El proceso de selección del nuevo Personero de Valledupar está llegando a su fin. Hoy en la mañana en el recinto del Concejo Municipal se realizó la entrevista privada con los dos finalistas en el concurso de méritos, Alfonso Campo Martínez y Lorena Cabrera Ramírez, quienes expusieron sus perfiles personales y profesionales ante los miembros de la Mesa Directiva de la Corporación, integrada por los concejales Guido Castilla, Alex Pana y Dorismel Celedón.

Los resultados de la calificación de la entrevista a los dos aspirantes a este cargo del Ministerio Público, favoreció a Lorena Cabrera, quien fue calificada por los integrantes de la Mesa Directiva con nueve puntos, frente a 2,33 de Alfonso Campo Martínez.

El presidente del Concejo, Guido Andrés Castilla González, le dio dos puntos a Campo y nueve a Cabrera; el primer vicepresidente, Alex Pana Zarate, dio igual puntaje, mientras que el segundo vicepresidente, Dorismel Enrique Celedón Vega, calificó la entrevista de Campo con un tres y a Lorena otro nueve.

Esta calificación fue sumada a las otras pruebas que han hecho los dos aspirantes seleccionados por la Universidad Autónoma del Caribe. En la prueba de conocimiento Alfonso Campo sacó 49,2 y Lorena Cabrera 54, en la prueba comportamental 14,7 y 6,45, respectivamente, y en competencias laborales y antecedentes Campo 14,25 y Cabrera 12. Hasta ahí llevaba ventaja Alfonso Campo, pero con la calificación de la entrevista, Lorena Cabrera lo sobrepasó un punto.

La entrevista, penúltima fase
Sobre la entrevista, el presidente del Concejo, Guido Castilla, señaló que en búsqueda de la transparencia, la Policía inspeccionó que no hubiese dentro del recinto ningún aparato electrónico con el cual se pudieran hacer grabaciones que luego se reprodujeran mediante redes sociales o medios de comunicación, sin embargo se desconoció la capacidad de los mismos medios de comunicación para exponer a la luz pública la transparencia que se pretendió en esta fase del proceso de elección, por lo que no se permitió la entrada de periodistas al recinto.
Alfonso Campo Martínez, actual Personero y aspirante a reelección en el cargo, contó que se sintió a gusto durante la entrevista.

“Las preguntas fueron respondidas porque eran sobre lo que he hecho y lo que estaría dispuesto a hacer en caso dado de que se diera mi elección como personero en estos cuatro años”.

Por su parte, Lorena Cabrera Ramírez, también aspirante al cargo, enfatizó que “fue una entrevista muy interesante, temas de actualidad, postconflicto, medio ambiente, preguntas sobre la vigilancia como veedor del tesoro público, que es la gestión principal del Personero de Valledupar. Estaba preparada para hacer una entrevista común y corriente de concurso público, independientemente lo hicieran tres o 19 concejales, la capacidad intelectual no la pone quien pregunta, si no quien responde”.

Tutelas fueron y vinieron

A partir de la Ley 1551 del 2012, la elección de Personeros en Colombia quedó sujeta a la realización previa de un concurso de méritos a cargo de los concejos municipales. Éste aún no culmina y las dilataciones sufridas se debieron a las tutelas que fueron y vinieron desde principios de este mes.

La primera de ellas fue instaurada el 18 de diciembre pasado por Lorena Cabrera Ramírez en el Juzgado Tercero Penal Municipal, y mediante la que buscaba amparar sus derechos al debido proceso.

En esta ocasión, el proceso era contra el Concejo Municipal y la Universidad Autónoma del Caribe.

Un día antes, el claustro universitario había respondido un recurso de reposición, dejando en firme la lista definitiva de los puntajes obtenidos por ambos candidatos en cuanto a competencias laborales y análisis de antecedentes. Campo Martínez obtuvo en ese momento 78,15 puntos y Cabrera Ramírez 67,95.

El 21 de diciembre, la universidad respondió a la tutela al juez, aseverando que no todas las certificaciones laborales proporcionadas por Lorena Cabrera reunían el contenido indispensable conforme a las disposiciones del concurso.

El 26 de diciembre, el actual Personero y candidato a reelección solicitó formalmente al procurador General de la República, Alejandro Ordóñez, constituir una agencia especial de vigilancia al trámite de la acción de tutela. En consecuencia, el 28 de diciembre el Procurador designó a la viceprocuradora General de la Nación, Marta Castañeda, para que vigilara la acción de tutela.

El 31 de diciembre, Lorena Cabrera volvió a interponer una tutela contra la Universidad Autónoma del Caribe para una nueva evaluación de su hoja de vida, dejando sin efecto el primer puntaje otorgado.

Posteriormente, el 12 de enero Alfonso Campo Martínez impugnó la tutela de Cabrera Ramírez. En esa instancia, tanto la Procuraduría General de la República como la misma Universidad Autónoma del Caribe habían impugnado los fallos de tutela emitidos por el juez tercero penal con función de garantías, Gabriel Lascarro.

El último proceso jurídico lo protagonizó Campo Martínez, quien interpuso otra tutela ante el Juzgado Segundo Penal Municipal para la Adolescencia con funciones de control de garantías de Valledupar, al considerar que se estaba violando el debido proceso con la modificación de un acto administrativo que estipuló que solo los tres concejales miembros de la Mesa Directiva realizarían la entrevista, tal como finalmente se cumplió puesto que el fallo a este recurso jurídico fue negativo.

Sobre este último episodio, Campo Martínez aseguró que “ya esa es una etapa culminada, hay que esperar a ver qué tiene esta nueva etapa. Hay unas instancias jurídicas que no se han agotado y que puedo seguir agotando, eso es válido en el derecho. Lo importante es la calificación de la mesa principal”.

Entre tanto, Cabrera Ramírez afirmó que “una vez estén los concursos de méritos para los cargos públicos, siempre será un tema dispendioso y la acción de tutela será un medio fundamental para los participantes porque, de creerse violado un medio fundamental, siempre estará ese medio constitucional para protección de los mismos. Entonces siempre va a tornarse un poco dispendioso siempre que uno de los participantes haga uso de ellos.
No obstante, aseguró Cabrera que “de ser cualquiera el resultado final, lo acataré. Mi inconformidad fue en cuanto a la evaluación de mi hoja de vida, yo no podía permitir siendo abogada con una experiencia, que no se reconociera, de manera arbitraria. Indudablemente aceptaremos la decisión una vez se recalcule todo”.

Por Jennifer Del Río Coronell