Autoridades indígenas denunciaron en la tarde de este jueves la muerte de uno de sus miembros cuando participaba en el suroeste de Colombia en la huelga agraria iniciada este lunes contra las políticas del Gobierno, lo que eleva a dos los fallecidos durante la protesta.

La Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN) aseguró en un comunicado que en las últimas horas han aumentado los “mecanismos de represión” por parte de la Policía, su escuadrón antidisturbios (Esmad) y efectivos del Ejército.

La autoridad indígena afirmó que “fruto de estas acciones ilegales” su compañero Gersaín Cerón murió y otros cuatro aborígenes resultaron heridos en el departamento del Cauca (suroeste).

Ante la situación, la ACIN reiteró su llamado a entidades como la Procuraduría o la Defensoría del Pueblo para que “intercedan lo antes posible, en pro de hacer respetar el derecho a la manifestación pacífica y a la vida”.

Con la muerte de Cerón, confirmada por la Defensoría, son dos los indígenas fallecidos desde que comenzaron las protestas el lunes, día en el que falleció Willington Quibarecama Nequirucama al caer de un viaducto tras evitar una tanqueta policial en Buenaventura, en la costa del Pacífico.

Al mismo tiempo, la Federación Colombiana de Periodistas (Fecolper) y el Círculo de Periodistas de Cali (CPC), rechazaron hoy las agresiones han sufrido periodistas por parte de las comunidades indígenas.

Las organizaciones de periodistas denunciaron que el reportero gráfico Oswaldo Páez fue apedreado y rociado con gasolina por indígenas apostados en la vía que conecta las ciudades de Cali y Popayán, en el suroeste del país.

En alusión a este caso, Fecolper y CPC exigieron garantías para los reporteros y recordaron a las organizaciones indígenas que los comunicadores “desplazados hasta los puntos de concentración y protesta sólo cumplen su función de informar sobre los hechos y en ningún momento tomará partido”.

La huelga, convocada por la Cumbre Agraria, Étnica, Campesina y Popular, tiene carácter indefinido y es para protestar por los supuestos “incumplimientos” del Gobierno a acuerdos firmados en 2013 y 2014 y por la “profundización de sus políticas neoliberales” que consideran “han entregado la soberanía a las transnacionales”.

EFE.