Un campesino con una voz privilegiada que prefirió el monte a la vida artística.  Así define el maestro Andrés ‘El Turco’ Gil al cantante Plinio Rafael Rico Camargo, quien falleció este sábado, a sus 72 años, en el Instituto Cardiovascular del Cesar de Valledupar.

Rico Camargo, quien venía enfermo por diabetes y complicaciones renales, no soportó las afecciones de salud que lo llevaron a estar internado por cerca de 25 días.

El nacido en Pedraza (Magdalena -de donde salió huyéndole a la pobreza- pero residente en Becerril (Cesar), tuvo su época ‘dorada’ a finales de la década del 70 e inicios de los 80. 

Grabó siete discos: el primer LP con Lucho Campillo, cuatro con Andrés ‘El Turco’ Gil y los demás con Los Hermanos Meriño y Harold Santana. 

Precisamente, en diálogo con EL PILÓN, el maestro ‘Turco’ Gil, quien conformó pareja con Plinio entre 1978 y 1979 y luego entre 1991 y 1993, lamentó la pérdida de su excompañero musical.

“Lamentable, una baja muy grande para el folclor, nos estamos quedando sin cantantes, mira que se han ido varios grandes, como Rafael Orozco, Diomedes Díaz, Jesús Manuel, Martín Elías, en fin…  la música vallenata sigue sufriendo bajas”, dijo ‘El Turco’.

El maestro de acordeones recordó que a Plinio lo conoció en una época en la cual estaba sin cantante y Juan Piña se lo recomendó, hecho que siempre agradeció porque conformaron una célebre unión que logró posicionar éxitos como ‘El Verano’, de Leandro Díaz, y ‘El cansancio del Poeta’, de Octavio Daza.

“Leandro Diaz decía que la mejor versión de ese disco ‘El Verano’ era la de ‘Turco Gil’ y Plinio Rico, que estaba bien cantao’. No creo estar equivocado, el cantante que cantaba más alto, el que más subía, era Plinio; Elías Rosado canta alto, pero Plinio tenía esa potestad de cantar notas bajas y luego subir”, explicó Gil. 

Según narra el historiador vallenato Jorge Naín, columnista de EL PILÓN, Plinio Rafael Rico, “fue descubierto como cantante por ‘Carmencito’ Mendoza y Ovidio Granados quienes llevaron el mensaje a Valledupar de que en Becerril había un muchacho campesino, que tenía una potente voz”. 

De inmediato, lo fue a buscar el acordeonero Luis Carlos Campillo, más conocido como ‘Lucho Campillo’, y así grabaron en el año 1977 un LP para el sello Victoria.

Luego, tras la recomendación de Juan Piña, ‘Turco’ Gil se enamoró de su canto y fue a Becerril a buscarlo.  Grabaron los trabajos ‘Durísimos’ y ‘Clásicos del Vallenato’. 

Plinio grabó posteriormente con los Hermanos Meriño, que venían de ser muy exitosos con Silvio Brito y grabaron un LP titulado ‘Un Paso más’. 

Los tonos que manejaba Plinio eran tan altos e intensos que, según historiadores, una vez quemó la consola en la que grababan en los estudios Ingeson de Bogotá.  Hecho que solo pocas voces en el mundo han logrado, según el ingeniero de sonido de la época.

Sin embargo, a pesar de su capacidad interpretativa, fue renuente a salir de su pueblo, Becerril, y a dejar su actividad campesina y de albañilería.  

‘PREFIRIÓ EL MONTE’: ‘TURCO’ GIL

Ni la insistencia de músicos como Rafael Orozco, quien los llamó para que le hiciera coros en el Binomio de Oro, logró convencerlo.

“Era un cantor campesino, pero le gustaba la rula, el machete, le gustó eso siempre, la última grabación en Discos Fuentes se me voló para meterse al monte.  A él lo llamó Rafael Orozco para que fuera corista del Binomio de Oro y no quiso. Le gustó más el monte que esta vida artística”, recordó el ‘Turco’. 

Reseñó el historiador Álvaro Rojano Osorio, en una columna para el portal Panorama Cultural, que: “Plinio no estaba preparado para el impacto de su popularidad, se desordenó, y como dice la canción El náufrago, en cada puerto tuvo un amor. Se olvidó de lo que dice Leandro Díaz en el tema Mañana, que grabó al lado del Turco Gil, que pese a tener amigos, al placer, en el mañana podía quedar solo y esperando la suerte que ya no ha de llegar, que la gloria y la simpatía suelen culminar en la nada”.

La velación del cantante se lleva a cabo en el barrio San Martín de Becerril y este domingo estará en cámara ardiente en la plaza principal para luego recibir cristiana sepultura en este municipio del centro del Cesar. Paz en la tumba de Plinio Rico.

POR JOSÉ ALEJANDRO MARTÍNEZ VEGA / EL PILÓN