Por: Hernán Araujo Ariza Terminando la última semana de 2012, creo que es el momento propicio para hacer el balance del primer año como miembro del Concejo Municipal (CM) de Valledupar. Más que la vanidad que se manifiesta al hablar de uno mismo, realmente quiero rendir cuentas, con el único ánimo de informar lo realizado […]
Por: Hernán Araujo Ariza
Terminando la última semana de 2012, creo que es el momento propicio para hacer el balance del primer año como miembro del Concejo Municipal (CM) de Valledupar. Más que la vanidad que se manifiesta al hablar de uno mismo, realmente quiero rendir cuentas, con el único ánimo de informar lo realizado y así ser coherente con el término servidor público.
En enero empezó todo. Nos atrevimos a cuestionar la voluntad del alcalde de organizar unos carnavales, vinculando gran parte de su gabinete en la junta organizadora de esta fiesta. El llamado no fue atendido, pero pasada una semana -por los desmanes de orden público que provocó un desfile- las fiestas se suspendieron y terminaron dándonos la razón.
En abril se presentó al CM una modificación el Estatuto de Rentas Municipal. Se pretendía una tarifa base de un salario mínimo (SMLV) para el impuesto de Industria y Comercio. Dimos la discusión y se logró modificar para que no se cobrara el salario completo, sino la mitad de éste; aceptando que sería menos lesivo para los comerciantes pequeños.
En mayo aprobamos el Plan de Desarrollo Municipal (PDM) luego de hacerle 45 modificaciones. Para destacar, la modificación al ‘embeleco’ del aeropuerto regional en Los Venados. También agregamos el proyecto de Besotes, que hace poco nos informó el alcalde la buena noticia que fue revivido a instancias del gobierno nacional, por la gestión del Representante Pedro Muvdi. Lo incluímos, tal vez previendo que pasara lo que pasó. En general, fueron revisadas con rigor todas las metas y compromisos de cada secretaría. Finalmente se corrigieron muchas inconsistencias en este plan que nos regirá hasta 2015.
Preocupados por el riesgo -del municipio- de perder los predios del IDEMA, estuvimos con el concejal Jaime González y el Representante Juan Manuel Campo, ante el ministro de Agricultura; para evaluar la voluntad del Ministerio en procura de una solución.
La preocupación por el incipiente emprendimiento en la ciudad, también compartida con el concejal González; nos llevó a Barranquilla para conocer la oferta que en esta materia tiene la Universidad del Norte. En la última visita, nos acompañó el alcalde Fredys Socarrás, que se comprometió a poner en marcha un robusto programa que está contemplado en el PDM y que seguramente beneficiará a muchos jóvenes vallenatos.
Sobre el nudo de movilidad que afecta a unas 12 mil personas que residen en el noroccidente y que se complica por el tráfico del colegio de Comfacesar; insistí hasta el cansancio para que se ofrecieran alternativas de solución. Finalmente el alcalde decidió incluir ésta vía en el plan de obras de Valorización, lo que supone un camino incierto, y que demorará mínimo un par de años. Planteamos incluso una solución parcial, poco costosa y de fácil implementación para aliviar el problema; será seguir esperando que la secretaria de Tránsito acoja la propuesta o se invente otra mejor.
Sobre la cuestionada Ley 550, se realizó un foro abierto, para disipar dudas y que todos participaran.
En cuanto al Presupuesto 2013, aprobado en noviembre; denunciamos varias asignaciones presupuestales que no concuerdan con las metas del PDM, lo que desembocará en varias metas incumplidas al final del cuatrienio. También se develó un error en la asignación de $4.300 millones para un programa de mejoramiento genético, cuando en realidad debían ir a financiar el ambicioso proyecto hortofrutícola que se anunció desde un principio y sobre el que no ha habido mayor avance. Asumimos que fue un simple error de digitación, aunque imperdonable de todos modos.
Éste es el balance de un año de mucho aprendizaje y fortalecimiento personal. Todo lo relatado puede ser verificado con las actas y boletines de prensa, que reposan en el CM.
MI ÚLTIMA PALABRA: Leonardo Maya cuando fue concejal criticó la renuencia de algunos secretarios para acudir a las citaciones del CM; hoy rebusca excusas para no enfrentar los debates. Antes posaba de estadista y serio; ahora usa mentiras para enlodar la labor de algunos concejales. ¿Será que es esa la transformación de la que se habla por estos tiempos? ¿Será que al ‘cura’ se le olvidó su pasado de ‘sacristán’? En todo caso ojalá rectifique, porque -salvo que sea ésta la excepción- la soberbia y la altivez siempre son los estados inmediatamente anteriores a la caída.
Twitter: @pipearaujoariza