las autoridades para que se esclarezcan los hechos que ocurrieron hace tres años. Por lo menos esperábamos que fuera una medida de aseguramiento así sea en casa, pero la justicia sigue sin actuar”, dijo Camilo Mandón, abogado y primo de la víctima.

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De acuerdo con el jurista, el uniformado de 33 años implicado en el caso registrado el 19 de junio del 2021 en el municipio de Manaure, Cesar, ha seguido agrediendo a otras personas “aprovechándose de su cargo”, por lo que aseguró que presenta medidas disciplinarias en su contra y aun así las autoridades nada hicieron. “No solo mi primo fue una víctima. Esta decisión de la juez es revictimizante para la familia”, expresó. 

Según el avance de la investigación, Soto Guevara en el momento de los hechos eludió un puesto de control de la Policía Nacional, ubicado sobre la vía que conduce al corregimiento de Sábanas de León. Se transportaba como como parrillero en una motocicleta y al huir de las autoridades para que no le quitaran el vehículo en el que iba en compañía de otro joven llamado Yerson Felizola, recibió un disparo en la espalda que le causó la muerte, presuntamente por sacar un arma para dispararle al uniformado.

Molina Palomino había sido capturado la tarde del lunes 22 de julio mediante una orden judicial emanada por el Juzgado 12 Penal con funciones de control de garantías por el Cuerpo Técnico de Investigación del CTI de la Fiscalía General de la Nación de la mano con el Gaula Militar en Barrancabermeja, Santander. Fue trasladado hasta la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía del municipio. Posterior a ello, la tarde del martes 23 de julio el Juzgado Primero Penal Municipal con funciones de control de garantías le otorgó la libertad, decisión que no fue apelada. 

Pese a la libertad del uniformado, Molina Palomino continuará ligado al proceso donde enfrenta cargos por el delito de homicidio agravado con dolo directo.