Pese a los esfuerzos médicos de la Clínica Erasmo de Valledupar por reanimar a María Angélica Gómez Turizo, la otra mujer que había sufrido trauma craneoencefálico en el accidente de dos motocicletas registrado en la madrugada del pasado domingo en Chimichagua, ayer se produjo su deceso. Gómez Turuzo, de 32 años, viajaba como parrillera con un policía de civil, cuando se presentó el choque con otra moto.

El jueves en horas de la mañana había fallecido en el mismo centro asistencial la auxiliar en Farmacia, Carmen Rosa Fragoso Garrido, quien también iba como parrillera en la motocicleta con su esposo, Wainer Gómez Soto. “Mi hija se dirigía hacia la casa con un amigo policía y al parecer la otra motocicleta se quedó sin gasolina y se apagó en el centro de la calle, cuando fueron impactados y llevados por delante, a pesar que el conductor trató de esquivarlos.

A mi hija le descubrieron una herida abierta y un hematoma en la cabeza, lo que determinó su muerte, porque ella quedó inconsciente y nunca reaccionó”, expresó Orlando Gómez, padre de Maria Angelica. La fallecida había terminado auxiliar de criminalística, enfermería y secretariado y dejó un hijo de nueve años. El cadáver fue reclamado en horas de la tarde de ayer viernes y posteriormente fue trasladado hasta su tierra natal Chimichagua, donde será sepultada.

Por Abdel Martínez Pérez/ EL PILÓN
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