Fogata de niños terminó en tragedia, toda vez que uno de ellos perdió el equilibrio y cayó sobre las llamas, sufriendo quemaduras de segundo y tercer grado en el 45 por ciento de su cuerpo, que lo mantienen en estado agónico.
Lo que en principio era una diversión para varios niños que jugaban con fuego al prender un montón de basura, terminó en tragedia, toda vez que uno de ellos perdió el equilibrio y cayó sobre las llamas, sufriendo quemaduras de segundo y tercer grado en el 45 por ciento de su cuerpo, que lo mantienen en estado agónico.
El caso se registró a las 11:45 de la mañana de ayer, en una de las calles de la vereda Las Flores, ubicada a una hora de la cabecera municipal de Chimichagua, Cesar.
En medio de la algarabía por lo sucedido y ante los gritos de auxilios tanto del afectado, como de los otros menores salieron los adultos para sacar de la candela al niño y trasladarlo hasta el hospital Inmaculada Concepción del municipio de Chimichagua, en donde trataron de estabilizarlo, pero ante la gravedad de las quemaduras, los médicos lo remitieron al Hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar.
El menor fue valorado por los especialistas y ante la complejidad del paciente, ayer tarde analizaban la posibilidad de remitirlo a la Clínica de Alta Complejidad del Caribe, para ser atendido en el pabellón de quemados.
Las autoridades hicieron un llamado a los padres de familia para que tengan más cuidado con sus hijos y así eviten que ocurran casos tan nefastos como el ocurrido en Chimichagua.
Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN
Fogata de niños terminó en tragedia, toda vez que uno de ellos perdió el equilibrio y cayó sobre las llamas, sufriendo quemaduras de segundo y tercer grado en el 45 por ciento de su cuerpo, que lo mantienen en estado agónico.
Lo que en principio era una diversión para varios niños que jugaban con fuego al prender un montón de basura, terminó en tragedia, toda vez que uno de ellos perdió el equilibrio y cayó sobre las llamas, sufriendo quemaduras de segundo y tercer grado en el 45 por ciento de su cuerpo, que lo mantienen en estado agónico.
El caso se registró a las 11:45 de la mañana de ayer, en una de las calles de la vereda Las Flores, ubicada a una hora de la cabecera municipal de Chimichagua, Cesar.
En medio de la algarabía por lo sucedido y ante los gritos de auxilios tanto del afectado, como de los otros menores salieron los adultos para sacar de la candela al niño y trasladarlo hasta el hospital Inmaculada Concepción del municipio de Chimichagua, en donde trataron de estabilizarlo, pero ante la gravedad de las quemaduras, los médicos lo remitieron al Hospital Rosario Pumarejo de López, de Valledupar.
El menor fue valorado por los especialistas y ante la complejidad del paciente, ayer tarde analizaban la posibilidad de remitirlo a la Clínica de Alta Complejidad del Caribe, para ser atendido en el pabellón de quemados.
Las autoridades hicieron un llamado a los padres de familia para que tengan más cuidado con sus hijos y así eviten que ocurran casos tan nefastos como el ocurrido en Chimichagua.
Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN