No estamos seguros de que el esquema de solución que plantea el Gobierno Nacional para la prestación del servicio de energía que actualmente presta Electricaribe, en intervención, dé los resultados esperados para terminar con el viacrucis que padecen más de 10 millones de habitantes de la región.
No estamos seguros de que el esquema de solución que plantea el Gobierno Nacional para la prestación del servicio de energía que actualmente presta Electricaribe, en intervención, dé los resultados esperados para terminar con el viacrucis que padecen más de 10 millones de habitantes de la región, pero sí urge que este avance para evitar que sigan las asonadas, como las ocurridas en días pasados en el departamento del Cesar.
La quema de una oficina de la empresa de energía en el municipio de Chimichagua y el bloqueo de la Troncal de Oriente en el corregimiento de La Loma, jurisdicción del municipio de El Paso, son hechos inaceptables pero entendibles. El desespero de las comunidades es motivado por varias situaciones, entre esas el pago de un servicio costoso y deficiente.
Destacamos que el compromiso del Gobierno Nacional en dar una solución definitiva a la región; así como su compromiso de invertir cerca de 850 mil millones de pesos para mejoramiento de redes y subestaciones en los siete departamentos, mientras se define el o los nuevos prestadores del servicio en la Costa, que representa el 23% de la demanda nacional de energía.
Desde que la Superintendencia de Servicios Públicos hizo la toma de posesión de la empresa no ha habido cambios sustanciales en la prestación del servicio, siguen las fallas. Por ello, esperamos que no haya tropiezos en las etapas del proceso de búsqueda de nuevos operadores, la segmentación del mercado y los requisitos que deben cumplir los interesados, entre otros aspectos.
La segmentación del mercado se refiere a dos grandes sectores para la prestación del servicio. CaribeSol: que integra a los departamentos de Atlántico, Magdalena y Guajira, con una participación en el mercado de 10.8% y 1.21 millones de clientes; y CaribeMar: conformada por Bolívar, Sucre, Córdoba y Cesar, con un mercado de 10.9% y 1.51 millones de clientes.
Los nuevos operadores tendrán que ejecutar un plan de inversión de 8.7 billones de pesos, el cual debe asegurar la calidad y continuidad del servicio de energía y así acabar con la crisis energética del Caribe colombiano.
La Superservicios precisa que el plazo de recepción de ofertas para la precalificación irá hasta el próximo 17 de mayo. En junio se darán a conocer los resultados de la precalificación y se abrirá el acceso a los datos empresariales de Electricaribe para que las mismas seleccionadas puedan estructurar sus ofertas finales, las cuales deberán ser presentadas el 16 de septiembre. Ese mismo mes se hará la subasta del primer segmento y en octubre del segundo, así como la subasta total de la compañía.
Así las cosas, los usuarios deben tener paciencia mientras todo este proceso avanza y se dé una solución que acabe con el malestar que genera no contar este servicio de manera permanente. La meta es un servicio de mayor calidad y que pueda llegar a ser más barato o por lo menos sin cobros que generen tantas suspicacias como los que actualmente se registran y que tienen colmadas de quejas las salas de atención de Electricaribe.
Paciencia, ya hay un plan de acción que hay que esperar se cumpla y dé los buenos resultados que todos esperamos.
No estamos seguros de que el esquema de solución que plantea el Gobierno Nacional para la prestación del servicio de energía que actualmente presta Electricaribe, en intervención, dé los resultados esperados para terminar con el viacrucis que padecen más de 10 millones de habitantes de la región.
No estamos seguros de que el esquema de solución que plantea el Gobierno Nacional para la prestación del servicio de energía que actualmente presta Electricaribe, en intervención, dé los resultados esperados para terminar con el viacrucis que padecen más de 10 millones de habitantes de la región, pero sí urge que este avance para evitar que sigan las asonadas, como las ocurridas en días pasados en el departamento del Cesar.
La quema de una oficina de la empresa de energía en el municipio de Chimichagua y el bloqueo de la Troncal de Oriente en el corregimiento de La Loma, jurisdicción del municipio de El Paso, son hechos inaceptables pero entendibles. El desespero de las comunidades es motivado por varias situaciones, entre esas el pago de un servicio costoso y deficiente.
Destacamos que el compromiso del Gobierno Nacional en dar una solución definitiva a la región; así como su compromiso de invertir cerca de 850 mil millones de pesos para mejoramiento de redes y subestaciones en los siete departamentos, mientras se define el o los nuevos prestadores del servicio en la Costa, que representa el 23% de la demanda nacional de energía.
Desde que la Superintendencia de Servicios Públicos hizo la toma de posesión de la empresa no ha habido cambios sustanciales en la prestación del servicio, siguen las fallas. Por ello, esperamos que no haya tropiezos en las etapas del proceso de búsqueda de nuevos operadores, la segmentación del mercado y los requisitos que deben cumplir los interesados, entre otros aspectos.
La segmentación del mercado se refiere a dos grandes sectores para la prestación del servicio. CaribeSol: que integra a los departamentos de Atlántico, Magdalena y Guajira, con una participación en el mercado de 10.8% y 1.21 millones de clientes; y CaribeMar: conformada por Bolívar, Sucre, Córdoba y Cesar, con un mercado de 10.9% y 1.51 millones de clientes.
Los nuevos operadores tendrán que ejecutar un plan de inversión de 8.7 billones de pesos, el cual debe asegurar la calidad y continuidad del servicio de energía y así acabar con la crisis energética del Caribe colombiano.
La Superservicios precisa que el plazo de recepción de ofertas para la precalificación irá hasta el próximo 17 de mayo. En junio se darán a conocer los resultados de la precalificación y se abrirá el acceso a los datos empresariales de Electricaribe para que las mismas seleccionadas puedan estructurar sus ofertas finales, las cuales deberán ser presentadas el 16 de septiembre. Ese mismo mes se hará la subasta del primer segmento y en octubre del segundo, así como la subasta total de la compañía.
Así las cosas, los usuarios deben tener paciencia mientras todo este proceso avanza y se dé una solución que acabe con el malestar que genera no contar este servicio de manera permanente. La meta es un servicio de mayor calidad y que pueda llegar a ser más barato o por lo menos sin cobros que generen tantas suspicacias como los que actualmente se registran y que tienen colmadas de quejas las salas de atención de Electricaribe.
Paciencia, ya hay un plan de acción que hay que esperar se cumpla y dé los buenos resultados que todos esperamos.