Alrededor de 800 familias habitan este sector de la ciudad con un número de personas que van de 4 a 10 miembros por vivienda.
Habitantes del barrio Candelaria Sur en Valledupar se agolparon en la vivienda de la presidenta de la Junta de Acción Comunal en señal de solidaridad y al mismo tiempo para protestar por lo que ellos consideran “un olvido por parte de la administración municipal”.
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Entre las necesidades expuestas ante este medio de comunicación, la población reclama ayudas alimentarias que no reciben desde el pasado primero de abril, aunque dicha gestión fue obra de la Gobernación del Cesar, que los visitó para hacer las entregas humanitarias, sin embargo, según las personas de este sector de la ciudad “la Alcaldía de Valledupar no los ha visitado”.
Katerine Salinas, presidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio Candelaria Sur, hizo un llamado al alcalde Mello Castro “para que visite este sector y pueda ayudar a los habitantes”.
“Los pobladores nos hemos encerrado con el fin de cumplir con la cuarentena, con el toque de queda y no ha sido posible que el mandatario nos visite y lo que es peor no hemos recibido ayudas por parte de su administración, por lo que encerrar a los pobladores sin tener nada para alimentarse es algo ilógico”, relató Salinas.
Con un número cercano a los 3.000 habitantes, Candelaria Sur es un barrio que se caracteriza por tener una fuerte cantidad de adultos mayores, cuyo promedio ronda entre los 60 y 85 años de edad, además de población infantil, quienes son los principales afectados en esta situación que ha puesto a prueba a la población mundial.
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Lo que más preocupa a los habitantes es que al ser de estratos bajos y con familias que superan hasta diez miembros en el hogar, se les ha dificultado llevar el sustento diario a sus casas.
La covid-19 ha impuesto la ley en materia económica y según el reporte del Dane para el 2018, en cuanto a pobreza monetaria se refiere, el estudio cita que en la capital del Cesar el 34, 4 % de las familias viven bajo esta condición, en pobreza.
Una de esas familias es la de Manuel Barrios, un adulto mayor que se gana la vida con la venta de ‘cholados’, pero a raíz de la cantidad de limitantes (que por salud) han impuesto al sector comercio ya sea formal o informal, la vida para este vendedor se ha tornado más difícil de lo que ya era.
“Es injusto que nos manden a encerrarnos y a defendernos como podamos, eso raya en lo insólito, pues si bien están entregando ayudas de alimentación para tratar de mitigar la crisis, a este sector no se ha acercado ningún funcionario de la Alcaldía siquiera a darnos siquiera una bolsa de agua”, dijo Barrios, habitante del sector.
Así las cosas, los habitantes de Candelaria Sur se expresaron ante los medios de comunicación para que su clamor por ayuda llegue a los oídos del mandatario Castro González, que según este sector de la ciudad, está en deuda con ellos, pues sus neveras permanecen como las calles de Valledupar en los días donde rige el toque de queda, desoladas.
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Para conocer la opinión del alcalde Mello Castro, EL PILÓN trató de contactarlo, pero no fue posible conocer su punto de vista con relación a las denuncias realizadas por los habitantes del barrio Candelaria Sur.
POR: ROBERT CADAVID / EL PILÓN
[email protected]
Alrededor de 800 familias habitan este sector de la ciudad con un número de personas que van de 4 a 10 miembros por vivienda.
Habitantes del barrio Candelaria Sur en Valledupar se agolparon en la vivienda de la presidenta de la Junta de Acción Comunal en señal de solidaridad y al mismo tiempo para protestar por lo que ellos consideran “un olvido por parte de la administración municipal”.
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Entre las necesidades expuestas ante este medio de comunicación, la población reclama ayudas alimentarias que no reciben desde el pasado primero de abril, aunque dicha gestión fue obra de la Gobernación del Cesar, que los visitó para hacer las entregas humanitarias, sin embargo, según las personas de este sector de la ciudad “la Alcaldía de Valledupar no los ha visitado”.
Katerine Salinas, presidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio Candelaria Sur, hizo un llamado al alcalde Mello Castro “para que visite este sector y pueda ayudar a los habitantes”.
“Los pobladores nos hemos encerrado con el fin de cumplir con la cuarentena, con el toque de queda y no ha sido posible que el mandatario nos visite y lo que es peor no hemos recibido ayudas por parte de su administración, por lo que encerrar a los pobladores sin tener nada para alimentarse es algo ilógico”, relató Salinas.
Con un número cercano a los 3.000 habitantes, Candelaria Sur es un barrio que se caracteriza por tener una fuerte cantidad de adultos mayores, cuyo promedio ronda entre los 60 y 85 años de edad, además de población infantil, quienes son los principales afectados en esta situación que ha puesto a prueba a la población mundial.
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Lo que más preocupa a los habitantes es que al ser de estratos bajos y con familias que superan hasta diez miembros en el hogar, se les ha dificultado llevar el sustento diario a sus casas.
La covid-19 ha impuesto la ley en materia económica y según el reporte del Dane para el 2018, en cuanto a pobreza monetaria se refiere, el estudio cita que en la capital del Cesar el 34, 4 % de las familias viven bajo esta condición, en pobreza.
Una de esas familias es la de Manuel Barrios, un adulto mayor que se gana la vida con la venta de ‘cholados’, pero a raíz de la cantidad de limitantes (que por salud) han impuesto al sector comercio ya sea formal o informal, la vida para este vendedor se ha tornado más difícil de lo que ya era.
“Es injusto que nos manden a encerrarnos y a defendernos como podamos, eso raya en lo insólito, pues si bien están entregando ayudas de alimentación para tratar de mitigar la crisis, a este sector no se ha acercado ningún funcionario de la Alcaldía siquiera a darnos siquiera una bolsa de agua”, dijo Barrios, habitante del sector.
Así las cosas, los habitantes de Candelaria Sur se expresaron ante los medios de comunicación para que su clamor por ayuda llegue a los oídos del mandatario Castro González, que según este sector de la ciudad, está en deuda con ellos, pues sus neveras permanecen como las calles de Valledupar en los días donde rige el toque de queda, desoladas.
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Para conocer la opinión del alcalde Mello Castro, EL PILÓN trató de contactarlo, pero no fue posible conocer su punto de vista con relación a las denuncias realizadas por los habitantes del barrio Candelaria Sur.
POR: ROBERT CADAVID / EL PILÓN
[email protected]