Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 5 noviembre, 2016

Lo que está de moda no incomoda

Se ha venido una avalancha de críticas contra el artista guajiro Silvestre Dangond, sin duda alguna una estrella de talla mundial, tiene un talento innato que Dios le ha regalado, y todo cuanto hace tiene su sello personal. Silvestre siendo un artista innovador está explorando nuevos horizontes, la nueva canción en realidad no es vallenata, […]

Se ha venido una avalancha de críticas contra el artista guajiro Silvestre Dangond, sin duda alguna una estrella de talla mundial, tiene un talento innato que Dios le ha regalado, y todo cuanto hace tiene su sello personal.

Silvestre siendo un artista innovador está explorando nuevos horizontes, la nueva canción en realidad no es vallenata, pero es innegable que si tiene algunos ingredientes de nuestra música raizal, el acordeón en ciertos apartes es vallenato e indudablemente en su voz hay unos falsetes y un dejo y un tinte muy vallenato en algunos apartes, sobre todo cuando dice “…Parame bolas mi vida, tai bonita tai soltera…”, o me van a decir que ese estribillo criollamente cantado, así como el ay ombe que expresa, ¿no son vallenato?

Así a algunos no les guste o no estén de acuerdo conmigo, esa es una manera de mostrar nuestra cultura ante el mundo, el hijo prodigo de Urumita jamás ha negado sus orígenes y habiendo nacido con la nueva ola, jamás apartó al vallenato puro de su repertorio, el creció escuchando y aprendiéndole a los grandes y ese es uno de sus mayores orgullos; venir de la escuela tradicional.

Silvestre Francisco ha tenido una carrera ascendente y su proceso evolutivo ha generado cambios positivos, su imagen mejora día a día y es imposible no reconocer paralelamente la buena labor de su manager Carlos Bloom. Ahora dicen que Silvestre está copiando a Carlos Vives, si es así me parece perfecto pues Vives musicalmente es un ejemplo digno de imitar y sin duda lleva una gran ventaja ante otros grandes músicos colombianos.

La gente siempre critica, así ha pasado con todos los músicos que han llevado el vallenato a otro nivel, recuerdo claramente cuando el Binomio de Oro (el del inigualable Rafael Orozco) era blanco de críticas y hasta de burlas y después muchos no tuvieron otro camino que imitarlo.

Lo cierto es que mientras aquí algunos sufren, Silvestre triunfa, se aprieta su agenda, crecen sus cuentas bancarias, y por supuesto crece como persona, pues a pesar de sus múltiples compromisos, siempre saca tiempo para su familia, lo más chistoso del cuento es que ni atención les presta a los pocos que tratan de hacerle daño con sus criticas ponzoñosas, más sufren ellos en medio de su ignorancia y mientras tanto Sildancor llenando escenarios y llevando en alto nuestra bandera.

El tema ‘Ya no me duele más’ tiene una música pegajosa una letra bonita y en verdad no es vallenato, pero es el gancho para llegar a un público nobel, y también poner a escuchar vallenato a quienes nunca lo han hecho, pues les aseguro que Silvestre no dejará por fuera del repertorio de sus conciertos la música vallenata, también para que se interesen en venir a conocer estas tierras, indaguen sobre nuestro folclor y se enamoren de nuestra cultura. Musicalmente los artistas están en todo su derecho de explorar otros géneros, fusionar ritmos, ¿se imaginan a Juan Gabriel solo cantando rancheras? ¿A Daniel Santos solo cantando música jibara, guarachas y Sones Montunos y no sus boleros?

Miremos que músicos como Paul Simon, grabaron temas raizales como ‘El cóndor pasa’, un tema con ADN indígena, andino, entonces ¿por qué nuestros artistas no pueden incursionar en otros géneros? Estrellas como Alejandro Fernández han pasado de la ranchera al pop y viceversa, Luis Miguel ha grabado muchísimos géneros y nada pasa. Dejemos de ser tan retrógrados y egoístas, no hablemos babosadas sin saber, todas las producciones que nuestros artistas hagan y que lleguen a otras latitudes le convienen es a nuestra tierra.

