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Judicial - 21 octubre, 2017

Le arrancaron una oreja por oponerse al hurto de la moto

Dos presuntos delincuentes, oriundos del sur del Cesar que al parecer se trasladaron al departamento de Santander a delinquir y le mutilaron una oreja a un carnicero porque se opuso al hurto de su motocicleta, fueron aprehendidos por la Policía en el municipio de Girón

Las autoridades de Santander tratan de ubicar los sitios utilizados para la comercialización de partes de las motocicletas robadas. Foto referencia.
Las autoridades de Santander tratan de ubicar los sitios utilizados para la comercialización de partes de las motocicletas robadas. Foto referencia.
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Dos presuntos delincuentes, oriundos del sur del Cesar que al parecer se trasladaron al departamento de Santander a delinquir y le mutilaron una oreja a un carnicero porque se opuso al hurto de su motocicleta, fueron aprehendidos por la Policía en el municipio de Girón.

Los supuestos asaltantes responden a los nombres de José Gregorio Rodríguez Loaiza, de 21 años, y Luis Alfonso Montesino Pinto, de 24 años, quienes fueron arrestados por miembros de la Sijín. Una vez las autoridades competentes les legalizaron la captura, los enviaron a la Cárcel Modelo de Bucaramanga.

En el mismo procedimiento de la fuerza pública, las autoridades recuperaron la motocicleta que le habían hurtado al carnicero, valorada en siete millones de pesos. Según las autoridades, los dos capturados registraban órdenes de captura vigentes, emanadas por el Juzgado Segundo Penal Municipal con funciones de control de garantías de la capital de Santander, por los delitos de hurto calificado y agravado, porte ilegal de armas de fuego agravado, secuestro simple y tentativa de homicidio.

El afectado fue identificado como Benjamín Landazábal Arias, de 50 años, y aunque se resistió al atraco, fue despojado de un millón en efectivo y su motocicleta, pero esta última fue recuperada por la fuerza pública.

El informe de las autoridades de Santander, informaron que los supuestos delincuentes estarían inmersos en cuatro hechos similares, asociados al hurto de motocicletas mediante la modalidad de intimidación con arma de fuego, y, al parecer, una vez se robaban las motocicletas procedían a ‘desguazarlas’ para comercializar sus partes en el mercado ilegal, como una fuente de financiación para continuar ejerciendo sus fechorías.

Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN

 

 

 

Judicial
21 octubre, 2017

Le arrancaron una oreja por oponerse al hurto de la moto

Dos presuntos delincuentes, oriundos del sur del Cesar que al parecer se trasladaron al departamento de Santander a delinquir y le mutilaron una oreja a un carnicero porque se opuso al hurto de su motocicleta, fueron aprehendidos por la Policía en el municipio de Girón


Las autoridades de Santander tratan de ubicar los sitios utilizados para la comercialización de partes de las motocicletas robadas. Foto referencia.
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Dos presuntos delincuentes, oriundos del sur del Cesar que al parecer se trasladaron al departamento de Santander a delinquir y le mutilaron una oreja a un carnicero porque se opuso al hurto de su motocicleta, fueron aprehendidos por la Policía en el municipio de Girón.

Los supuestos asaltantes responden a los nombres de José Gregorio Rodríguez Loaiza, de 21 años, y Luis Alfonso Montesino Pinto, de 24 años, quienes fueron arrestados por miembros de la Sijín. Una vez las autoridades competentes les legalizaron la captura, los enviaron a la Cárcel Modelo de Bucaramanga.

En el mismo procedimiento de la fuerza pública, las autoridades recuperaron la motocicleta que le habían hurtado al carnicero, valorada en siete millones de pesos. Según las autoridades, los dos capturados registraban órdenes de captura vigentes, emanadas por el Juzgado Segundo Penal Municipal con funciones de control de garantías de la capital de Santander, por los delitos de hurto calificado y agravado, porte ilegal de armas de fuego agravado, secuestro simple y tentativa de homicidio.

El afectado fue identificado como Benjamín Landazábal Arias, de 50 años, y aunque se resistió al atraco, fue despojado de un millón en efectivo y su motocicleta, pero esta última fue recuperada por la fuerza pública.

El informe de las autoridades de Santander, informaron que los supuestos delincuentes estarían inmersos en cuatro hechos similares, asociados al hurto de motocicletas mediante la modalidad de intimidación con arma de fuego, y, al parecer, una vez se robaban las motocicletas procedían a ‘desguazarlas’ para comercializar sus partes en el mercado ilegal, como una fuente de financiación para continuar ejerciendo sus fechorías.

Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN