El futbolista colombiano se encontraba detenido desde el lunes por violencia doméstica.
En horas de la noche de ayer, Pablo Armero salió de la cárcel en la que se encontraba recluido en Miami, tras ser juzgado por agresión doméstica a su esposa, a quien le cortó el cabello a la fuerza el pasado lunes, luego de que ella se reusara a tener relaciones sexuales con el futbolista.
El colombiano recibió una orden de alejamiento de la madre de sus dos hijos, María Elena Bazán, y le fijaron una fianza de 1.500 dólares, según el canal local ‘CBS’. La víctima aseguró a la policía que este incidente hace parte de un historial de violencia doméstica por parte del futbolista, que no fue convocado por el técnico José Pékerman para la Copa América Centenario que arranca este viernes con el partido entre Estados Unidos y Colombia.
Policías acudieron al Hotel Metropolitan alertados por varias quejas de huéspedes debido al escándalo registrado en una de las habitaciones. Según el reporte de la Policía, en otra de las habitaciones estaban sus dos hijos acompañados de otro adulto. Los agentes dijeron en su informe que “encontraron cabello humano en el suelo del cuarto de hotel” y a una mujer “sin parte de su cabello” que, mientras lloraba, les aseguró que había sido atacada por el defensa, de 29 años.
El exjugador de Palmeiras y Flamengo brasileños y Nápoles y Milán italianos tomó una cortadora de cabello y, tras someter a su mujer, le cortó parte del mismo, según el informe policial. Según los investigadores, Armero señaló que él y su esposa estuvieron de copas y que cuando llegaron al hotel ella le pidió que le cortara el cabello, versión que desmintió Bazán.
EFE.
El futbolista colombiano se encontraba detenido desde el lunes por violencia doméstica.
En horas de la noche de ayer, Pablo Armero salió de la cárcel en la que se encontraba recluido en Miami, tras ser juzgado por agresión doméstica a su esposa, a quien le cortó el cabello a la fuerza el pasado lunes, luego de que ella se reusara a tener relaciones sexuales con el futbolista.
El colombiano recibió una orden de alejamiento de la madre de sus dos hijos, María Elena Bazán, y le fijaron una fianza de 1.500 dólares, según el canal local ‘CBS’. La víctima aseguró a la policía que este incidente hace parte de un historial de violencia doméstica por parte del futbolista, que no fue convocado por el técnico José Pékerman para la Copa América Centenario que arranca este viernes con el partido entre Estados Unidos y Colombia.
Policías acudieron al Hotel Metropolitan alertados por varias quejas de huéspedes debido al escándalo registrado en una de las habitaciones. Según el reporte de la Policía, en otra de las habitaciones estaban sus dos hijos acompañados de otro adulto. Los agentes dijeron en su informe que “encontraron cabello humano en el suelo del cuarto de hotel” y a una mujer “sin parte de su cabello” que, mientras lloraba, les aseguró que había sido atacada por el defensa, de 29 años.
El exjugador de Palmeiras y Flamengo brasileños y Nápoles y Milán italianos tomó una cortadora de cabello y, tras someter a su mujer, le cortó parte del mismo, según el informe policial. Según los investigadores, Armero señaló que él y su esposa estuvieron de copas y que cuando llegaron al hotel ella le pidió que le cortara el cabello, versión que desmintió Bazán.
EFE.