En Quito, Ecuador, se inauguró ayer la Mesa Pública de Conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional, Eln, la otra guerrilla colombiana.
El 30 de marzo del año 2016 el Gobierno Nacional y el Eln acordaron en Venezuela una agenda de seis puntos para negociar el fin del conflicto. Este primer paso se dio luego de dos años conversaciones exploratorias y aunque se pensaba que la mesa de diálogos se instalaría pronto, pasó casi un año para que iniciara formalmente la negociación.
Ni siquiera el 27 de octubre cuando todo estaba dispuesto, se pudo dar. Ese día de 2016 no fue posible la instalación de la mesa de diálogo por la no liberación del excongresista Odín Sánchez, que se convirtió en una exigencia del presidente Juan Manuel Santos, el excongresista chocoano que fue secuestrado por esa guerrilla tres de abril, cuando se intercambió por su hermano Patrocinio.
Los seis puntos acordados fueron: Participación y transformaciones de la sociedad, democracia, cese del fuego, víctimas e implementación. Son los puntos que ahora sí discutirán en la Mesa Pública de Conversaciones que ayer fue inaugurada en Quito, Ecuador, con el liderazgo del jefe del equipo negociador del Gobierno nacional, Juan Camilo Restrepo, y el jefe negociador del Ejército Nacional de Liberación (Eln), Pablo Beltrán.
“Colombia hoy no es el mismo país que hemos conocido en las últimas décadas. El de hoy, es un país con renovadas esperanzas de futuro, de unidad, de progreso; con desafiantes mandatos y expectativas de la sociedad. Nuestra nación hoy es un laboratorio universal de construcción de la paz, quizá el más vanguardista de esta época”, expresó Restrepo, quien a la vez recordó que estas conversaciones serán para poner la grandeza de la paz por encima de las diferencias y para entender que son precisamente esas diferencias las que nos enriquecen como nación.
El jefe del Equipo Negociador del gobierno colombiano señaló que serán fieles al acuerdo suscrito en marzo pasado y destacó de esa agenda dos elementos: “la decisión de las partes de ejecutar los temas con la mayor “celeridad y rigurosidad”, criterios estos que quedaron expresamente consignados en el acuerdo”.
Restrepo fue enfático al señalar que “No venimos a esta mesa a explorar; ya la fase exploratoria quedó atrás. El objetivo de esta mesa –cito el texto- es “subscribir un Acuerdo Final para terminar el conflicto armado y acordar transformaciones en búsqueda de una Colombia en paz y equidad”. Esa es nuestra misión.
Terminar el conflicto para construir la paz
Durante el discurso de instalación, Juan Camilo Restrepo se refirió a las víctimas y a la necesidad de que el Eln se comprometa a no cometer más secuestros.
“Colombia honra a las víctimas de este conflicto. Insistiremos, como lo hemos hecho sin cesar, en que los derechos de las victimas están en el centro de estas conversaciones. La verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición son las raíces profundas y reales de la reconciliación. Estamos aquí para garantizar y defender esos derechos”.
Por eso recalcó que la ciudadanía no quiere más enfrentamientos en los que mueran jóvenes, los ataques contra la infraestructura que afectan a la población; la intranquilidad de vivir acosados e intimidados por la violencia diaria y de la inaceptable práctica del secuestro.
“Quiero aprovechar esta ocasión para invitar al Eln a darle hoy la mejor noticia a los colombianos con su renuncia pública al secuestro. No es aceptable en ningún caso, ni en el humanitario, ni en el plano ético, ni en el político, ni jurídico. El secuestro fue, ha sido y será injustificable”, dijo el jefe del equipo negociador.
Eln apuesta por acuerdos sucesivos para cese bilateral del fuego
El jefe negociador del Ejército Nacional de Liberación (Eln) en las conversaciones de paz con el Gobierno colombiano, Pablo Beltrán, dijo durante su discurso de instalación de la Mesa Pública de Negociaciones, que le apuesta a alcanzar una serie de “acuerdos sucesivos proyectados a materializar un cese bilateral del fuego”.
También consideró necesario que ambas partes demuestren voluntad de cambio.
Pablo Beltrán fue el primero en hablar. Primero agradeció al país, a los medios y a la comunidad internacional por el apoyo en los diálogos.
“Nos alienta la esperanza de ponerle fin al enfrentamiento. Nos alienta el respaldo de los pueblos, gobiernos vecinos y la comunidad internacional”, dijo Beltrán y agregó que es el momento del Eln de cambiar “en pro de la democratización”.
Pronunciamiento
La Federación Nacional de Departamentos que agrupa a los gobernadores de Colombia, expresó que el inicio de las conversaciones con el Eln se constituyen en un nuevo y significativo avance en el empeño de consolidar la paz en nuestra nación.
En un comunicado de tres puntos manifestaron al jefe del Equipo Negociador del Gobierno, Juan Camilo Restrepo, a todos sus integrantes y a los delegados del Eln, su disposición de apoyar y acompañar el sacrificado trabajo que les demandará el cumplimiento de su trascendental responsabilidad, así mismo su voluntad de hacer presencia activa en los espacios de participación que se establezcan en este proceso con el ánimo de contribuir a la generación, desde las regiones y sus comunidades, de propuestas e iniciativas que hagan realidad la construcción de la paz desde los territorios.
