Aunque el paro fue por un día, los abogados públicos anunciaron más eventos en el marco de las protestas

Más de veinte audiencias de los procesos judiciales que se adelantan en el Palacio de Justicia de Valledupar fracasaron durante el día de ayer a causa de un paro de 24 horas que realizaron los abogados de la Defensoría del Pueblo contra esta entidad, en protesta del nuevo sistema de concurso implementado que aparentemente dejaría por fuera a algunos funcionarios.

Según los defensores, la convocatoria tendría ‘tintes políticos’, porque el sistema presentado podrían dejar por fuera a juristas experimentados que han prestado su servicio por más de 15 años a los ciudadanos que los han necesitado.

“Estamos haciendo esto porque la Defensoría del Pueblo ha implementado un sistema entre comillas de concurso pero que tiene un trasfondo netamente político. El actual defensor del pueblo está desmantelando la defensoría pública desconociendo las capacidades de idoneidad que tenemos los actuales defensores públicos y que hemos conseguido a lo largo de 15, 20 o más años de servicio con capacitación…ahora someterlos en un concurso disfrazado”, expresó Reinaldo Ochoa, defensor público adscrito a la Unidad Nacional de Justicia y Paz, que actúa como representante en el Cesar de víctimas del conflicto.

Los abogados iniciaron las protestas en horas de la mañana con un plantón en los estrados judiciales de la ciudad para con pancartas y arengas hacer valer sus derechos laborales.

No tenemos miedo a someternos a exámenes sino que nosotros venimos con una capacitación consolidada, además el supuesto concurso ni aún ganándolo le da a la persona que lo gane la estabilidad porque todavía queda a decisión de la Defensoría Regional…Nosotros no somos empleados públicos, no estamos sometidos al régimen de concurso porque somos contratistas”, agregó Ochoa.

En el cesar actualmente hay cerca de 102 defensores públicos que cubren hasta el 95 % de solicitudes de abogados en el departamento, atendiendo por día más de cinco audiencias por lo que el cese de actividades por un día generó traumatismos en el sistema judicial.

Por Marllelys Salinas M. / EL PILÓN
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