Con más de 160 botaderos ilegales en Valledupar, una escombrera municipal ha sido una necesidad imperiosa en la ciudad debido a que conductores de vehículos de tracción animal, contratistas de obras y particulares arrojan escombros, desechos de las podas de árboles, cemento, vidrios, entre otros residuos en lotes que colindan con áreas urbanas, generando un impacto ambiental negativo y un mal aspecto en la ciudad.

De acuerdo con el concejal de Valledupar, Luis Fernando Quintero, no se ha establecido de manera clara un lugar para el depósito final de desechos de demolición y construcción. Debido a esto los encargados de trasportar dichos materiales los arrojan en terrenos aparentemente abandonados y hasta en la margen derecha del río Guatapurí, específicamente en sectores como Zapato en Mano, Nueve de Marzo, entre otros.

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“Valledupar no puede seguir sin saber en dónde se botan los residuos sólidos. Tenemos la problemática de que los conductores de vehículos de tracción animal  los arrojan donde sea. No hay una organización por ese lado y eso afecta a nuestras cuencas hídricas y el medio ambiente. Valledupar que estaba caracterizada por ser una de las ciudades más limpias de Colombia hoy tiene otro rumbo”, manifestó el corporado.  

Quintero aseveró que en los Planes de Desarrollo de las últimas cuatro administraciones de Valledupar ha estado contemplada la construcción de una escombrera, pero esta no se ha materializado. Señaló que ni él ni el Concejo Municipal tienen claridad sobre las dificultades que hay para la construcción de este espacio destinado no solo para el depósito de material de construcción,  sino  también para el reciclaje. 

La administración municipal precisó que hay seis sitios que podrían estar dispuestos para el depósito de material de construcción y demolición, entre estos están: la cantera Santa Lucia del Valle,  Pavimentos El Dorado, finca Las Ovejas, cantera Megasfalto, finca El Consuelo y Hacienda Italia.

Según el concejal, a pesar de la disposición de estos seis sitios el Concejo Municipal no tiene conocimiento de un “avance positivo” sobre la escombrera de Valledupar, acotando que en ciudades de la región Caribe, como Montería, la construcción de su escombrera en el 2018 mejoró la recolección de desechos sólidos y la limpieza urbana en dicha ciudad.  

Agregó que la escombrera municipal necesitaría de unas adecuaciones para poder clasificar de manera correcta los escombros y así reutilizarlos en otros proyectos u obras, precisando que no solo los transportadores de este tipo de desechos les falta responsabilidad y conciencia ambiental, también algunos vallenatos no tienen cultura ciudadana y cualquier predio desocupado lo utilizan como botadero.

LAS LICENCIAS AMBIENTALES 

En respuesta a un derecho de petición del vigía ambientalista, Luis Maestre, sobre las acciones que está realizando la administración municipal para solucionar la disposición de escombros en áreas urbanas de la ciudad y en la margen derecha del río Guatapurí, la Oficina  Asesora de Planeación Municipal aseveró que la cantera Santa Lucía del Valle ha operado como sitio para depositar los escombros.

Esta dependencia señaló que dicho lugar cuenta con una licencia ambientalista por parte de la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, y que se realizará una visita de campo a los predios Pavimentos El Dorado, finca Las Ovejas, cantera Megasfalto, finca El Consuelo y Hacienda Italia para evaluar las condiciones de estos terrenos después de que disminuya el pico de infección de la pandemia de la covid-19.

La resolución 472 del 2017 del Ministerio de Ambiente es la que reglamenta la gestión integral de los residuos generados en las actividades de Construcción y Demolición, RCD. Dicho documento ordena que se gestione la prevención y reducción de la generación de RCD, el aprovechamiento de este y  la disposición final. Incluso, el artículo 11 de esta reglamentación ordena a los municipios y distritos a seleccionar los sitios específicos para la disposición final de este tipo de residuos.

Debido a las directrices del Ministerio de Ambiente y ante la necesidad de la ciudad de tener una escombrera establecida y en pronto funcionamiento, el Concejo de Valledupar le solicitó mayor información a la Oficina  Asesora de Planeación Municipal sobre los avances o dificultades que han tenido en el proceso para la construcción de la escombrera.

El diario EL PILÓN intentó comunicarse con la jefa de la Oficina Asesora de Planeación Municipal, Cecilia Castro, para conocer los avances que ha tenido esta dependencia en la disposición de los residuos de construcción, pero resultó infructuoso porque no contestó las llamadas ni mensajes. 

Namieh Baute Barrios / EL PILÓN