Un hombre que se dedicaba a los oficios varios y al ordeño, falleció al recibir una descarga eléctrica y golpes severos en la cabeza, al caer sobre unas piedras, luego que lo sorprendiera un ‘corrientazo’ de las redes primarias de la energía eléctrica, momentos en que trataba de reconectar un cable que iluminaría a una improvisada cancha de fútbol construida en uno de los sectores subnormales del municipio de La Paz, Cesar.

La víctima fue identificada por las autoridades como Nelson Enrique Araújo Castro, de 23 años, nacido en Valledupar y residente en la invasión 19 de Mayo en el municipio de La Paz, Cesar.

El hombre se subió a un poste de madera con una escalera que distribuye el servicio de energía de manera rudimentaria a los habitantes de la invasión localizado a la salida de la población, vía al vecino departamento de La Guajira.

De acuerdo con los vecinos, Araújo Castro recorrió casi todo el barrio buscando una escalera y nadie se la quería prestar, debido al mal estado del poste de madera y la cantidad de cables que salían del mismo.

Para la comunidad, era un peligro el poste y las líneas, porque la mayoría de los alambres que utilizan para conducir la energía, están pelados, lo que provoca corto circuito, pero ante la insistencia de Araújo Castro, uno de los vecinos le prestó dicha escalera.

“Ese era su día, Dios permitió que su muerte tenía que ser de esa manera y hay que tener resignación, porque de cualquier manera tiene que morir uno. El hacer contacto con los cables desde una altura cercana a los cinco metros, la corriente lo lanzó a tierra y cayó boca abajo sobre unas piedras en uno de los patios de las casas vecinas. De allí, fue auxiliado y trasladado en un mototaxi hasta el hospital Marino Zuleta de La Paz, porque aún respiraba, pero el camino hizo el último suspiro y llegó sin vida”, indicó en medio de sollozos y con lágrimas, una de sus hermanas.

El hombre que murió en el incidente con el poste, era hijo de Antonio Araújo Guerrero y Visita Castro Domínguez, vivía en unión libre con Wendy Domínguez Alandete, de cuya unión quedaron dos hijos.

Por Abdel Martínez Pérez
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