Cuando el país se debatía en ese baño de sangre terrible de los grupos en conflicto, el Festival Vallenato incólume ofertaba a la nación un evento en convivencia ciudadana recreativo, relajante, lúdico, rico en su amalgama participativa de integración, la cual daba una imagen internacional a todo el mundo de la otra Colombia, la que […]
Cuando el país se debatía en ese baño de sangre terrible de los grupos en conflicto, el Festival Vallenato incólume ofertaba a la nación un evento en convivencia ciudadana recreativo, relajante, lúdico, rico en su amalgama participativa de integración, la cual daba una imagen internacional a todo el mundo de la otra Colombia, la que nunca estuvo en conflicto, la que anhelaba la paz, la Colombia musical de Carlos Vive, Jorge Celedón, Shakira, Juanes, el Binomio de Oro, Nelson Velásquez, Alex Manga (estos tres últimos con gran imagen en el exterior para nuestra música vallenata), la Colombia de Falcao, James Rodríguez. No cabe la menor duda, el Festival Vallenato ha sido durante 50 años un aliado de paz para todos los presidentes que se eligieron ese periodo.
Por la tarima del Festival Vallenato desfilaron muchas canciones que expresaban el clamor de paz que el pueblo colombiano emitía desde la aflicción y angustia de sus entrañas a causa de tanta violencia que parecía imparable, el lazo entre el Festival Vallenato y nuestro presidente y premio nobel Juan Manuel Santos, se estrechó más cuando en la tarima Consuelo Araujo el mandatario se comprometió a sacar adelante el Plan de Salvaguardia de la música tradicional vallenata, para su declaratoria de patrimonio intangible de la humanidad ante el Ministerio de Cultura y luego ante la Unesco.
Por otra, parte el Ministerio de Cultura, tiene en el Festival Vallenato un aliado de oro, la literatura que corre por cuenta de nuestros juglares, los eventos culturales, intercolegiales, universitarios, de barrios, las réplicas del Festival Vallenato han incrementado una gran cantidad de gestores culturales en todo el área del Caribe y gran parte de Colombia, en la danza, la pintura. Es de igual manera para el Ministerio de Comunicaciones, prensa, revistas, radio, televisión, el cine y ahora con las tecnologías de punta. Los trasportes, aéreos, terrestres, se desbordan con nuestro evento.
Todos los reyes en tarima nuevamente, será una performance digna de admirar, documentar, disfrutar por la nueva Colombia en paz y su ciclo de oro.
Cuando el país se debatía en ese baño de sangre terrible de los grupos en conflicto, el Festival Vallenato incólume ofertaba a la nación un evento en convivencia ciudadana recreativo, relajante, lúdico, rico en su amalgama participativa de integración, la cual daba una imagen internacional a todo el mundo de la otra Colombia, la que […]
Cuando el país se debatía en ese baño de sangre terrible de los grupos en conflicto, el Festival Vallenato incólume ofertaba a la nación un evento en convivencia ciudadana recreativo, relajante, lúdico, rico en su amalgama participativa de integración, la cual daba una imagen internacional a todo el mundo de la otra Colombia, la que nunca estuvo en conflicto, la que anhelaba la paz, la Colombia musical de Carlos Vive, Jorge Celedón, Shakira, Juanes, el Binomio de Oro, Nelson Velásquez, Alex Manga (estos tres últimos con gran imagen en el exterior para nuestra música vallenata), la Colombia de Falcao, James Rodríguez. No cabe la menor duda, el Festival Vallenato ha sido durante 50 años un aliado de paz para todos los presidentes que se eligieron ese periodo.
Por la tarima del Festival Vallenato desfilaron muchas canciones que expresaban el clamor de paz que el pueblo colombiano emitía desde la aflicción y angustia de sus entrañas a causa de tanta violencia que parecía imparable, el lazo entre el Festival Vallenato y nuestro presidente y premio nobel Juan Manuel Santos, se estrechó más cuando en la tarima Consuelo Araujo el mandatario se comprometió a sacar adelante el Plan de Salvaguardia de la música tradicional vallenata, para su declaratoria de patrimonio intangible de la humanidad ante el Ministerio de Cultura y luego ante la Unesco.
Por otra, parte el Ministerio de Cultura, tiene en el Festival Vallenato un aliado de oro, la literatura que corre por cuenta de nuestros juglares, los eventos culturales, intercolegiales, universitarios, de barrios, las réplicas del Festival Vallenato han incrementado una gran cantidad de gestores culturales en todo el área del Caribe y gran parte de Colombia, en la danza, la pintura. Es de igual manera para el Ministerio de Comunicaciones, prensa, revistas, radio, televisión, el cine y ahora con las tecnologías de punta. Los trasportes, aéreos, terrestres, se desbordan con nuestro evento.
Todos los reyes en tarima nuevamente, será una performance digna de admirar, documentar, disfrutar por la nueva Colombia en paz y su ciclo de oro.