La comunidad del corregimiento de Patillal, ubicado al norte de Valledupar, sostuvo un encuentro con el alcalde Mello Castro González y otros funcionarios de la administración municipal el pasado fin de semana. Allí los patillaleros aprovecharon la presencia del mandatario para exponer  sus necesidades y quejas.

La carencia del abastecimiento de agua potable que ha padecido Patillal desde su creación en el año 1784 es el ‘dolor de cabeza’ más grande que tiene esta población. Han sido muchas las promesas realizadas por los candidatos a la alcaldía durante las campañas electorales, pero pocas las obras que se han concretado para beneficio de la comunidad.

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Cabe recordar que en el mes de septiembre del año 2020 el Órgano Colegiado Administrativo y Decisión, OCAD, aprobó $10.495 millones para ser invertidos en el proyecto de optimización del sistema de acueducto de Patillal, en ese momento Castro González ratificó que con el proyecto se beneficiaría a esta población con mejoras en la cobertura, calidad y continuidad del agua potable. 

Pero a la fecha los patillaleros continúan esperando que los recursos se vean materializados. “Siempre hemos tenido agua cruda. Esperamos poder abrir la primera llave con agua potable”, expresó Luis Eduardo Vega, uno de los asistentes a la reunión. La comunidad confía en que a finales del año en curso este anhelo sea una realidad, ya que actualmente cuentan con la planta de tratamiento, pero no con el preciado líquido. 

Además de esta obra se pidió el encerramiento del megacolegio, la construcción de la placa huella de la vía al cementerio y la canalización de un arroyo. Durante el encuentro el alcalde de Valledupar anunció también la construcción de una glorieta con un monumento del compositor Rafael Escalona. “El Mello dijo que ya se tenía el presupuesto para el encerramiento del colegio y que todo estaba disponible para el nuevo acueducto que viene hasta la planta de tratamiento”, reafirmó el ciudadano. 

Por su parte, César Leonardo Maestre Oñate, presidente de la Junta de Acción Comunal de Patillal, la solución de fondo a esta y otras problemáticas está lejos. “Escuchamos con ‘bombos y platillos’ que se va a realizar el acueducto, pero no sabemos cuándo ni dónde”, manifestó, toda vez que el proyecto no ha sido socializado ante la comunidad. 

Cabe recordar que la construcción de la planta de tratamiento de agua potable se inició durante el gobierno de Fredys Socarras. “Esa fue una obra que quedó inconclusa porque no reúne los requisitos para el acueducto; han pasado tres administraciones y nada que se le da una solución que nos beneficie a todos”, precisó el líder comunal.

Otros temas que generan preocupación es la inseguridad; al tratarse de uno de los sitios turísticos del departamento del Cesar, Maestre hizo un llamado contundente. “Venimos exigiendo pie de fuerza. No vemos los retenes ni las medidas que se habían anunciado en tema de seguridad, entre otros aspectos que no han sido solucionados”, insistió Maestre Oñate.

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SIN AGUA APTA PARA EL CONSUMO HUMANO

El hecho de no contar con agua potable en el corregimiento de Patillal ha sido una gran dificultad para sus habitantes, especialmente para los niños y adultos mayores, quienes han tenido afectaciones en la salud que van desde brotes en el cuerpo, parásitos y enfermedades diarreicas.  La llegada del agua potable tras cincuenta años de espera mejoraría significativamente la calidad de vida de esta población. Tras el encuentro, la comunidad insistió en la creación de una veeduría ciudadana vigilante y expectante al cumplimiento de los compromisos pactados.

Por: Andreina Galvez