La llegada del restaurante ha despertado la emoción de los valduparenses. Arcos Dorados, la empresa que opera la marca McDonald’s en Colombia, habló con EL PILÓN. Acá le contamos los detalles de lo que significa su llegada a la ciudad. 

Cuando hablamos de  McDonald’s lo primero que se nos viene a la cabeza es comida deliciosa y sí, las hamburguesas y las papitas más famosas del mundo llegaron a Valledupar, pero no llegaron solas, llegaron acompañadas con la generación de oportunidades y aportes al cuidado del medio ambiente.

Con esta apertura Arcos Dorados ha generado 100 empleos formales para jóvenes de la región. El restaurante estará ubicado en la rotonda María Mulata, contará con un moderno diseño y componentes tecnológicos para que los valduparenses puedan disfrutar.

El nuevo McDonald’s de Valledupar hace parte de los restaurantes del futuro que cuentan con una experiencia 2.0. Incorpora todos los segmentos de McDonald’s tales como centro de postres, McDelivery, un McCafé, zona de juegos infantiles y un AutoMac doble carril para automóviles, motos, bicicleta  y/o cualquier otro transporte sobre ruedas. Además tendrá servicio 24 horas y más de 20 iniciativas de sostenibilidad, como parte de los pilares de Cambio Climático y Economía Circular, incluidos en su estrategia socioambiental llamada Receta del Futuro.

Héctor Orozco, director general de Arcos Dorados en Colombia, el operador de la marca  McDonald’s para Colombia, nos amplió la información.

¿Por qué Valledupar?

Dividiré en tres puntos la respuesta. Lo primero es un tema personal: Valledupar es una ciudad con una riqueza cultural que me fascina. Soy amante del vallenato, de la música, del baile. Era necesario unirnos con esta cultura. 

Segundo, es una zona en constante crecimiento. Valledupar es una ciudad que crece. Y tercero: a donde vamos nos encanta dar empleo formal para los jóvenes. Estamos dando una oportunidad de empleo a 100 jóvenes valduparenses. 

¿Empleo formal? 

Empleo formal con un contrato a término indefinido y cotizando a pensiones desde el primer día. Queremos seguir dando las primeras oportunidades en todo el país. Tuve la oportunidad de hablar con varios jóvenes. Una de ellas, Andrea, me contó que había tenido más de 8 trabajos, pero este es su primer trabajo formal. 

Este es un restaurante 2.0: ¿En qué consiste?

Porque implementamos más de 20 iniciativas de desarrollo sostenible que tiene la compañía en los nuevos restaurantes. Iniciativas de ahorro de energía con aires acondicionados de alta eficiencia con refrigerantes que no contaminan; reductores de caudal de agua, paneles solares, eficiencia en la iluminación, canecas de separación para facilitar el reciclaje de residuos aprovechables, entre otras.

¿Por qué creer en las primeras oportunidades? En los jóvenes sin experiencia…

Yo creo en las primeras oportunidades porque yo recibí una primera oportunidad que cambió mi vida. En Latinoamérica somos líderes en primer empleo formal. Tenemos jóvenes con 20 o 21 años gerenciando restaurantes. Pero eso sucede porque creemos en los jóvenes, es una convicción personal y de la compañía.

Cuando entras a una cocina de  McDonald’s no importa de qué color eres, tu religión, ingresos o preferencias sexuales. Todos somos iguales. Ese es nuestro ADN. 

¿Cómo contrata  McDonald’s a sus trabajadores?

Tenemos cuatro características. Lo primero es que no exigimos experiencia previa. En Colombia hay un círculo vicioso: se les exige experiencia a los jóvenes, pero no se les da la oportunidad. Nosotros creemos en las oportunidades. 

Lo segundo es que permitimos trabajar y estudiar. Eso es clave porque una sociedad educada se desarrolla. Nosotros los impulsamos: ‘Muchachos, si quieren crecer, tienen que estudiar’. 

La tercera es la inversión que hacemos en el entrenamiento. Como compañía tenemos 7 universidades de la hamburguesa en el mundo. En Latinoamérica está en Brasil. Desde allí hacemos entrenamiento online, que además es gratis para cualquier joven en el mundo. 

Y cuarto, creemos en la meritocracia y el crecimiento. En nuestro país, lastimosamente, a muchos solo se les da oportunidad si son amigos del amigo. Somos una empresa meritocrática. Gracias a eso soy director.

¿Qué expectativas tiene en Valledupar? 

Desde un comienzo queríamos estar frente a la Glorieta La María Mulata y poder servir comida de altísima calidad. Nuestra mayor expectativa es ofrecer la mejor experiencia a los valduparenses: si estoy en casa y quiero un domicilio, llegaremos con domicilio; si estoy en el carro, motocicleta o bicicleta, puedo pasar por el Automac que tiene las características más modernas del mundo. En Valledupar tiene dos carriles y los dos tienen menú work digitales, donde la gente puede ver cómo cambia el menú.

A propósito del tema de la atención, hablemos de los tiempos…

Nosotros somos un servicio rápido de comida con altísimos niveles de calidad. Podemos entregar comida fresca gracias a un desarrollo tecnológico que tenemos en nuestras cocinas, que, por supuesto, requiere una altísima inversión. 

También son famosos por sus horarios…

Vamos a trabajar 24/7. Siendo el primero en Valledupar. Venimos con una apuesta fuerte y muy completa, porque es lo que se merece la ciudad. Trajimos lo mejor, lo más avanzado en tecnología de  McDonald’s. Este restaurante se compara con cualquiera otro que se tengan en Estados Unidos o cualquier otro país.

¿Cómo lo ha tratado Valledupar?

Admiro profundamente la cultura de la ciudad. He venido a dos festivales vallenatos y me parece de las mejores fiestas que he estado en mi vida. Aprendí lo que era una parranda vallenata de verdad porque en Bogotá uno tiene una percepción diferente. 

Un mensaje para los vallenatos

Llegamos a Valledupar pensando en ustedes. Queremos que pasen buenos momentos en familia. A todos esos jóvenes que quieren tener esa primera cita:  McDonald’s es el sitio ideal, disfrutando de un cono o unas papitas.  McDonald’s es el lugar ideal para cerrar un negocio, reunirse con los amigos. Queremos ser su nueva casa.

Muchos se preguntan por qué no llegaron antes… 

Constantemente estamos viendo oportunidades para analizar dónde llegamos. No se nos había abierto la posibilidad del sitio que queríamos.  Ahora logramos uno de los sitios más importantes de la ciudad. Cuando tomo un taxi y le digo al taxista que me lleve al McDonald’s ya sabe dónde estamos ubicados. Todos los vallenatos pasan por la María Mulata en algún momento. 

Por Deivis Caro