La película del fútbol colombiano arranca un nuevo capítulo: Copa América Chile – 2015. Con el debut ante Venezuela, la selección Colombia tiene el reto de revertir lo hecho en el 2001, cuando ganó el título del certamen, o superar lo hecho el año anterior en el Mundial de Brasil, quinto lugar. Es mentira que […]
La película del fútbol colombiano arranca un nuevo capítulo: Copa América Chile – 2015. Con el debut ante Venezuela, la selección Colombia tiene el reto de revertir lo hecho en el 2001, cuando ganó el título del certamen, o superar lo hecho el año anterior en el Mundial de Brasil, quinto lugar.
Es mentira que el fútbol colombiano no da para más, eso es falso. Atrás debe quedar la mediocridad, el conformismo generado con nuestra propia historia.
Colombia se coronó campeón de la Copa América, cuando fue sede. Ese año no vino Argentina, el país pasaba por un momento crítico debido al conflicto armado y entre críticas y desprestigio salió airoso.
En aquella ocasión, nuestra selección ganó sus seis juegos, marcando 11 goles y no recibiendo ninguno. Salimos con el mejor arquero, Óscar Córdoba, y el goleador del torneo, Víctor Hugo Aristizábal, con seis tantos. El técnico fue Francisco Maturana.
Ahora todo es distinto. Colombia lleva un plantilla renovada desde el banco técnico hasta la mentalidad en los jugadores. Atrás queda una generación con jugadores veteranos que nos dieron grandes alegrías, ahora nos aprestamos a ver una camada con ideas frescas como se necesitan en el fútbol.
José Pékerman conoce ya su plantilla. Le dio el cintillo de capitán a Radamel Falcao García, quien lleva un doble peso; orientar sus compañeros y opacar su baja producción de goles en Inglaterra. Pero no estará solo, por los costados contará con el goleador del último Mundial, James Rodríguez, y por el otro Juan Guillermo Cuadrado, cuando ellos están ‘enchufados’, Colombia juega a otro nivel.
Es el momento para sentirse orgulloso de la tricolor, pero no prepotentes. Colombia juega el fútbol que enamora a cualquier aficionado y que destruye con una jugada el esquema táctico de cualquier rival.
Venezuela nunca ha sido un rival fácil para los nuestros, pero cada partido como los días, que son semejantes, pero no iguales. Fe para nuestro equipo y que la senda del triunfo se abra hasta el 4 de julio, cuando podamos gritar ¡Campeón!
PD: Lo mostrado en el grupo A no es bueno. Chile fue el único que ganó y lo hizo por errores de los ecuatorianos; Bolivia y México no tienen nada.
Por Carlos Mario Jiménez
La película del fútbol colombiano arranca un nuevo capítulo: Copa América Chile – 2015. Con el debut ante Venezuela, la selección Colombia tiene el reto de revertir lo hecho en el 2001, cuando ganó el título del certamen, o superar lo hecho el año anterior en el Mundial de Brasil, quinto lugar. Es mentira que […]
La película del fútbol colombiano arranca un nuevo capítulo: Copa América Chile – 2015. Con el debut ante Venezuela, la selección Colombia tiene el reto de revertir lo hecho en el 2001, cuando ganó el título del certamen, o superar lo hecho el año anterior en el Mundial de Brasil, quinto lugar.
Es mentira que el fútbol colombiano no da para más, eso es falso. Atrás debe quedar la mediocridad, el conformismo generado con nuestra propia historia.
Colombia se coronó campeón de la Copa América, cuando fue sede. Ese año no vino Argentina, el país pasaba por un momento crítico debido al conflicto armado y entre críticas y desprestigio salió airoso.
En aquella ocasión, nuestra selección ganó sus seis juegos, marcando 11 goles y no recibiendo ninguno. Salimos con el mejor arquero, Óscar Córdoba, y el goleador del torneo, Víctor Hugo Aristizábal, con seis tantos. El técnico fue Francisco Maturana.
Ahora todo es distinto. Colombia lleva un plantilla renovada desde el banco técnico hasta la mentalidad en los jugadores. Atrás queda una generación con jugadores veteranos que nos dieron grandes alegrías, ahora nos aprestamos a ver una camada con ideas frescas como se necesitan en el fútbol.
José Pékerman conoce ya su plantilla. Le dio el cintillo de capitán a Radamel Falcao García, quien lleva un doble peso; orientar sus compañeros y opacar su baja producción de goles en Inglaterra. Pero no estará solo, por los costados contará con el goleador del último Mundial, James Rodríguez, y por el otro Juan Guillermo Cuadrado, cuando ellos están ‘enchufados’, Colombia juega a otro nivel.
Es el momento para sentirse orgulloso de la tricolor, pero no prepotentes. Colombia juega el fútbol que enamora a cualquier aficionado y que destruye con una jugada el esquema táctico de cualquier rival.
Venezuela nunca ha sido un rival fácil para los nuestros, pero cada partido como los días, que son semejantes, pero no iguales. Fe para nuestro equipo y que la senda del triunfo se abra hasta el 4 de julio, cuando podamos gritar ¡Campeón!
PD: Lo mostrado en el grupo A no es bueno. Chile fue el único que ganó y lo hizo por errores de los ecuatorianos; Bolivia y México no tienen nada.
Por Carlos Mario Jiménez