En Quito, Ecuador, se inauguró ayer la Mesa Pública de Conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional, Eln, la otra guerrilla colombiana.
El 30 de marzo del año 2016 el Gobierno Nacional y el Eln acordaron en Venezuela una agenda de seis puntos para negociar el fin del conflicto. Este primer paso se dio luego de dos años conversaciones exploratorias y aunque se pensaba que la mesa de diálogos se instalaría pronto, pasó casi un año para que iniciara formalmente la negociación.
Ni siquiera el 27 de octubre cuando todo estaba dispuesto, se pudo dar. Ese día de 2016 no fue posible la instalación de la mesa de diálogo por la no liberación del excongresista Odín Sánchez, que se convirtió en una exigencia del presidente Juan Manuel Santos, el excongresista chocoano que fue secuestrado por esa guerrilla tres de abril, cuando se intercambió por su hermano Patrocinio.
Los seis puntos acordados fueron: Participación y transformaciones de la sociedad, democracia, cese del fuego, víctimas e implementación. Son los puntos que ahora sí discutirán en la Mesa Pública de Conversaciones que ayer fue inaugurada en Quito, Ecuador, con el liderazgo del jefe del equipo negociador del Gobierno nacional, Juan Camilo Restrepo, y el jefe negociador del Ejército Nacional de Liberación (Eln), Pablo Beltrán.
“Colombia hoy no es el mismo país que hemos conocido en las últimas décadas. El de hoy, es un país con renovadas esperanzas de futuro, de unidad, de progreso; con desafiantes mandatos y expectativas de la sociedad. Nuestra nación hoy es un laboratorio universal de construcción de la paz, quizá el más vanguardista de esta época”, expresó Restrepo, quien a la vez recordó que estas conversaciones serán para poner la grandeza de la paz por encima de las diferencias y para entender que son precisamente esas diferencias las que nos enriquecen como nación.
El jefe del Equipo Negociador del gobierno colombiano señaló que serán fieles al acuerdo suscrito en marzo pasado y destacó de esa agenda dos elementos: “la decisión de las partes de ejecutar los temas con la mayor “celeridad y rigurosidad”, criterios estos que quedaron expresamente consignados en el acuerdo”.
Restrepo fue enfático al señalar que “No venimos a esta mesa a explorar; ya la fase exploratoria quedó atrás. El objetivo de esta mesa –cito el texto- es “subscribir un Acuerdo Final para terminar el conflicto armado y acordar transformaciones en búsqueda de una Colombia en paz y equidad”. Esa es nuestra misión.
Terminar el conflicto para construir la paz
Durante el discurso de instalación, Juan Camilo Restrepo se refirió a las víctimas y a la necesidad de que el Eln se comprometa a no cometer más secuestros.
“Colombia honra a las víctimas de este conflicto. Insistiremos, como lo hemos hecho sin cesar, en que los derechos de las victimas están en el centro de estas conversaciones. La verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición son las raíces profundas y reales de la reconciliación. Estamos aquí para garantizar y defender esos derechos”.
Por eso recalcó que la ciudadanía no quiere más enfrentamientos en los que mueran jóvenes, los ataques contra la infraestructura que afectan a la población; la intranquilidad de vivir acosados e intimidados por la violencia diaria y de la inaceptable práctica del secuestro.
“Quiero aprovechar esta ocasión para invitar al Eln a darle hoy la mejor noticia a los colombianos con su renuncia pública al secuestro. No es aceptable en ningún caso, ni en el humanitario, ni en el plano ético, ni en el político, ni jurídico. El secuestro fue, ha sido y será injustificable”, dijo el jefe del equipo negociador.
Eln apuesta por acuerdos sucesivos para cese bilateral del fuego
El jefe negociador del Ejército Nacional de Liberación (Eln) en las conversaciones de paz con el Gobierno colombiano, Pablo Beltrán, dijo durante su discurso de instalación de la Mesa Pública de Negociaciones, que le apuesta a alcanzar una serie de “acuerdos sucesivos proyectados a materializar un cese bilateral del fuego”.
También consideró necesario que ambas partes demuestren voluntad de cambio.
Pablo Beltrán fue el primero en hablar. Primero agradeció al país, a los medios y a la comunidad internacional por el apoyo en los diálogos.
“Nos alienta la esperanza de ponerle fin al enfrentamiento. Nos alienta el respaldo de los pueblos, gobiernos vecinos y la comunidad internacional”, dijo Beltrán y agregó que es el momento del Eln de cambiar “en pro de la democratización”.
Pronunciamiento
La Federación Nacional de Departamentos que agrupa a los gobernadores de Colombia, expresó que el inicio de las conversaciones con el Eln se constituyen en un nuevo y significativo avance en el empeño de consolidar la paz en nuestra nación.
En un comunicado de tres puntos manifestaron al jefe del Equipo Negociador del Gobierno, Juan Camilo Restrepo, a todos sus integrantes y a los delegados del Eln, su disposición de apoyar y acompañar el sacrificado trabajo que les demandará el cumplimiento de su trascendental responsabilidad, así mismo su voluntad de hacer presencia activa en los espacios de participación que se establezcan en este proceso con el ánimo de contribuir a la generación, desde las regiones y sus comunidades, de propuestas e iniciativas que hagan realidad la construcción de la paz desde los territorios.