Columnista
5 noviembre, 2016

Lo que está de moda no incomoda

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Julio Mario Celedon

Se ha venido una avalancha de críticas contra el artista guajiro Silvestre Dangond, sin duda alguna una estrella de talla mundial, tiene un talento innato que Dios le ha regalado, y todo cuanto hace tiene su sello personal. Silvestre siendo un artista innovador está explorando nuevos horizontes, la nueva canción en realidad no es vallenata, […]


Se ha venido una avalancha de críticas contra el artista guajiro Silvestre Dangond, sin duda alguna una estrella de talla mundial, tiene un talento innato que Dios le ha regalado, y todo cuanto hace tiene su sello personal.

Silvestre siendo un artista innovador está explorando nuevos horizontes, la nueva canción en realidad no es vallenata, pero es innegable que si tiene algunos ingredientes de nuestra música raizal, el acordeón en ciertos apartes es vallenato e indudablemente en su voz hay unos falsetes y un dejo y un tinte muy vallenato en algunos apartes, sobre todo cuando dice “…Parame bolas mi vida, tai bonita tai soltera…”, o me van a decir que ese estribillo criollamente cantado, así como el ay ombe que expresa, ¿no son vallenato?

Así a algunos no les guste o no estén de acuerdo conmigo, esa es una manera de mostrar nuestra cultura ante el mundo, el hijo prodigo de Urumita jamás ha negado sus orígenes y habiendo nacido con la nueva ola, jamás apartó al vallenato puro de su repertorio, el creció escuchando y aprendiéndole a los grandes y ese es uno de sus mayores orgullos; venir de la escuela tradicional.

Silvestre Francisco ha tenido una carrera ascendente y su proceso evolutivo ha generado cambios positivos, su imagen mejora día a día y es imposible no reconocer paralelamente la buena labor de su manager Carlos Bloom. Ahora dicen que Silvestre está copiando a Carlos Vives, si es así me parece perfecto pues Vives musicalmente es un ejemplo digno de imitar y sin duda lleva una gran ventaja ante otros grandes músicos colombianos.

La gente siempre critica, así ha pasado con todos los músicos que han llevado el vallenato a otro nivel, recuerdo claramente cuando el Binomio de Oro (el del inigualable Rafael Orozco) era blanco de críticas y hasta de burlas y después muchos no tuvieron otro camino que imitarlo.

Lo cierto es que mientras aquí algunos sufren, Silvestre triunfa, se aprieta su agenda, crecen sus cuentas bancarias, y por supuesto crece como persona, pues a pesar de sus múltiples compromisos, siempre saca tiempo para su familia, lo más chistoso del cuento es que ni atención les presta a los pocos que tratan de hacerle daño con sus criticas ponzoñosas, más sufren ellos en medio de su ignorancia y mientras tanto Sildancor llenando escenarios y llevando en alto nuestra bandera.

El tema ‘Ya no me duele más’ tiene una música pegajosa una letra bonita y en verdad no es vallenato, pero es el gancho para llegar a un público nobel, y también poner a escuchar vallenato a quienes nunca lo han hecho, pues les aseguro que Silvestre no dejará por fuera del repertorio de sus conciertos la música vallenata, también para que se interesen en venir a conocer estas tierras, indaguen sobre nuestro folclor y se enamoren de nuestra cultura. Musicalmente los artistas están en todo su derecho de explorar otros géneros, fusionar ritmos, ¿se imaginan a Juan Gabriel solo cantando rancheras? ¿A Daniel Santos solo cantando música jibara, guarachas y Sones Montunos y no sus boleros?

Miremos que músicos como Paul Simon, grabaron temas raizales como ‘El cóndor pasa’, un tema con ADN indígena, andino, entonces ¿por qué nuestros artistas no pueden incursionar en otros géneros? Estrellas como Alejandro Fernández han pasado de la ranchera al pop y viceversa, Luis Miguel ha grabado muchísimos géneros y nada pasa. Dejemos de ser tan retrógrados y egoístas, no hablemos babosadas sin saber, todas las producciones que nuestros artistas hagan y que lleguen a otras latitudes le convienen es a nuestra tierra.