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Columnista - 12 septiembre, 2014

Lo bueno y lo malo

El gobernador Luis Alberto Monsalvo, adelanta obras en todos los municipios con mucho juicio, tal como lo dije cuando salió elegido, está haciendo las cosas bien planificadas de acuerdo a su formación de economista y juicioso ejecutor. Las hay de todas clases: hospitales, colegios, vías terciarias y secundarias, acueducto, alcantarillado, obras en el sector agropecuario, […]

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El gobernador Luis Alberto Monsalvo, adelanta obras en todos los municipios con mucho juicio, tal como lo dije cuando salió elegido, está haciendo las cosas bien planificadas de acuerdo a su formación de economista y juicioso ejecutor. Las hay de todas clases: hospitales, colegios, vías terciarias y secundarias, acueducto, alcantarillado, obras en el sector agropecuario, pavimentación de calles y avenidas, etc., etc., menos en la vía que urgentemente se necesita y a gritos la pedimos todos, Valledupar – La Paz y por todas partes se ven en construcción canchas de futbol, micro, básquetbol, vóleibol y escenarios deportivos como el nuevo Estadio Armando Maestre Pavajeau, la Villa Olímpica, el 12 de Octubre, Las Flores, el Parque Los Cortijos y en La Paz, el Chorro de Pepe Castro y hay instalados gimnasios al aire libre que son unos paraísos públicos, en donde viejos y jóvenes acuden a hacer ejercicios para alargar la vida, ya que el “ejercicio es salud y el deporte es vida”.

Pero ahí viene el pero, que vaina, siempre hay un pero, da vergüenza lo que está pasando en la Villa Olímpica, en donde hay varios invasores y no tiene vías de acceso para el estadio de softbol, es el colmo de los colmos que se encuentre una casa ilegal, invasora, casi en el centro de la Villa al lado de la cancha de softbol y una calle obstruida donde nadie dice nada y el estado del Estadio de Beisbol, en una oportunidad cuando lo inauguramos siendo yo Director de Coldeportes, catalogado como el mejor del país, da pena y avergüenza y si no tenemos vocación beisbolera, conviértanla en una buena cancha de futbol y entréguensela a la Liga para que ella responda por su conservación y en casos de emergencia como el de hoy, el del Valledupar Futbol Club no estemos arrimados en otros lares. Hasta aquí lo bueno.

En La Paz, yo no sé que está pasando, hay ceguera e inoperancia por todas partes, pues pululan las invasiones a la entrada de Valledupar y a la salida de Villanueva, San Diego y Manaure y están acabando con el emblemático “Cerrito”, ante la mirada indiferente de todo mundo, ya que las autoridades no actúan, ni ningún pacífico dice nada, ahí todo el mundo es ciego y sordo, La Paz y su futuro no le importa a nadie, cuanta falta hacen las voces altaneras, pero de mucho peso de Benjamín Costa, Hernando y Hernán Morón, Tobías Murgas, Pedro Olivella Araujo y muchos más que están en el más allá que revientan de inconformidad sin poder hacer nada.

Y si en La Paz llueve, me dicen que en Bosconia no escampa, pues las invasiones las hay todos los días y en todas partes, sin que mi buen amigo Jorge Patiño, catalogado como el mejor Alcalde del Cesar haga nada y vea esas invasiones como una cosa natural, sin pensar que más tarde esas actitudes y displicencias le podrán costar al erario municipal muchos miles de millones de pesos, olvidándose que existe una ley que obliga a repetir el valor de los daños a los funcionarios que por negligencia lo permitieron. Ojo Jorge, mucho cuidado. Hasta aquí lo malo.

Bueno Gobernador, siga así con las manos llenas pero generosas, porque hay muchos que las tienen repletas pero día a día quieren más y más sin servirle a nadie, confirmando aquello de que la plata no harta.

Columnista
12 septiembre, 2014

Lo bueno y lo malo

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
José M. Aponte Martínez

El gobernador Luis Alberto Monsalvo, adelanta obras en todos los municipios con mucho juicio, tal como lo dije cuando salió elegido, está haciendo las cosas bien planificadas de acuerdo a su formación de economista y juicioso ejecutor. Las hay de todas clases: hospitales, colegios, vías terciarias y secundarias, acueducto, alcantarillado, obras en el sector agropecuario, […]


El gobernador Luis Alberto Monsalvo, adelanta obras en todos los municipios con mucho juicio, tal como lo dije cuando salió elegido, está haciendo las cosas bien planificadas de acuerdo a su formación de economista y juicioso ejecutor. Las hay de todas clases: hospitales, colegios, vías terciarias y secundarias, acueducto, alcantarillado, obras en el sector agropecuario, pavimentación de calles y avenidas, etc., etc., menos en la vía que urgentemente se necesita y a gritos la pedimos todos, Valledupar – La Paz y por todas partes se ven en construcción canchas de futbol, micro, básquetbol, vóleibol y escenarios deportivos como el nuevo Estadio Armando Maestre Pavajeau, la Villa Olímpica, el 12 de Octubre, Las Flores, el Parque Los Cortijos y en La Paz, el Chorro de Pepe Castro y hay instalados gimnasios al aire libre que son unos paraísos públicos, en donde viejos y jóvenes acuden a hacer ejercicios para alargar la vida, ya que el “ejercicio es salud y el deporte es vida”.

Pero ahí viene el pero, que vaina, siempre hay un pero, da vergüenza lo que está pasando en la Villa Olímpica, en donde hay varios invasores y no tiene vías de acceso para el estadio de softbol, es el colmo de los colmos que se encuentre una casa ilegal, invasora, casi en el centro de la Villa al lado de la cancha de softbol y una calle obstruida donde nadie dice nada y el estado del Estadio de Beisbol, en una oportunidad cuando lo inauguramos siendo yo Director de Coldeportes, catalogado como el mejor del país, da pena y avergüenza y si no tenemos vocación beisbolera, conviértanla en una buena cancha de futbol y entréguensela a la Liga para que ella responda por su conservación y en casos de emergencia como el de hoy, el del Valledupar Futbol Club no estemos arrimados en otros lares. Hasta aquí lo bueno.

En La Paz, yo no sé que está pasando, hay ceguera e inoperancia por todas partes, pues pululan las invasiones a la entrada de Valledupar y a la salida de Villanueva, San Diego y Manaure y están acabando con el emblemático “Cerrito”, ante la mirada indiferente de todo mundo, ya que las autoridades no actúan, ni ningún pacífico dice nada, ahí todo el mundo es ciego y sordo, La Paz y su futuro no le importa a nadie, cuanta falta hacen las voces altaneras, pero de mucho peso de Benjamín Costa, Hernando y Hernán Morón, Tobías Murgas, Pedro Olivella Araujo y muchos más que están en el más allá que revientan de inconformidad sin poder hacer nada.

Y si en La Paz llueve, me dicen que en Bosconia no escampa, pues las invasiones las hay todos los días y en todas partes, sin que mi buen amigo Jorge Patiño, catalogado como el mejor Alcalde del Cesar haga nada y vea esas invasiones como una cosa natural, sin pensar que más tarde esas actitudes y displicencias le podrán costar al erario municipal muchos miles de millones de pesos, olvidándose que existe una ley que obliga a repetir el valor de los daños a los funcionarios que por negligencia lo permitieron. Ojo Jorge, mucho cuidado. Hasta aquí lo malo.

Bueno Gobernador, siga así con las manos llenas pero generosas, porque hay muchos que las tienen repletas pero día a día quieren más y más sin servirle a nadie, confirmando aquello de que la plata no harta.