Desde hace varios años, en EL PILÓN decidimos tener una agenda en pro de la defensa del medio ambiente: bosques, ríos, ciénegas, animales, árboles… Durante muchos años, de norte a sur, hemos informado sobre lo que pasa con nuestra fauna y flora.
Desde hace varios años, en EL PILÓN decidimos tener una agenda en pro de la defensa del medio ambiente: bosques, ríos, ciénegas, animales, árboles… Durante muchos años, de norte a sur, hemos informado sobre lo que pasa con nuestra fauna y flora.
Buscamos que estos temas estén en nuestras discusiones y los tomadores de decisión no los miren con desdén. Por ejemplo, los árboles de Valledupar. Desde hace 7 años realizamos el foro ‘Hablemos del árbol’ con el objetivo de sentar autoridades, ambientalistas, líderes, academia, y ciudadanía en general, a hablar y discutir sobre alternativas para atender y proteger la capa verde de la ciudad.
De esos espacios han surgido compromisos y actividades. En el 2022, la Alcaldía de Valledupar se comprometió a realizar la declaratoria de los árboles patrimoniales de la ciudad, luego de una investigación dirigida por el periodista Martín Elías Mendoza.
La Secretaría de Desarrollo Económico y Medio Ambiente del exalcalde Mello Castro no cumplió la promesa. El desafío o compromiso lo tiene la nueva administración. Pero no solo con los árboles patrimoniales, con todo el bosque seco tropical que convive en Valledupar.
Como dice el titular de nuestro editorial: los árboles merecen más. Las administraciones solo hablan de los árboles, parece ser, cuando los ambientalistas presionan. Solo reaccionan, no actúan ni previenen. Actúan y menosprecian el valor de los árboles, o al menos eso parece.
No creemos que el cemento sea el enemigo. En ciudades como Valledupar con una tercera parte de la población en pobreza multidimensional, el cemento(vías, urbanizaciones, parques) es sinónimo deprogreso. Pero si en Valledupar no logramos unequilibrio entre el cemento y el medio ambiente, la ciudad será insostenible. Ya lo estamos viendo con las altas temperaturas.
Es importante, primero, que los árboles sean protagonistas en la agenda y las comunicaciones de las administraciones; y segundo, que no solo reciban las sobras del presupuesto. Proteger nuestro arbolado urbano es un deber es pensar en la ciudad de los próximos 20 años. Y también en la actual, porque si no párense en un andén sin árboles ni sombra al menos 10 minutos en cualquier hora desde las 10:00 de la mañana a las 4:00 de la tarde.
Desde hace varios años, en EL PILÓN decidimos tener una agenda en pro de la defensa del medio ambiente: bosques, ríos, ciénegas, animales, árboles… Durante muchos años, de norte a sur, hemos informado sobre lo que pasa con nuestra fauna y flora.
Desde hace varios años, en EL PILÓN decidimos tener una agenda en pro de la defensa del medio ambiente: bosques, ríos, ciénegas, animales, árboles… Durante muchos años, de norte a sur, hemos informado sobre lo que pasa con nuestra fauna y flora.
Buscamos que estos temas estén en nuestras discusiones y los tomadores de decisión no los miren con desdén. Por ejemplo, los árboles de Valledupar. Desde hace 7 años realizamos el foro ‘Hablemos del árbol’ con el objetivo de sentar autoridades, ambientalistas, líderes, academia, y ciudadanía en general, a hablar y discutir sobre alternativas para atender y proteger la capa verde de la ciudad.
De esos espacios han surgido compromisos y actividades. En el 2022, la Alcaldía de Valledupar se comprometió a realizar la declaratoria de los árboles patrimoniales de la ciudad, luego de una investigación dirigida por el periodista Martín Elías Mendoza.
La Secretaría de Desarrollo Económico y Medio Ambiente del exalcalde Mello Castro no cumplió la promesa. El desafío o compromiso lo tiene la nueva administración. Pero no solo con los árboles patrimoniales, con todo el bosque seco tropical que convive en Valledupar.
Como dice el titular de nuestro editorial: los árboles merecen más. Las administraciones solo hablan de los árboles, parece ser, cuando los ambientalistas presionan. Solo reaccionan, no actúan ni previenen. Actúan y menosprecian el valor de los árboles, o al menos eso parece.
No creemos que el cemento sea el enemigo. En ciudades como Valledupar con una tercera parte de la población en pobreza multidimensional, el cemento(vías, urbanizaciones, parques) es sinónimo deprogreso. Pero si en Valledupar no logramos unequilibrio entre el cemento y el medio ambiente, la ciudad será insostenible. Ya lo estamos viendo con las altas temperaturas.
Es importante, primero, que los árboles sean protagonistas en la agenda y las comunicaciones de las administraciones; y segundo, que no solo reciban las sobras del presupuesto. Proteger nuestro arbolado urbano es un deber es pensar en la ciudad de los próximos 20 años. Y también en la actual, porque si no párense en un andén sin árboles ni sombra al menos 10 minutos en cualquier hora desde las 10:00 de la mañana a las 4:00 de la tarde.